El Saguntino volvió a enfrentarse en su partido ante el Villareal C (1-1) a una situación demasiado conocida durante esta temporada, al quedarse en inferioridad numérica, esta vez por expulsión de Gámez, durante la primera mitad. Sin embargo, los rojillos resistieron para salvar un punto, que les permite prolongar a tres su racha de partidos sin perder.
Tanto el resultado como el esfuerzo de mantener la igualada durante toda la segunda parte fueron lo más destacado en el bando de Frank Castelló, ya que los visitantes se mostraron superiores de principio a fin.
En la primera mitad, los amarillos dominaban con su juego de toque alternado con balones largos. Los locales apenas tenían el balón, aunque no sufrían atrás, ya que la claridad del Villareal C se agotaba al llegar al área, más allá de un acercamiento peligroso propiciado por una pérdida de balón local en la frontal de su área.
Así estaba el partido cuando Clausí abrió el marcador de un lanzamiento de falta muy alejado que sorprendió al confiado portero visitante. Ese tanto hizo ganar presencia en el campo a los rojillos hasta que a los 36 minutos llegó la expulsión del lateral derecho saguntinista.
El tramo final del primer tiempo fue intensificando el dominio visitante y en el descuento consiguió la igualada al transformar un penalti por manos dentro del área.
En la reanudación y con los cambios de Castello, el dominio rival se hizo más intenso, mientras los locales se iban metiendo cada vez más atrás. Los rojillos apenas inquietaron la portería rival con una jugada a balón parado y los villarrealenses dispusieron de varias aproximaciones claras, aunque no hicieron valer su superioridad en el marcador.
El Acero, por su parte, obtuvo una balsámica victoria en Paterna (0-2), que le debe servir para enganchar varios resultados buenos y salir de los puestos peligrosos.