A lo largo de toda la jornada de este miércoles, 24 de noviembre, ha permanecido reunida la mesa negociadora del ERE de Pilkington que, como se recordará, celebró su primera sesión el pasado 4 de noviembre. Hasta la fecha no se habían alcanzado avances en la negociación, que permitieran alejar el fantasma del cierre de instalaciones y el despido de 116 miembros de la plantilla. De ahí que los trabajadores, a propuesta de la representación social decidieran radicalizar el conflicto yendo a la huelga total.
Sin embargo, en la maratoniana sesión de este miércoles, después de muchos tiras y aflojas, sí ha sido posible llegar a un acuerdo, según han confirmado los representantes sindicales que han participado en la reunión en un escueto comunicado que literalmente dice así:«A las 22:00 horas del día de hoy, la comisión negociadora ha alcanzado un preacuerdo y no despidos traumáticos a falta de ratificación por la asamblea de trabajadores que se celebrará mañana [este jueves] en las instalaciones de la fábrica». La nota informativa emitida por los representantes sindicales deja claro que: «con este acuerdo, entre otros puntos, se garantiza la continuidad de la línea de laminado»
A falta de que se conozcan los detalles de lo pactado entre las partes, fuentes sindicales presentes en la reunión han confirmado a este periódico que se trata es de garantizar la continuidad de la línea de laminado al menos en el medio plazo, sin producirse despidos traumáticos, sino jubilaciones y bajas incentivadas, además de otras medidas que se darán a conocer pormenorizadamente a los trabajadores en la asamblea convocada al efecto.
Efectivamente, ha sido convocada asamblea urgente para las ocho de la mañana de este jueves en el comedor de la factoría. En ella decidirán los trabajadores si se da luz verde al acuerdo alcanzado en esta larga reunión de la mesa negociadora, de hecho, la representación social ya ha advertido en el escrito de convocatoria que las personas del turno de mañana acudan con la ropa de trabajo por si el preacuerdo alcanzado fuera valorado positivamente por la asamblea, en cuyo caso,«el turno de la mañana tendría que trabajar tras la asamblea», por lo que se desconvocaría automáticamente la huelga total que se inició esta semana en las instalaciones.
