Imprimir esta página

Los datos del paro: mercancía electoral para el PP

Escrito por Ximo Estal Lizondo
Viernes, 06 Febrero 2015 15:01

Desgraciadamente  el Gobierno esta  utilizando los últimos  datos del paro como "mercancía electoral", ya que más  que aumentar el empleo asalariado se reparten las horas de trabajo: trabajan más personas pero menos horas y en peores condiciones.

El triunfalismo del Gobierno no está justificado: España es el país con el mayor número de parados de toda la Unión Europea. El leve aumento del empleo que recoge la EPA es positivo pero insuficiente. Además, el empleo que se crea es temporal y a tiempo parcial, lo que unido a la devaluación salarial y a la congelación del salario mínimo está provocando un aumento insoportable de la desigualdad y la pobreza laboral.

Este crecimiento en media anual del empleo es desde todo punto insuficiente. Hay más ocupados que en 2013 pero muchos menos que en 2011: en lo que llevamos de la legislatura de la reforma laboral y la devaluación salarial se han destruido 1.077.225 empleos. El balance es mucho peor si se analiza lo ocurrido desde el inicio de la crisis: la pérdida de empleos alcanza los tres millones, por lo que con los creados en 2014 apenas se recupera una mínima parte.

Ha sido, por tanto, un escaso aumento de la población ocupada a costa de un elevado precio en precariedad: el 80% del nuevo empleo asalariado es temporal y el trabajo a tiempo parcial ya llega al 17% del total. Otra vez más, la incipiente recuperación se liga al empleo temporal con menores salarios, menos derechos y baja productividad.

Estamos en un proceso espurio de reparto del tiempo de trabajo, en el que más que aumentar el empleo asalariado se reparten las horas de trabajo: trabajan más personas pero menos horas y en peores condiciones. Estos empleos precarios son una salida de emergencia de corto recorrido, sobre la que,  no se puede sostener el futuro de la economía y la sociedad española.

Por otro lado, a pesar del discurso triunfalista del Gobierno, los datos del desempleo son demoledores. La población activa sigue cayendo: hay 235.525 personas activas menos que hacer un año de tal forma que más de la mitad de la reducción del desempleo, el 53% exactamente, se debe a no a que la gente haya encontrado empleo sino que ha dejado de buscarlo.

España es el país con el mayor número de parados de toda la Unión Europea: en 2014 hubo de media 5,610.400 personas desempleadas, que supone una tasa de paro del 24,4%, y lo más dramático es que 3,5 millones de ellas ya son parados de larga duración, la mayoría de ellos excluídos de la protección por desempleo.

Es necesaria una política presupuestaria que fomente el cambio estructural del aparato productivo, que promueva el uso eficiente de los recursos públicos en todos los niveles de la Administración y que ayude a recuperar la demanda interna. El objetivo debe ser sacar a la economía española de su patrón tradicional de crecimiento de bajo valor añadido, sin industria, empleo inestable y salarios bajos., para lo cual hace falta aumentar suficientemente la inversión pública y reorientarla hacia la mejora de la calidad y el contenido tecnológico de las empresas. La injusta rebaja de impuestos promovida por el Gobierno no persigue este fin, sino el rédito político a corto plazo.

Asimismo, es necesario mejorar el poder de compra de los salarios, para impulsar la demanda interna y provocar un aumento vigoroso del empleo y una rebaja rápida del paro.

Ximo Estal Lizondo
Secretario General de Enseñanza de CCOO del Camp de Morvedre y Alto Palancia