Un joven de 29 años de Sagunto acaba de volver tras un año de viaje de dar la vuelta al mundo. El mismo cuenta su experiencia a El Económico

Ariño: «Las mejores leyes son las no escritas. En mi vuelta al mundo con mi mochila he descubierto que el mundo aún funciona así, el nuestro y todos»

 
Miércoles, 30 Noviembre 2016 19:03

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Con tan sólo 29 años recién cumplidos, el joven saguntino Andreu Ariño puede presumir de haber dado la vuelta al mundo. y puede decir que lo ha hecho él solo, sin ayuda de nadie, y con la compañía simplemente de su mochila (equipada con los básico) y su cámara de fotos, para revivir su experiencia con el paso de los años. Comenzó en la india, siguió por Tailandia, Campoya, vietnam, Myanmar, Malasia, Singapur, Borneo, Brunei, Sulawesi, Islas Malucas , Papúa, Nueva Guinea, Australia, Nueva Zelanda, Chile, Bolivia, Perú, Cuba y Colombia, donde terminó su viaje y tras miles de aventuras encontró el amor. Un año repleto de mil y una aventuras e historias fascinantes, peligrosas, duras, reflexivas y de conocimientos. Un viaje que le ha permitido conocer el mundo más allá de sus fronteras, las diferencias y similitudes entre países y entre personas. Un largo trayecto que, como reconoce, le ha hecho madurar y ver el mundo de otro modo.  Con muy poco se puede vivir. Esto ha descubierto conociendo el mundo y su gente. Un sinfín de experiencias que seguramente dará aconocer en un libro donde dará a conocer todo lo vivido en este último año. Un viaje en el que también se ha conocido más a sí mismo y que  recomienda hacer.
 
¿Quién es Andreu Ariño?

Soy alguien con mucha curiosidad, cosa que me ha hecho completar un doctorado en cosmología y luego perseguir el dar la vuelta a la tierra. Soy un cosmo viajero. Tengo 29 años, nací en Sagunto y he vivido en Londres, Heidelberg, Cambridge y Trieste, con motivo de mi trabajo y estudios.
 
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¿Cómo surge la idea de dar la vuelta al mundo con una mochila?

Siempre he perseguido satisfacer mi curiosidad en la vida, algo que durante mi trayectoria vital he conseguido mediante los estudios y un amplio acceso a material de didáctica, novelas, aventuras y exploraciones. Además mi familia se podría decir que tiene gran amor por el viaje. Desde pequeño siempre he tenido un gran interés en ver mundo, explorar, y descubrir cómo viven otras persona, en general saber qué hay más allá. Durante mi doctorado ya tenía pensado hacer un gran viaje al terminarlo. Mi idea era ir al sudeste asiático, por su gran diferencia de culturas con la nuestra, por su gran diversidad en una zona geográfica reducida, y porque siempre he tenido interés por la gastronomía asiática. Puede parecer secundario sentado en casa, pero la comida y la curiosidad gastronómica es una parte muy importante y placentera del viaje.Cuando estaba preparándolo, de casualidad contacté con otro viajero que venía de dar una vuelta al mundo y compartía parte de mi itinerario. Él me animó a empezar por la India, ya que representa otra manera muy chocante de vivir, y ya que estaba en el sudeste asiático, volviera por el otro lado, completando la vuelta al globo. Además, en paralelo, uno de mis amigos iba a pasar unos meses en Sudamérica, de manera que lo podía visitar si proseguía mi camino. Así se dibujó mi itinerario y amplié el periodo que tenía reservado para viajar de 8 meses a un año. No sería la vuelta al mundo de Fileas Fox, con 20.000 libras y 3 acompañantes, sería  un viaje de exploración y descubrimiento, algo que requiere de ligero equipaje. Eso te hace ponerte una mochila en la espalda que al partir descubres que  es mucho más pesada de lo que debería haber sido.
 
webandreu4Andreu, detenido, por hacer fotos en una manifestación

¿Cómo se planifica uno cuando decide dar la vuelta al mundo?

En un principio, acostumbrado a los viajes organizados, prepara un viaje de un año entero puede parecer una tarea imposible, pero la magnitud y características del viaje (he acabado en sitios que no aparecen en ningún mapa) hacían que éste no se pudiera planificar. De hecho, descubres que cuando más largo es el viaje y más exótico el destino, la falta de planificación lo hace mucho más interesante y apasionante. Obviamente, el desconocimiento de lo que te vas a encontrar hace que no puedas planificar, y tener la libertad y margen de improvisación te permite descubrir mucho. Hay planificación, pero no va mas allá de tener unos destinos marcados. Yo quería ir al punto de la tierra mas alejado de Sagunto, que se encuentra cerca de la costa de Nueva Zelanda, y un camino más o menos planificado a ese nivel amplio se planifica.
 
¿Qué metió en su mochila?

Un chubasquero, vacunas, algún medicamento (unas pastillas de malaria me ayudaron a salvar la vida o sacar de un gran apuro a una chica) y una hamaca para poder dormir en cualquier sitio cálido. Al final lo que hay que aprender es que donde hay gente existe todo lo que necesitas para sobrevivir. En este mundo globalizado no hay nada imprescindible. Por eso cuanto más ligero vayas, mejor. Pero lo  mejor es llevar cosas que te ayuden a salir de una situación difícil. Luz por si no ves, chubasquero por si llueve o hace frío de repente (y vas montado en lo alto de una furgoneta expuesto a la lluvia y el viento), hamaca por si te pierdes en mitad de la selva, tarjetas de crédito para ir comprando pasajes y una mochilita o bolsa para meter comida y agua si vas a cruzar kilómetros y kilómetros de zona deshabitada. En particular en mi caso nunca me despego de mi cámara, me encanta la fotografía y forma parte de mi viaje. Un sombrero de ala ancha, regalo de mi tío, bueno para el sol inclemente de los trópicos y para la lluvia inclemente de los trópicos.
 
¿Dónde empieza su viaje?¿ cómo continúa?

Tras decidir dónde viajar, éste es el primer y más importante paso. Resumiendo mucho el viaje fue: India, Tailandia, Camboya, Vietnam, Laos, Vietnam, Myanmar, Malasia, Singapur, Borneo (la parte Malasia, Brunei y la parte Indonesia), Sulawesi, las Malucas (las famosas islas de las especias que buscaba Colón), Papúa, Papúa Nueva Guinea, Australia, Nueva Zelanda, Chile, Bolivia, Perú, Cuba (antes que muriera Fidel) y Colombia.

 Una vez terminado el viaje, ¿en qué ocupa ahora su tiempo?

Ahora estoy buscando trabajo para continuar en el mundo científico. Mientras tanto voy explicando mis experiencias y aventuras por si interesan y motivan a otros a viajar.
 
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¿Qué destacaría de sus viajes?

Mucho, es muy difícil elegir. Lo primero que aprendes es que aunque viajas a ver mundo acabas viéndote a ti mismo. Resumen de viajar en solitario:-Deja que las cosas ocurran, lo mejor es dejarse llevar, -No hagas turismo si no vas con turistas, -Únete a los locales si puedes. Compartir la vida con la gente del lugar, sus celebraciones, juegos, actividades y día a día es la mejor forma de aprender sobre el lugar donde estás, sobre cómo uno encaja en ello y sobre la naturaleza humana, -Explora siempre que puedas. Ves siempre allá donde no has ido. Viajando aprendes mucho de tu sociedad y de la humanidad.  Además aprendes que el mundo tiene muchas formas de funcionar.  Presencié como la educación, en lugar de ayudar a una comunidad, la destruía, cosa que nunca hubiera pensado que podría pasar. Con lo que te quedas después de todo es con la gente, lo buena y genial que es. Y que es por eso por lo que realmente el mundo funciona. La empatía no existe en las leyes, pero es lo que hace que la gente sea buena la una con la otra, se ayude y haga que el mundo ruede, en lugar de estar todos atacándonos y robándonos unos a otros para ganar más, como si fuera una jungla. Las mejores leyes son las no escritas, así funciona aún el mundo, tanto el nuestro como los otros. Esas leyes son las que quiero aprender y dominar gracias a la ciencia. Por eso completé mi viaje, ahora toca entender lo aprendido.
 
¿Algún destino preferido?

Depende! Por la comida y la gente pienso en Vietnam, allí cada día era una nueva oportunidad para probar cosas nuevas y sanas.Para aventuras pienso en Myanmar, un país donde nada de lo que esperas pasa, y nada de lo que pasa esperas. Fui para coincidir con las elecciones de noviembre del año pasado, las primeras en 45 años. Realmente es un país desconectado del resto del mundo, donde te puedes reunir con los fundadores de ejércitos independentistas, tu foto de 2 metros acabar colgada de un monasterio, flotar pacíficamente en un río durante días, presentarte delante de la sede del partido que ha ganado las elecciones y estar en primera fila, un premio Nobel pasando delante de ti, la  BBC detrás sin que nadie te lo impida, ir en un tren de los años 50 con usb para cargar tu tablet y que descarrile, y mucho, mucho, más. Por hospitalidad y aventura es Indonesia. Allí no te tienes que preocupar de nada, ellos harán todo y más por ti, hasta el punto que pueden intentar organizar tu viaje completamente. Hay que aprender a dejarse ayudar, a que es su sociedad, su mentalidad. En el momento te dejas llevar entras en su mundo y las cosas son increíblemente fáciles, agradables e inesperadas. He pasado mil aventuras: otro encuentro con ejércitos revolucionarios, hacer autobarco (pedir a barcos si te llevan de isla en isla, gratis, es fácil!), que te detengan 7 veces por estar en lugares que no te esperan, (una de ellas pasó a noticias internacionales), navegar ríos en mitad de selvas vírgenes, ver ritos funerarios sacados del antiguo Egipto, pero en la actualidad, con motos de fondo...Por diversidad y sorpresa, Bolivia, un país donde la cultura indígena, extensa y variada, ha conseguido mantenerse después de siglos de colonización y persecución cultural. Y donde uno se presenta en unas minas y te ofrecen trabajo...
 
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¿Siempre ha viajado solo?

Sí, mi viaje siempre ha sido en solitario, pero en realidad muchas veces he ido acompañado de alguien, porque aunque el viaje es en solitario, nunca estás solo. Siempre hay gente que quiere compartir tu tiempo, vivencias, compañía. Y tú siempre buscas interaccionar con alguien, aprender alguna cosa, satisfacer tu curiosidad, y pasar tiempo y experiencias con otra gente.También algunas veces te tropiezas con otro viajero que tiene su interesante camino y lo podéis compartir por algún tiempo, pero ese es otro tipo de viaje, con su encanto también, pero diferente. El hecho de viajar solo siempre te expone y te hace interactuar mucho más con la gente del lugar, cosa que es lo que buscaba en el viaje y uno se acostumbra a amar esas experiencias.
 
¿Dónde suele alojarse?

Primeramente en la India, por su bajo coste y porque aún tenia la mentalidad de viaje europeo, iba de hostales (una habitación por 1-2€ la noche es común). Pero después, cuando abandonas la mentalidad de querer saber donde dormirás y estás dispuesto a poner la hamaca donde sea, cosas increíbles empiezan a suceder. De hecho raramente usé la hamaca, en la mayoría de casos la gente del lugar me invitaba a compartir casa con ellos, cosa que te ofrecía oportunidades, historias y eventos que nunca podrías imaginar. También existe una aplicación donde la gente ofrece sus casas para que puedas dormir en ellas. Es una gran oportunidad para conocer gente y el país.

¿Qué es lo más sorprendente que ha vivido en esta aventura?

Supongo que mis encuentros con los ejércitos independentistas. También que en una de mis detenciones por hacer fotos en una manifestación, la policía diera mis datos y fotos a la prensa, supongo que a cambio de dinero, y estas noticias llegaran a mis amigos y jefes aquí.
 
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¿Definiría su experiencia como peligrosa, dura, o placentera?

Peligroso no ha sido. Está claro que mucho de lo que yo he hecho no se puede hacer si tienes miedo, el miedo en general paraliza y te impide disfrutar del mundo. Duro ha sido, pero no un duro que te puede o desanima. Es como ser padres, nadie diría que no es duro, pero aún así, nadie pone el énfasis en lo negativo, solo en lo positivo. Viajar es lo mismo, por duro que sea, aseguro que valdrá la pena.  Por tanto me quedo con el adjetivo placentero, intenso, emocionante, exultante, increíble, vital, triunfante, alegre, jubiloso...
 
¿Qué es lo que más y lo que menos le ha gustado de esta experiencia?

Lo que mas diría que la experiencia en sí misma, es difícil separar la belleza de las personas de lo que has aprendido de la humanidad. Lo peor es vivir en tu piel como la cultura occidental pasa con un bulldozer por todo el mundo pisoteando todo lo que hay en nombre de la civilización y el progreso.

 ¿Tiene en mente algún viaje nuevo próximamente?

Tenía pensado pasar 3 meses en japón porque culturalmente me ha influenciado mucho a lo largo de mi vida, pero tendré que posponerlo. En el viaje encontré el amor. Ella es de Colombia, así que los próximos viajes serán visitas de pareja a Colombia, otro tipo de viaje, alejado de la mochila, pero del cual aprendes mucho también.
 
¿Por qué recomendaría este tipo de viajes?

Sobre todo, para coger distancia, ver las cosas con otra perspectiva, descubrir que hay otras posibilidades y que el mundo no funciona como creías que funcionaba.  También porque aprendes mucho de ti mismo y aprendes a apreciar el mundo y a valorarlo de otro modo.

 ¿Le gustaría escribir un libro contando sus vivencias?

Si!, por eso estoy ahora haciendo entrevistas y charlas con la gente, para ver el interés que hay en mis aventuras. Como he dicho viajar como yo lo hago no es más difícil que criar hijos, y hay multitud de gente que viaja y tiene otras aventuras como las mías. Aún así parte de mi viaje y aprendizajes son un tanto peculiares y ya hay gente que ha mostrado su interés en que escriba, así que si el interés de la gente continúa, me embarcaré en esta nueva aventura de escribir un libro.

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Modificado por última vez en Sábado, 17 Diciembre 2016 00:28

 

 

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