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Bosal continúa en una situación de inestabilidad para sus trabajadores mientras que Prosidmed ha echado el cierre como ya se anunció el pasado mes de octubre

La deslocalización industrial pone en jaque el tejido empresarial del Camp de Morvedre

Martes, 30 Diciembre 2014 17:05

tumesadLos trabajadores de Tumesa realizaron una manifestación en Puerto de Sagunto hace escasos meses para denunciar la situación de la empresa

El tejido empresarial de la comarca del Camp de Morvedre está sufriendo un importante deterioro a causa de la deslocalización industrial que están poniendo en marcha algunas importantes multinacionales que tenían su sede en el área de Sagunto, una situación que se agravó el pasado año con el cierre de Galmed que no pudo evitarse a pesar de todas las movilizaciones y todas las reuniones políticas a todos los niveles que se llevaron a cabo durante meses. Pero el año 2014 tampoco ha sido bueno para las empresas de la comarca, algunas de las cuáles han tenido que echar el cierre mientras que en otras sus plantillas han tenido que sufrir desde reducciones de personal hasta bajadas de los salarios, además de otras situaciones que han denunciado públicamente algunos sindicatos.

Una de las últimas acciones puestas en marcha para poner en conocimiento de las administraciones la situación por la  que atraviesa el tejido industrial del Camp de Morvedre, fueron las reuniones que el Comité de Empresa de Bosal tuvo con diversos grupos políticos parlamentarios con representación en el Congreso de los Diputados hace escasas semanas. Y es que, como informó a este medio la secretaria general de CCOO en el Camp de Morvedre y Alto Palancia, Begoña Cortijo, «con toda probabilidad, la multinacional a la que pertenece Bosal, en breve, va a decidir el cierre de sus instalaciones de manera ignominiosa», una consecuencia de las prácticas que esta multinacional viene aplicando para dejar sin carga de trabajo la planta de Sagunto y, de esta manera, justificar su cierre.

Bosal es una empresa que se dedica al sector del automóvil pero ni los trabajadores ni los sindicatos saben si va a aguantar más allá de este año. «Desde la dirección vienen anunciando que no pueden aguantar la plantilla que tienen para la producción asignada, porque sólo les queda Renault, y no tienen perspectiva ninguna de carga de trabajo cuando finalice esta producción en 2015», matizaba Cortijo a este rotativo.

Otra de las empresas que ha vivido un futuro incierto durante estos últimos meses ha sido Tumesa, mercantil perteneciente al Grupo Condesa que, a punto estuvo de entrar en un concurso de acreedores aunque, finalmente, alcanzó un acuerdo con sus acreedores ArcelorMittal y el “banco malo de empresas”. Ante esta situación el Comité de Empresa de Tumesa convocó una multitudinaria manifestación por las calles de Puerto de Sagunto que consiguió movilizar a alrededor de 3.000 personas tras un acuerdo plenario de apoyo que votaron unánimemente todas las fuerzas políticas representadas en el hemiciclo saguntino. Finalmente, tras la división del Grupo Condesa, los acreedores se han quedado con una de las plantas de Álava, las dos de Navarra y las que están ubicadas fuera de España, mientras que el resto, Mieres Tubos, Inox (Álava) y Tumesa (Puerto de Sagunto) ha seguido siendo de grupo Condesa.

Pero, antes de llegar a este acuerdo, los trabajadores de la planta de Tumesa, y sus respectivas familias, han estado muchos meses viviendo con incertidumbre el futuro de esta empresa pues, antes de llegar a esta situación, como parte de un plan de viabilidad de la mercantil, el personal decidió bajarse el sueldo entre un 9 y un 12% y se pactaron el despido de catorce trabajadores, después de realizar la respectiva negociación, algunos de ellos con cláusula de recuperación. Los propios trabajadores ya explicaron antes de las movilizaciones que «el problema que tiene Tumesa es un problema de financiación, los bancos son muy fríos y no dan crédito para poder comprar material pero nosotros estamos preparados para trabajar en cuanto entre el material, es más, cuando el cliente nos da facilidades o paga por adelantado, podemos servirles los pedidos perfectamente», aseguraban.

Peor ha sido la resolución de la empresa siderúrgica de Los Valles, Prosidmed, que, como informó este periódico en el mes de octubre, ha echado el cierre durante este diciembre. El motivo para la desaparición de esta empresa es la decisión de cesar la actividad en la planta comarcal para mantener en funcionamiento la de Barcelona, pero con despidos también en Cataluña. Esta empresa de Quartell, que contaba con 21 trabajadores, ha realizado su ERE de extinción en dos fases: la primera de ellas se inició el 15 de octubre, afectando al 70% de la plantilla mientras que la segunda fase se ha puesto en marcha este mismo mes  dejando en la calle al 30% restante de los trabajadores, produciéndose así el cierre definitivo que, como explicó la secretaria general de CCOO en el Camp de Morvedre se debe a «motivos económicos alegados por la dirección de la empresa».

A todo esto, además, hay que sumar la situación de Ros Casares que, debido a sus deudas, se encuentra también en proceso concursal, una planta que cuenta con una plantilla en Puerto de Sagunto de unos 34 trabajadores pero que puede afectar mucho más a la situación de desempleo en la comarca puesto que en la otra planta, situada en el cercano municipio de El Puig, con otros 55 empleados, también trabajan muchos vecinos del Camp de Morvedre que se pueden ver afectados por la situación de esta mercantil.

Petición de un plan industrial para Sagunto

Tras las entrevistas realizadas el  pasado 18 de diciembre con algunos partidos políticos con representación en el Congreso de los Diputados, desde los sindicatos esperan que se impulse un plan de reindustrialización con partida presupuestaria que permita terminar las infraestructuras que son necesarias para dotar a los polígonos industriales de las infraestructuras y los elementos necesarios para un correcto funcionamiento de la actividad industrial. El compromiso que se quiere no sólo es para que haya una actuación en infraestructuras sino también un compromiso de buscar inversores, proyectos industriales concretos y, si fuera necesario, buscar formas de financiación tal y como se hizo en los años 80 tras el cierre de la siderúrgica.

En este encuentro, como informaron desde CCOO, todos los representantes de los grupos parlamentarios se mostraron predispuestos para apoyar cualquier iniciativa que se pueda plantear desde Sagunto, ofreciéndose para formular preguntas en la Comisión de Industria y facilitar reuniones con cargos de segundo nivel de los ministerios de Industria, Empleo y Justicia. En cuanto a la posibilidad de poner en marcha este plan de reindustrializacion para que el Camp de Morvedre sea nuevamente un referente industrial, tanto a nivel autonómico, como nacional, se habló de la necesidad de constituir un foro de trabajo en Sagunto, donde intervengan todos los agentes políticos, sociales y económicos de la comarca, para confeccionar un documento donde se analicen los pros y los contras de este enclave como destino industrial, que se eleve, posteriormente, a la Unión Europea.


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Modificado por última vez en Sábado, 17 Enero 2015 00:54

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