Después de que ArcelorMittal y los sindicatos hayan finalizado esta madrugada las negociaciones sin alcanzar un acuerdo, los trabajadores de las diferentes plantas que la multinacional tiene en España, moverán ficha en los próximos días. En este contexto hay que situar la reunión de la comisión ejecutiva de la sección sindical de CCOO de ArcelorMittal Sagunto (AMS), que analizará la situación en la que han quedado las negociaciones, concluidas sin alcanzar un acuerdo entre la empresa y los representantes sindicales.
Posteriormente, el día 5 de agosto, se celebrará una asamblea de afiliados de CCOO en el salón de actos de la sede del sindicato, donde se informará a los empleados de AMS de la situación y donde, además, se determinarán los pasos a seguir en el encuentro con la empresa, previsto para el día 7 de agosto. En esta última reunión los sindicatos trasladarán a los representantes de la compañía la decisión adoptada por las diferentes plantillas del grupo en España, entre ellas, la de AMS, sobre si se acepta o se rechaza la última propuesta de la multinacional que fue descartada por los sindicatos en la mesa negociadora.
Según han informado a este periódico fuentes de CC.OO. la última reunión de la mesa negociadora se ha prolongado por espacio de 14 horas, finalizando esta madrugada, sin que la representación sindical y la multinacional cerraran un preacuerdo, dentro del VII Acuerdo Marco para los próximos tres años. Como suele ocurrir en este tipo de negociaciones, la cuestión económica es el principal punto de discrepancia entre las partes. A pesar de que el proceso negociador se ha extendido por espacio de varios meses, sindicatos y empresa no han sido capaces de aproximar posturas en cuento a los aumentos salariales se refiere.
La representación social presente en la mesa negociadora aspiraba a consolidar un incremento salarial de un 2,2% fijo distribuido a lo largo de las tres anualidades de vigencia del acuerdo marco. Pero no pensaban de igual forma los directivos de ArcelorMittal que ofrecieron un exiguo 0,5% para el primer ejercicio de vigencia del acuerdo, otro 0,5% para el 2020, porcentaje al que se le sumaría el IPC de dicha anualidad y el 50% del IPC registrado el 2019. En cuanto al incremento para el 2021, tercer año del acuerdo, la multinacional proponía un 1% de aumento más el IPC de ese mismo año y el 50% del IPC que todavía quedaba pendiente de 2019. Como se puede ver, se trata de una propuesta bastante enrevesada que, además, estaba vinculada a objetivos de productividad y las reducciones de la plantilla.
Con estas condiciones económicas tan escasas, ofertadas por el gigante del acero, los sindicatos no han aceptado dicha propuesta después de 14 horas de reunión intentando aproximar posturas. Por tanto, serán ahora los trabajadores de las diferentes plantas quienes indiquen el camino a seguir en la reunión prevista para el próximo 7 de agosto.
