Que el tiempo da y quita razones es una máxima incuestionable. Solo hay que tener la paciencia suficiente y esperar a que los hechos se produzcan y en ese momento ponerlos de manifiesto.
Un desequilibrio de 1´6 millones de euros aboca al tripartito a un plan de saneamiento con medidas que eliminan 2 millones de euros del plan de empleo a través del Consell Agrari o reducen las ayudas directas a comercios y familias. Quienes vinieron a rescatar personas, se olvidaron de ellas.

Aunque esto al tripartito seguramente le da igual porque si no, no se entiende que lleven año tras año aprobando presupuestos que se incumplen de forma reiterada y que nos ha llevado a esta situación.

Cuando aprobaron el presupuesto del año pasado, ya les advertimos que por quinto año consecutivo incluyeron ingresos que no se producían para hacer frente a un incremento de gasto de más de 20 millones de euros respecto a la liquidación de 2018. Esa es su moderación

Esto de mentir y hacerse trampas demuestra una falta de sentido común insólita, pero el hacerlo de forma reiterada es temerario. Lo que se asemeja a una mera opinión se confirmó primero con la liquidación, esto es, con cómo realmente se han producido los ingresos y los gastos, y después, con tener que aprobar un plan de saneamiento para corregir en los próximos años esos datos negativos.

Hasta la fecha, el PSOE, junto a Compromís y EUPV, han incidido e inciden en sus meteduras de pata y para justificar sus ingresos anuncian mas impuestos, mas deuda y más prestamos cuando encarábamos la crisis económica acentuada por la pandemia.

Y no son actos gratuitos porque todos tienen su consecuencia y, lejos de intentar arreglarlo, lo estropean más.

Nunca han intentado ajustarse a lo real eliminando todo gasto superfluo y, frente a la contención que aconsejaban los expertos y cualquier propuesta de reducir impuestos o tasas que les hemos planteado y han rechazado, ya saben a quién le toca pagar: al vecino. Consecuencias de no gestionar.

Inventarse los ingresos es una mala solución y la falta de gestión el peor antídoto y así hemos llegado a esta situación, un calco de la situación que en la pasada legislatura gobernando el tripartito nos condujo a tener que elaborar un plan de saneamiento por las mismas prácticas.

En este 2020, calcaron los errores y todo lo que falta lo generan con más presión fiscal, con la venta de patrimonio y más deuda. Esta forma de proceder tiene unas consecuencias que pagan los vecinos.

Culpar de todo a la pandemia es mentir a los vecinos. Aprobar un presupuesto con los ingresos hinchados, ha hecho que a la primera situación inesperada con la que se han encontrado les saquen los colores. La crónica de una muerte anunciada.

El presupuesto estableció más de 71 millones en ingresos corrientes de los que realmente se produjeron 62. Pretender justificar que como bajó en un millón la recaudación de las tasas porque con la COVID no se prestaron determinados servicios y evidentemente no se cobran, es por lo que se ha generado este déficit, es mentir.

Igual que afirmar que hubo que pagar más a la SAG cuando todo lo que llevó a cabo la empresa municipal, se hizo desde la dirección general, reestructurando servicios. Si se cierran los colegios, ese personal se destina a otro servicio y no se paga más por ello. No se facturó de más porque ya estaba presupuestado.

Ni reestructuraron el presupuesto, ni tomaron medidas. Y tenemos que dar gracias que existía un ahorro del ejercicio anterior porque si no el desaguisado habría sido aún mayor.

Frente a nuestro gobierno que en plena crisis económica fue capaz de mantener saneadas las cuentas y destinar a ayudas y al plan de empleo más de 14 millones en dos años, el tripartito del PSOE genera un déficit y para arreglarlo hacen un plan de saneamiento que elimina el plan de empleo del Consell Agrari, reduce ayudas directas a familias y comercios, congelan la plantilla hasta diciembre de 2022 y advierten de la necesidad de reducir el número de sus efectivos, …

Y en cuanto a los ingresos, pese a que crearon nuevas tasas, reinstauraron las tasas de actividad y urbanística a autónomos y pymes o votaron en contra de reducir el IBI, ahora, en el plan establecen que en impuestos directos de los 36 que presupuestaban van a recaudar más de 40, pese a que recaudan 34. ¡6 millones más a pagar los vecinos! Estos son los que vinieron a rescatar personas: ¡ver para creer!

A los ciudadanos el gobierno del millón de euros nos sale muy caro, porque a estos “impuestores”, no les importa subir impuestos, aunque los barrios clamen por su abandono por falta de mantenimiento, las inversiones no se ejecuten, los proveedores cobren fuera de plazo y la ciudad esté abandonada.

Sergio Muniesa Franco
Portavoz del Partido Popular en el Ayuntamiento de Sagunto