Este martes se ha celebrado una nueva reunión de la Comisión de Seguimiento de Galmed que se ocupa de hacer cumplir lo acordado en el ERE de extinción, por el que se rescindieron los contratos de todos los trabajadores de esta compañía cuando echó el cierre. En el transcurso de esta reunión se ha puesto de relieve que se va a retrasar el inicio de la producción que, como se recordará, se anunció para noviembre o diciembre de este 2016. En este sentido cabe señalar que según ha confirmado la secretaria general de CC.OO., Begoña Cortijo, que ha sido una de las asistentes, la empresa ha fijado como posible nueva fecha del comienzo de la fabricación, el primer trimestre de 2017, y más concretamente el mes de marzo.
Otro asunto tratado en esta reunión ha sido el de la discrepancia existente entre la representación social y la empresa en materia de recolocación del personal despedido. Efectivamente, en el ERE de extinción se recogía que los trabajadores despedidos tendrían preferencia a la hora de incorporarse a la planta, en el supuesto de que la multinacional decidiera reanudar la actividad. Sin embargo, la empresa estaría incumpliendo este precepto, puesto que ya ha contratado a personas que no pertenecen a la bolsa formada por ex trabajadores de la factoría de galvanizado.
Esta opinión de la representación sindical no es compartida por la dirección de Galmed, al entender que se han contratado a personas que no se encontraban entre las que fueron despedidas, porque el perfil profesional requerido no existe entre los que tienen preferencia a efectos de recolocación. También ha surgido otra discrepancia por lo que refiere a la externalización de servicios mediante las contratas, principalmente de logística. En este sentido, desde CC.OO. se ha indicado en la reunión que las empresas que pasen a prestar servicios para la galvanizadora, también deberán contratar al personal de esta bolsa que está formada por la antigua plantilla de Galmed.
Según ha confirmado Begoña Cortijo, la dirección de Galmed se ha comprometido a observar el cumplimiento de lo establecido en el ERE de extinción, dando preferencia a la recolocación de los que formaron parte de la plantilla de la empresa, tanto para entrar directamente en Galmed, como para incorporarse en las diversas contratas que presten servicios de mantenimiento o logística a la compañía teutona. Es por este motivo por el que, desde el sindicato, no se va a presentar ninguna demanda colectiva ante la autoridad laboral competente para exigir el cumplimiento de lo pactado en su momento, aunque según ha confirmado Cortijo, sí se han presentado demandas individuales de personas que, teniendo derecho a recolocarse, se han quedado fuera. Es más, estas demandas se han tramitado desde los propios servicios jurídicos del sindicato.
