Tal y como adelantaba El Económico, en la mañana de este martes se ha reunido la representación social con la dirección de la empresa y del Grupo, en cuya representación han asistido Stephan Rosebrock y Graziano Marcovecchio. Tras esta reunión la multinacional les ha trasladado a los representantes de los trabajadores algo que ya se veía venir.
Efectivamente, según ha explicado el comité de empresa en un comunicado, la compañía les ha comunicado que: «se ha tomado la decisión de cerrar la Línea de Laminado en Sagunto y de que se ha iniciado un proyecto para analizar los detalles del cierre, así como para buscar soluciones que den viabilidad al resto de la planta. En esta línea, han informado de que, en el plazo de dos semanas a un mes, presentarán un Expediente de Regulación de Empleo para dar inicio al periodo de consultas establecido legalmente».
Tras dar a conocer esta decisión, los representantes de los trabajadores han mostrado su decepción, según explican en la hoja informativa: «les hemos manifestado nuestra decepción, pues el esfuerzo que la plantilla estamos realizando está siendo muy grande y, sin embargo, la Dirección del Grupo decide dejar de luchar por el futuro, dejar de ofertar parabrisas desde nuestra planta. Decide cerrar y despedir.
Ante la decisión de cerrar la línea de laminado, la representación social ha indicado que, de momento, «le hemos transmitido a la Dirección que damos por rotos todos los acuerdos, solicitando la devolución inmediata del dinero de las pagas extras». Señalar finalmente que en la asamblea general prevista para mañana se informará con más detalle de lo acontecido en la reunión de hoy.
El futuro de la planta en el aire
La decisión tomada por la multinacional, de cerrar la línea de laminado pone en serio peligro la viabilidad de la factoría, puesto que como el propio comité de empresa reconoce la fábrica no tiene viabilidad sin esta instalación que se pretende cerrar. Por otro lado, el que se traslade carga de trabajo a otras plantas de Europa, que, en cierta medida, recuerda lo que sucedió con Bosal, tampoco favorece la situación de la fábrica de Sagunto.
Sobre todas estas cuestiones se ha pronunciado el presidente del comité de empresa, Rubén López Redondo, quien ha indicado: «En la reunión que hemos tenido con la dirección de la planta y la dirección del grupo nos han trasladado que han iniciado un proyecto para cerrar la línea de laminado en la planta de Sagunto. Ese proyecto ha sido aprobado ya por la dirección del grupo y nos han manifestado que, en las próximas semanas, nos van a presentar un expediente de extinciones, adjuntando, además, un plan de viabilidad para el resto de la planta».
Sin embargo, los trabajadores sostienen que la planta no será viable sin la línea de laminado: «como ya hemos manifestado desde el comité de empresa en reiteradas ocasiones, no vemos que haya posibilidad de viabilidad para el resto de la planta si cierran la línea de laminado», resaltaba el presidente del comité.
Además, Rubén López Redondo se ha referido al traslado de carga de producción a otras factorías que la multinacional tiene en Europa: «nos han manifestado también que las producciones que estamos realizando y que tenemos previsto realizar, al menos, hasta 2024, van a ser trasladadas a otras plantas para llenar los huecos que hay en plantas como Italia o Alemania o Polonia. Estamos, desde el comité de empresa, completamente en desacuerdo con esa decisión que, además, supone la ruptura de los acuerdos que habíamos tenido hasta este momento», Lamenta, López Redondo.
Concluye el presidente del comité de empresa indicando que han exigido el reintegro de las percepciones salariales a las que habían renunciado en base a los acuerdos alcanzados: «hemos exigido que de manera inmediata ingresen a toda la plantilla todos los esfuerzos salariales que se han hecho desde el último acuerdo, reingresando la parte proporcional de las pagas extraordinarias que no se han abonado».
