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Ya somos más Venezuela

Escrito por Francisco Gómez Caja
Viernes, 26 Noviembre 2021 21:02

La realidad es que la COVID-19 o la pandemia del coronavirus, ha trasformado la convivencia por obra y gracia de los que sustentan el poder. Ahora es una ideología llamada Covidianismo, que sitúa una supuesta protección de la “salud” como argumento ultimo para ordenar las relaciones políticas, económicas, culturales y sociales, y estas han servido para hacer mas dúctil y maleable a la sociedad ante el poder, haciendo a los poderosos y ricos más ricos, a los pobres más y más pobres, y ha dado a los gobernantes la oportunidad de sacar su vena de tiranos, sin que tengan que pagar peaje alguno.

No debemos de olvidar, que el tribunal Constitucional le ha dicho tres veces consecutivas al Sr. Sánchez, que sus actos durante la pandemia han sido inconstitucionales, violando el control parlamentario, y los derechos de los ciudadanos, y esto es instaurar una dictadura sin ningún tipo de control. Ahora que ya tiene abierto el camino y que no le ha pasado nada, quizás muchos no se den cuenta, pero este psicópata lo que pretende es eliminar las Instituciones. “Sabe muy bien que mientras haya un juez independiente y un tribunal que juzgue con criterios profesionales no podrá demoler el sistema, tiene que controlarlos para destruirlos, y tiene que hacer esto con el tribunal Constitucional, para que no haya control sobre las leyes, ya que así este el tirano, repito, eliminará la democracia. Cuando estoy escribiendo esto, recuerdo que hace unos meses tuve la oportunidad de hablar con un facultativo venezolano, y conforme yo hablaba de lo que estaba viendo en este país, él no paraba de decirme “yo ya lo he vivido”.

Y me pregunto, porqué aquello bueno que teníamos (humildad, sencillez, modestia, naturalidad, franqueza, espontaneidad…) han sucumbido y se han transformado en (orgullo, narcisismo, petulancia, vanidad, arrogancia…). Todo ha cambiado para peor en este país, hasta el extremo que lo último, lo que no habríamos imaginado nunca limitar las reuniones familiares, hasta en los domicilios privados, y después de aquello la psicosis del miedo, ya ni la familia es como antes “Sagrada”.

El poder en las instituciones públicas y de empresas privadas, obtenido con las masas de acoso que utilizan para imponer dogmas, las redes sociales, y los medios de comunicación que sirven al poder, conquistan al asalto la mente de los pueblos, ante el miedo a sufrir represalias o linchamiento, aceptan ideologías para sentirse dentro del “rebaño”. El resultado es una sociedad dócil, guiada por la desinformación y las doctrinas impuestas apenas cuestionadas, como la del cambio climático, el ecologismo hipócrita, el racismo, el intervencionismo estatal o el feminismo radical, siempre vigilado por el “ojo que todo lo ve”.

La tiranía ideológica está trasformando la sociedad en rebaños serviles, condenados al pensamiento único. Los ejes izquierda o derecha dicen defender cosas distintas, pero las cuestiones de fondo son exactamente las mismas, cuando el sentido común está abandonado y liquidado, y la libertad de expresión cada vez más censurada, cuando se abandona la razón y la lógica, y se sustituye por demagogia, cuando se vende igualdad de derechos y oportunidades, cuando la realidad, lo que se impone es igualdad en resultados. La tecnología utilizada para tener un control total de la población, para saber cada detalle de nuestros comportamientos y movimientos, y un control exhaustivo en el ámbito educativo, imponiendo una muy deficiente enseñanza, porque a los imbéciles hijos de los trabajadores no se les debe enseñar a pensar, y así se dominan mejor. Y ante este maremágnum surgen los pequeños movimientos contrarios extremos, que tienen en común que rechazan los dogmas y la tiranía. Como en su día se rechazaba en este país la dictadura, ahora muy pocos rechazan la tiranía de un presidente de gobierno que nos oprime en todos los sentidos, pero sobre todo nos empobrece cada día un poco más, para que tengamos que vivir mendigando. Cuida y mima a los que a él le benefician, y va creando estómagos agradecidos, y se olvida de todos los demás, como de los agricultores y ganaderos que para respirar están hipotecando su vida para poder vender sus productos. Mientras el héroe es el Sr. de Mercadona y otros similares que se hacen multimillonarios al ahogarlos con sus bajos precios. Tampoco parece que le preocupan los transportistas a los que pretenden sacrificar con más tasas más impuestos. Ni le importa mucho las fuerzas de orden público “lo suyo es beneficiar a los delincuentes” para que creen el trauma del miedo. Ni le importa el medio millón de trabajadores de la industria que se quedan en el paro, porque lo chinos tenían que hacer lo que no nos interesaba, hoy nos tienen cogidos por nuestras partes blandas, y 15.000 personas han perdido su puesto de trabajo. Pero esto merece un capítulo aparte.

Parece ser que a este gobierno social comunista lo único que le preocupa es la amnistía que hubo en la transición, cuando los únicos que queda de aquella época es la ETA. Claro que esto no es más que un bote de humo, una forma de desprestigiar la transición de 1978, y así poder cargarse nuestro sistema democrático. Los partidos de la oposición no se den cuenta de la jugada “del enfermo”, porque están demasiado ocupados en sus luchas internas por el poder, tirando a los que destacan para dejar a los mediocres. Un poder que nunca tendrán con una dictadura social comunista similar a la de Venezuela en donde están siempre tomando nota ZP y Monedero.

Todo está ya dominado por el tirano, y por miserables con demasiado poder. Mientras se predica que todo va bien y el Consejo de Ministros está apoyado por golpistas, herederos del terrorismo y partidos nacionalistas llenos de odio que sueñan con destruir España, unos ministros donde imperan los mediocres, corruptos e ineptos, y a la cabeza Sánchez, del que no se fían ni sus aliados en Europa la OTAN, la OCDE, el FMI ni lo quieren en ningún foro internacional. Es una vergüenza para todos los que queremos a nuestro país.

El filosofo y pensador libre de ataduras ideológicas por su demostrada trayectoria Fernando Sabater ha dicho “Para oponerse a Pedro Sánchez no hace falta ser de derechas, sino sensato. Una persona de izquierdas bien informada también debería estar en contra”. Uno de los miembros más destacado de su partido y un perjuicio para este país en su época, el Sr. ex presidente Felipe González, acaba de decir que los presupuestos de Sánchez, han sido pactados, como todos sabemos, con los enemigos de este país, y que esos presupuestos que son siempre el esqueleto de un proyecto de país no pueden ser buenos para España.

Un abrazo de Paco.

Francisco Gómez Caja