Cultura

 

Desde que abrieran por primera vez las puertas de Laia´s Cupcakes, la pastelería de Jéssica Pérez y su familia se ha convertido ya en todo un referente del Camp de Morvedre. Y no es para menos, ya que su trato personalizado y su modo de trabajar, totalmente artesanal, hacen que su trabajo, y en particular sus tartas de fondant sean verdaderas obras de arte. «Cualquier idea que el cliente tenga en la cabeza, afirma Jessica, la convertimos en realidad». Para ello cuentan, incluso, con un diseñador gráfico que personaliza las imágenes, y con la mejor materia prima, utilizando siempre los mejores productos. Esto, unido a muchísimos años de estudio y preparación de Jessica, hacen que la gente quede boquiabierta ante el resultado de su demanda, sean pequeños o grandes, y se conviertan en las delicias de los paladares más exigentes de la comarca. Una recompensa que hace que el esfuerzo y duro trabajo que requiere su trabajo, sea más llevadero gracias a las sonrisas (e incluso lágrimas), de quienes van a recoger sus encargos. Ahora, Laia’s Cupcakes se ha trasladado a Sagunto, y entre sus novedades cuenta con un servicio a domicilio. Desde la pastelería recomiendan hacer los encargos con suficiente antelación para conseguir un resultado inigualable.

 

La idea surge tras comprobar que, aún existiendo un auge de la repostería creativa promovido principalmente por la televisión, nos encontrábamos con que no existían negocios profesionales que desarrollasen esa actividad. Sí habían pastelerías tradicionales donde puntualmente se fabricaba alguna tarta personalizada sobre todo, pero que no llegaban al nivel de calidad y de acabados que el público demandaba. Además, yo estudié un grado de cocina, gastronomía y postres de restauración, en la escuela de hostelería de Alcoy, para más tarde especializarme en pastelería y repostería creativa. Es por esto que pensamos en abrir una pastelería de este tipo en Puerto de Sagunto, donde comenzamos. Y así lo hicimos.

 

Como todos los negocios incipientes empezamos con muchísima ilusión. Además el local que abrimos finalmente disponía también de una cafetería, con tienda de utensilios y realización de cursos no reglados. Con todas estas actividades tuvimos una muy buena acogida por el público con el refuerzo que supone el recibir la enhorabuena de todo aquel que nos visitaba. Nos movimos también en redes sociales y pronto nos empezaron a tener en consideración incluso en publicaciones del sector.

Actualmente ofrecemos tartas personalizadas, productos de pastelería enfocados a eventos: galletas, cupcakes, cakepops, mesas dulces... la variedad al final es la que demanda el cliente.Disponemos de una amplia gama de productos totalmente artesanos que se elaboran o modifican al gusto del cliente final. Hacemos lo que nos piden. Damos vida a sus dulces ideas, y quedan asombrados con el resultado.

 

Sobre todo las tartas personalizadas de fondant, que son las más ilustrativas de este tipo de repostería y en las que más se puede mostrar la belleza y el “más difícil todavía”. También nos piden muchas tartas sin fondant pero con impresión comestible. Además, disponemos de un diseñador gráfico que personaliza las imágenes.  

Las tartas, como el resto de productos que ofrecemos, se hacen totalmente a mano. Son un proceso totalmente artesanal ya que no trabajamos con producto congelado o industrial. Es por esto que el “cómo se hace” se divide en varias partes. Por un lado está la parte más tradicional, que es la tarta en sí. Horneado del bizcocho, calado del mismo, relleno, y cobertura. Nosotros realizamos tartas de pastelería al gusto del cliente, tanto en sabor como en forma, que posteriormente forramos y decoramos con fondant. La parte decorativa, por otro lado, es un proceso muy minucioso y laborioso y dependiendo de qué nos haya pedido el cliente, el modelado puede tardar en hacerse desde unas horas hasta varios días, contando con los tiempos de espera para que las diferentes partes se sequen y puedan ensamblarse sin deformarse. Es por ello que siempre pedimos el mayor margen de tiempo posible para los encargos. Yo siempre digo que cuanto más tiempo tengamos para hacer el diseño y llevar a cabo la tarta, mucho mejor, ya que se pueden hacer cosas más detalladas y más completas. Para tartas personalizadas con un nivel de dificultad más estándar nosotros siempre pedimos como mínimo dos semanas. Aunque con menos tiempo también se puede realizar variedades de tartas, hay otras que es imposible con un plazo menor. Esto se debe no sólo a la dificultad de la tarta, sino a los tiempos de espera aconsejables para que le resultado final sea el idóneo.

 

Para poder realizar tartas de fondant son varios los requisitos que se deben contar, no ya sólo con los materiales y las condiciones higiénico-sanitarias del lugar de trabajo, sino también con las habilidades propias del diseñador de la tarta. Para ello yo personalmente he recibido cursos y masters al respecto, para perfeccionar la técnica. Además una de las cosas con la que la gente no cuenta es que para que una tarta esté bien forrada, lo más importante es que esté bien trabajada anteriormente. Para ello es imprescindible tener conocimientos de pastelería tradicional, de esta manera, “ganacheamos” o cubrimos nuestras tartas, creando lo que en pastelería se denomina “bordes perfectos”.

 

La tarta que más nos piden es la “Sacher de la casa”. Aunque los más atrevidos también se decantan por otras de nuestras variedades como la carrot cake, la red velvet o la tarta Laia’s. Todas ellas son una variedad nuestra, con receta propia de nuestra pastelería.

 

Lo más importante es que son productos totalmente artesanales, pero de verdad, de los que se hacen a mano y sin preparados ni masas congeladas. Hacemos la receta, amasamos, horneamos, trabajamos las decoraciones. Todo artesanal y con materia prima de primera calidad. 

Nuestra metodología de trabajo es tener una entrevista con el cliente para perfilar cuáles son sus deseos o necesidades. Son temáticas muy concretas y nuestro trabajo es ayudarles para poder diseñar su tarta y hacer factible aquello que está en su cabeza, convirtiendo esa imagen en algo que es realizable en fondant.

Anécdotas tenemos muchas. Nos gusta recordarlas por que todas son garantía de que nuestro trabajo gusta. En una ocasión nos visitó una clienta unos días después de haber realizado una tarta para su hija. La niña cumplía años y era una fan incondicional de la película Frozen, por lo que le hicimos una tarta con un modelado de Olaf. Conversando con ella nos explicó que estaba contentísima con el resultado. Todos sus invitados quedaron boquiabiertos con la tarta y la niña estaba pletórica. Pero al preguntarle si les había gustado el sabor, no pudo más que reírse y decirnos que eso no nos lo podía decir, porque su hija no dejó a nadie que cortara la tarta ya que sus palabras fueron: “la tarta es mía y no se la come nadie” (risas). Y nos confirmó que la tenía en su habitación cuidándola como oro en paño. En otra ocasión vino una mamá y nos encargó una tarta personalizada para el primer cumpleaños de su niña. Se le hizo un diseño muy fiel a lo que ella tenía en mente, con una tarta en forma de jaula con unos barrotes blancos y un pajarillo dentro. El día que quedó para venir a retirarla de la pastelería, al verla, rompió a llorar de la emoción y estuvo un momento sin poder articular palabra. Hasta que finalmente esbozó un “gracias esto era justo lo que quería” deshaciéndose luego en elogios.

 

Ni qué decir tiene que es una vocación ya que los sacrificios que se realizan, sobre todo en temas de horarios, o te gusta mucho o no lo puedes sobrellevar, pero indudablemente si no te formas en aquello que desempeñas, no tendrás las habilidades técnicas que se requieren. Puedes tener virtudes innatas, pero la técnica se aprende. Yo me formé en cocina y me especialicé con grandes maestros en técnicas específicas, aunque luego está que se te de bien o no.

 

Sea cual sea el dulce que se elija, (es casi imposible decirte sólo uno), lo bonito y significativo es que se personalice para la persona que lo vaya a degustar. Es uno de los aspectos que más destacan nuestros clientes, ya que hacen a ese producto único, suyo y muy personal. El trato es muy personalizado y creemos que esto es lo que nos diferencia. En la actualidad nos pueden encontrar en Sagunto. Además, ahora  tenemos el servicio de entrega a domicilio gratuito para compensar a nuestros clientes y no tengan que desplazarse. También se nos puede contactar en nuestra dirección de correo habitual o bien via whatsapp o llamando a nuestro número de móvil de siempre. Nuestra página web sigue siendo www.laiascupcakes.com. Os esperamos!