Los agentes sociales pasan revista a este año que ahora finaliza y, como no podía ser de otra manera, destacan que las repercusiones de la pandemia en todas las actividades de la vida, también en la económica y laboral, están muy presentes. En este sentido, la secretaria general de UGT, Pilar Tarragón Maicas resalta: «este año que ya termina vuelve a estar empañado en todo momento por el Covid-19 y todo lo que ello está conllevando, nuestras vidas han cambiado y con ello nuestra economía».
En esta línea, Tarragón pone de relieve la gravedad de la situación derivada de la pandemia, sobre todo entre los más vulnerables: «Por ello es importante empezar hablando de todas esas personas tan afectadas por la mala situación económica, recordemos a aquellas personas que subsisten con el SMI, que para este año es de 950 euros mensuales para una jornada de 40 horas semanales, y a aquellas personas que han estado a lo largo del año y siguen estando en situación de ERTE viendo con ello sus ingresos mermados».
Situación socialmente insostenible
Frente a tanta precariedad la líder de UGT pone sobre el tapete el disparatado incremento de los precios: «el precio de la electricidad no deja de subir, el de los hidrocarburos también, a ello se le suma el encarecimiento de otros productos básicos, esto lleva a que muchos hogares se encuentren con grandes dificultades para poder llegar a fin de mes, la situación es preocupante y amenaza con crear una situación socialmente insostenible. En UGT siempre hemos insistido y lo seguiremos haciendo en que la recuperación económica y social no será justa si se sustenta sobre la base de un empobrecimiento de la clase trabajadora».
Por su parte, el secretario general de CCOO del Camp de Morvedre, que se ha estrenado este 2021 en el cargo, Sergio Villalba Valero, reconoce que el coronavirus ha puesto de relieve las carencias del sistema: «La pandemia no ha afectado por igual a todos los sectores, pero sí ha mostrado las debilidades del sistema tras décadas de recortes, nefastas políticas energéticas y de precarización, así como la urgencia de avanzar en la transformación en diferentes ámbitos y aunque 2021 sigue siendo un año complicado y muy marcado por la COVID, nos muestra una reactivación más rápida de la economía y una salida diferente a la de crisis anteriores, gracias a determinadas medidas tomadas desde los gobiernos central y autonómico, en atención a las propuestas de los agentes sociales».
En parecidos términos se expresa la secretaria general de UGT, que también denuncia los recortes en el sistema nacional de salud: «la atención primaria acusa décadas de maltrato institucional, financiación insuficiente y mala gestión de los recursos en nuestra comunidad autónoma, la crisis mundial provocada por la Covid-19 ha agudizado el problema, especialmente en los centros de salud y la atención sanitaria. UGT ha pedido al Ministerio de Sanidad y a las Comunidades Autónomas que implementen acciones para detener el deterioro de la Atención Primaria y Comunitaria».
Es más, Pilar Tarragón habla de financiación claramente insuficiente: «La dotación presupuestaria a la atención primaria es insuficiente para mejorar las condiciones de los centros de salud, de los consultorios y de sus profesionales, es fundamental garantizar unos centros de salud abiertos, próximos y accesibles a toda la población, donde se prioricen las consultas presenciales, y tengan un papel complementario las telefónicas y telemáticas. Es necesario incorporar a los equipos más profesionales de especialidades como salud mental, fisioterapia, matronas, logopedia o atención temprana. UGT defiende este refuerzo en la atención primaria como imprescindible y, sobre todo, teniendo en cuenta el envejecimiento de la población».
El papel del sector público
Pese a todo, Villalba destaca el papel que ha jugado el sector público para remontar la pandemia: «en estos dos años, hasta las voces más económicamente liberales han reclamado la intervención del Estado, evidenciando la importancia de contar con un Estado con recursos. La Administración Pública, en sus distintos niveles y áreas, ha sido una de las piezas clave para hacer frente a una pandemia que ha llevado al límite a los sistemas públicos de todos los países, pero ha agudizado las debilidades de décadas de recortes en España, hándicaps que CC.OO. viene denunciando: la falta de profesionales, la alta temporalidad de su contratación y la falta de recursos públicos, así como el despilfarro que conlleva la privatización de los mismos».
Sin embargo, Villalba pone en valor el papel positivo que han jugado los ERTES durante la pandemia: «cabe destacar que, pese a todas las dificultades, determinadas medidas adoptadas por el gobierno, como fueron la aplicación de los ERTES, además de otras muchas, están permitiendo el mantenimiento del empleo y, en los últimos meses, se están consiguiendo bajadas muy importantes del desempleo, pese a lo que algunos auguraban tras la subida del SMI. Ahora toca seguir peleando porque el SMI siga subiendo, para que se desbloquee la negociación colectiva que, en algunos sectores, como la hostelería, lleva estancada desde 2014 y por la derogación de la reforma laboral, que como ya hemos demostrado en diferentes estudios, ha supuesto una precarización del empleo».
Accidentes laborales
Dentro de ese amplio capítulo de la precariedad laboral, la responsable de UGT, Pilar Tarragón se refiere a los accidentes laborales, ya que Sagunto no ha sido ajeno, sin ir mas lejos, el pasado 22 de enero se produjo un accidente mortal en el departamento de Recocido de ArcelorMittal Sagunto. Sobre este tema, Tarragón resalta: «en UGT estamos muy preocupados porque han aumentado los accidentes laborales con baja, y se han multiplicado los accidentes de tráfico ocurridos durante la jornada laboral, muchos de ellos se producen por presión en el tiempo, entregas con plazos ajustados y excesiva carga de trabajo, incluso por el uso de vehículos en condiciones inadecuadas, también mencionar la enorme incidencia de los riesgos psicosociales entre la población trabajadora. Para UGT, a la vista de los datos, resulta imprescindible tomar decisiones más drásticas en materia de siniestralidad laboral, con el fin de acordar medidas que pongan fin a esta situación. No podemos permitir que los trabajadores y trabajadoras sigan muriendo por el simple hecho de ganarse la vida».
Violencia de género
Para Pilar Tarragón, la violencia de género también es una lacra que es necesario erradicar, que está presente en el ámbito laboral: «también debemos hablar de la violencia y discriminación que existe y que se ejerce en el mundo laboral contra las mujeres, en este sentido UGT se compromete a impulsar la adopción de Protocolos contra el acoso sexual y por razón de sexo en el trabajo, y los planes de igualdad en las empresas para la eliminación de las discriminaciones por razón de género».
En este aspecto, Tarragón considera muy efican la negociación colectiva para luchar contra esta lacra: «consideramos que la negociación colectiva es un instrumento eficaz contra la violencia de género en el trabajo, y a pesar de que estamos y estaremos para ello en las empresas que se nos llame, es importante empezar a concienciarse de que la inversión en este sentido no es un gasto para la empresa, y que los planes de igualdad en las empresas no se deben hacer sólo porque la ley les obliga, sino porque son necesarios para observar las discriminaciones y corregirlas».
Sector industrial
Para el secretario general de CCOO en el Camp de Morvedre, Sergio Villalba, la pandemia también ha puesto a prueba al sector industrial, especialmente en una comarca donde las empresas más potentes tienen una elevada dependencia del sector auto.
En este sentido Villalba indica: «La crisis provocada por la pandemia también ha puesto encima de la mesa las debilidades de nuestro sector industrial y ha resaltado la necesidad de evolucionar hacía un modelo productivo y de sociedad mucho más ecológico y sostenible».
Más adelante, Villaba pide inversiones para que el sector acometa su transición ecológica: «En este sentido, reclamamos inversiones para que nuestra industria pueda realizar la transición ecológica que nos permita contar con un tejido industrial comarcal más fuerte y medioambientalmente sostenible. Lo anterior, a nivel comarcal se traduce en que, por un lado, el mercado del auto está sufriendo el citado proceso de transformación y vive un momento convulso, lo que afecta directamente a numerosas e importantes empresas de nuestra comarca, por depender de dicho sector, y, además, cuando parecía que el mercado se estabilizaba, surgió el problema del desabastecimiento de determinados productos tecnológicos, que es una señal de las carencias antes citadas del tejido industrial nacional, que incluso afecta directamente a empresas como Pilkington y dificulta la recuperación económica».
Los elevados costes energéticos tampoco ayudan, tal y como señala el responsable de CCOO, Juan Villalba: «A todo esto se suma el elevado precio, tanto de la energía como de las materias primas, lo que está poniendo en serias dificultades a la ciudadanía y a nuestras empresas y mostrando el lastre que para la economía actual suponen las pasadas políticas energéticas que en lugar de impulsar la producción mediante fuentes alternativas se dedicaron a poner impuestos al sol».
La secretaria general de UGT, Pilar Tarragón, tampoco describe una situación muy favorable para el sector industrial de la comarca: «tenemos que hablar de la situación del sector automóvil y sus empresas auxiliares a las que muchas industrias de la comarca pertenecen y están sufriendo una situación de incertidumbre con el cambio de vehículos de combustión a eléctricos, que agravado con la pandemia por la que aún estamos pasando, la falta de microchips, la transición energética y la falta de materias primas, nos deja un sector en plena reinvención y ajustes, que junto a la gran automatización que está sufriendo, nos depara una pérdida de puestos de trabajo brutal, cierres, deslocalización de plantas, algunas con criterios poco sostenibles, convenios a la baja, sueldos más precarios y perdida de trabajos de calidad. Por todo ello, UGT FICA esta y estará apoyando a todas las personas trabajadoras en sus empresas, mesas de negociación o donde sea necesario, porque si hablamos de una transición justa lo tiene que ser para todos y todas».
Parc Sagunt II
Pero no todo ha de ser negativo, Villalba resalta como aspecto positivo muy relevante para la comarca el inicio del proceso de expropiación de los terrenos de Parc Sagunt II: «parece que 2021 ha supuesto el arranque definitivo de Parc Sagunt II, para el que reclamamos un diseño integrado y sostenible, que vendrá acompañado de importantes mejoras, tanto en el Corredor Mediterráneo como del que para nosotros tiene una importancia clave para el desarrollo de la economía comarcal, como es la conexión del Corredor Cantábrico-Mediterráneo, lo que atraerá más inversiones al Camp de Morvedre y dará un plus de calidad, tanto a nuestra comarca como a la Comunitat Valenciana».
Acción sindical
Por otro lado, recuerda Villalba algunos aspectos de la acción sindical desarrollada durante este 2021 por el sindicato que dirige: «Este año también ha permitido volver a visibilizar la defensa de nuestros derechos mediante movilizaciones en la calle. Así, entre otras, hemos apoyado las concentraciones en apoyo de las reivindicaciones de amarradores en el puerto, concentraciones en apoyo de las empresas de limpieza de los hospitales, las concentraciones en apoyo a Pilkington que concluyó con una gran manifestación en defensa de la industria de nuestra comarca y, por supuesto, las actividades y reivindicaciones por la igualdad de género y la lucha contra la violencia machista, así como las actividades para reivindicar la mejora de las infraestructuras y recursos para la movilidad sostenible».
