José M. Muñoz responsable de Acción Sindical de la Unión Intercomarcal de CCOO muestra su preocupación por el aumento de la temporalidad laboral en la comarca morvedrí. Así señala que a finales de marzo de 2018 había 1.150 personas más de alta en Seguridad Social que en marzo del año anterior. «Este incremento se debe principalmente al aumento del Régimen General y en menor medida al R.G.S.E. Agrario y al R.G.S.E. Hogar. Respecto a marzo de 2017, se han perdido puestos de trabajo en el R.E. Mar y en el R.E.T. Autónomos. Con todo, el primer trimestre de 2018 se cierra con 201 personas menos de alta en Seguridad Social que el cuarto trimestre de 2017».

Muñoz informa que los contratos a jornada reducida suponen el 28,17% del total de contratos registrados durante el 1er trimestre de 2018 y más del 30% de las afiliaciones al régimen general de la Seguridad Social se relacionan con contratos temporales, lo que supone un incremento de la temporalidad de más de 2 puntos respecto al primer trimestre de 2017. Asimismo matiza, que los hombres suponen el 57,57% de las personas afiliadas en el R.General, frente al 42,43% que representan las mujeres, «con el agravante que la contratación eventual afecta en mayor medida a las mujeres, pues el 32,72% de las mujeres dadas de alta en este régimen, lo están con contratos temporales, mientras la contratación temporal alcanza al 29,71% de los hombres».

Abundando en el tema, Muñoz subraya que en el Camp de Morvedre, más del 67% de las afiliaciones a la S.S. pertenecen al sector servicios, pero proporcionalmente el sector tiene menor representatividad en nuestra comarca que en la provincia de Valencia y en la Comunitat. «Por su parte, gracias al empuje de Sagunto, el sector industrial con más del 21% de afiliaciones comarcales tiene mayor representatividad en nuestra comarca que a nivel provincial y de Comunitat y considerando que Sagunto supone más del 75% de las afiliaciones comarcales y las previsiones de incremento de actividad para dicho municipio, da cuenta de la necesidad de mejorar las comunicaciones de la zona».

También subraya el sindicalista, la segregación por sexo, según sectores de actividad también se observa claramente en nuestro mercado laboral comarcal. «Las diferencias de afiliación entre mujeres y hombres son abismales en los sectores agricultura, industria y construcción», sectores en que las mujeres, en el mejor de los casos, a penas suponen el 16% de las afiliaciones del sector (como sucede en la Industria). «Y es que más del 88% de las mujeres que cotizan a la S.S. en la comarca, cotizan en el sector servicios, siendo éste el único en que las mujeres tienen mayor representatividad que los hombres, pues las féminas suponen más del 54% de las afiliaciones a Seguridad Social del sector servicios».

Prosigue Muñoz indicando que las últimas tasas comarcales publicadas de actividad, ocupación y paro son similares a las registradas en la provincia de Valencia y en la Comunitat Valenciana,pero que se aprecian diferencias al analizarlas por sexos, evidenciando que el mercado de trabajo en la comarca es más hostil para las mujeres, pues se incrementan las diferencias entre las tasas comarcales masculinas y femeninas respecto a las registradas en los otros niveles territoriales mencionados.

En el primer trimestre de 2018, 143.300 hogares de la Comunitat Valenciana tienen a todos sus miembros activos parados. El porcentaje de hogares con todos sus miembros activos en el paro aumenta 0,6 puntos respecto del trimestre anterior hasta situarse en el 7,2% del total, mientras el cómputo estatal es de 6,7% del total. Respecto al mismo trimestre del año anterior el descenso producido es del 0,8%.

Opina este dirigente sindical que el mercado de trabajo sigue mostrando un modelo de crecimiento «basado en la precariedad laboral y en la desigualdad. Dicho modelo ha de cambiarse por humanidad, por solidaridad y por justicia social pues el crecimiento económico y la creación de riqueza se deben al esfuerzo conjunto de toda la sociedad y por ello esa riqueza debería revertir en mejorar las condiciones laborales y sociales y en avanzar hacia la igualdad, con mejores empleos, mayores salarios y pensiones dignas», concluye Muñoz.