Los participantes en la cima
El pasado domingo, Alternatura se desplazó hasta la población de Finestrat en la comarca de la Marina Baixa para emprender la penúltima salida de la campaña otoño invernal que había programado bajo el título El desafío Alternatura. Ascensión al Puig Campana. El kilómetro vertical.
Los organizadores de esta excursión señalan que "fue sin duda la salida más exigente de este programa, si exceptuamos la subida a la Pica d'Estats de la temporada pasada". En este sentido, el Puig Campana está considerada como la cima más exigente de la Comunidad Valenciana.
En esta ocasión, los promotores de esta iniciativa desde la concejalía de Deportes redujeron el número de plazas ofertadas por la complejidad de la ascensión. De este modo, veintidós personas fueron los que acometieron esta salida en un día climatológicamente perfecto.
La subida se inició desde la Font del Molí a 400 metros de altitud por la pedrera de la cara sur (la más complicada) y, tras un ascenso sin tregua en el que en numerosas ocasiones se tenía que trepar, se alcanzaron los 1.410 metros de altura, desde donde se disfruta de vistas maravillosas de la Serra Gelada, Benidorm, la Cala de Finestrat, la Vilaioiosa, el Penyal d'Ifach y las Sierras de Bernia y Aitana.
La bajada se realizó por la cara norte, donde quedaban restos de las últimas nevadas, hasta el Coll del Pouet, para rodear la montaña y regresar al punto de inicio de la ruta.
Una excursión en bicicleta pondrá la próxima semana el broche a esta parte de la temporada del programa Alternatura.
