El joven saxofonista de 17 años, distinguido en la 7ª edición de los Premis Orpheo 2022, se inició a los tres años en la Lira Saguntina y ahora cursa el grado superior en la Escuela Superior de Música de Alto Rendimiento de L'Eliana

Enric Lozano Carpena: «En la música, si no estudias, no llegarás a nada»

El músico de Sagunto, Enric Lozano Carpena El músico de Sagunto, Enric Lozano Carpena
Viernes, 25 Noviembre 2022 21:28

Podría decirse que Enric Lozano Carpena es un prodigio de muchacho. A sus 17 años toca el piano y da clases de este instrumento, pero, sobre todo, el saxofón lo maneja con verdadero virtuosismo. Esto no es por casualidad, desde los tres años estudia música, primero piano y después, a los siete años, se enganchó con el saxo. Ahora, todos los días que tiene clase, se levanta a las seis de la mañana, como si fuera a trabajar, aunque se marcha a L'Eliana, a la Escuela Superior de Música de Alto Rendimiento, donde cursa los estudios superiores de saxofón y pedagogía musical. Tiene bien claro que: «En la música, si no estudias, no llegarás a nada». Como no podía ser de otra manera, tanto esfuerzo empieza a dar sus frutos y este año ha obtenido el mejor expediente de su promoción, como colofón a su paso por el Conservatorio Joaquín Rodrigo de Sagunto, además, la Federación de Bandas de Música del Camp de Morvedre le ha concedido el premio Orpheo al mejor expediente de grado profesional. Por si faltara algo, ensaya con la banda de la Lira Saguntina, donde se preparan a conciencia de cara a la participación el año próximo en un certamen y, encima, pertenece a la charanga Mel de Romer y forma parte del grupo Fantuka. Lo dicho, un prodigio de muchacho.

¿Cómo te iniciaste en la música?

De pequeño, con tres años, me apuntaron mis padres a piano en la escuela de la Lira Saguntina, también hacía judo y ajedrez, pero al final me quedé con la música, que era lo que más me gustaba. Mi hermano tocaba el saxo y me di cuenta de que me llamaba mucho la atención ese instrumento, Así que, a los siete años, también me apunté a saxo y, día a día, estudiando hasta el punto de que acabé el grado elemental, hice la prueba de grado medio y ahora estoy estudiando el grado superior de interpretación y de pedagogía con el saxofón en la Escuela Superior de Música de Alto Rendimiento. La verdad es que le doy las gracias a mis padres por apuntarme a la música. Si no lo hubieran hecho, seguramente no estaría estudiando.

Al final te has centrado en el saxo, ¿no?

Sí. Los estudios de piano los acabé al finalizar el grado medio.

Mucha gente estudia música, pero nunca pensando en que sea su actividad principal, su medio de vida. Por lo que veo, tú piensas vivir de la música, vas en serio, ¿Verdad?

Es el objetivo que tengo. Es lo que más me gusta. Dicen que, si trabajas haciendo lo que te gusta, no vas a trabajar nunca, pero sí, la intención es vivir de la música. De hecho, ahora mismo, estoy en activo en varias agrupaciones. Estoy en una charanga de Puçol que se llama Mel de Romer, luego también estoy en un grupo que es de la zona. Doy clases de piano en el Casal Jove y en una escuela de música que hay en Artana, un pueblo de Castellón.

Con 17 años eres muy joven, pero ¿seguro que ya piensas en cómo enfocar tu carrera profesional?

Quiero ser músico y vivir de la música, lo tengo claro, aunque, en un principio, estoy barajando varias ideas, porque me llama la atención el tema de las bandas de música, sobre todo, entrar en una banda que se cobre bien. Además, también me gusta la idea de ser profesor de saxo o de otra materia, como puede ser, por ejemplo, composición, análisis o dirección, aunque lo de director me atrae menos porque no tocas. No cierro ninguna puerta, aunque todavía estoy pensando en lo que quiero hacer en un futuro.

No te veo con espíritu aventurero. ¿Te gusta más ir a lo seguro?

Aún soy muy joven y, en cierto modo, no me tengo que ganar la vida todavía con la música, por ese aspecto sí que parece que no sea tan aventurero, aunque de cara al futuro sí que me gustaría irme a cualquier país para hacer el máster, pero eso de tocar en el metro o tocar en la calle no lo he hecho nunca y creo que tampoco me llama la atención.

Si no te hubieras dedicado a la música ¿qué otra vía habrías cogido?

Es que es algo que no me he planteado en la vida, porque, al dedicarme a la música...pero yo creo que, igual, me habría llamado la atención la economía, por ejemplo. Habría estudiado algo de economía. Mercado habrá siempre y si hay mercado, tiene que haber economía y economistas. Por ejemplo, la música no la puede hacer un robot, porque no es música, porque tú estás interpretando algo. En este caso, la economía es lo mismo.

¿Cómo es tu día a día?

El día que tengo clase me levanto a las seis de la mañana y, entre el tren y el metro, tardo dos horitas en llegar al conservatorio. Cuando no tengo que ir a estudiar, intento sacar un rato para hacer cosas de clase o estudiar saxo, aunque no te voy a mentir, no estudio todos los días. Todo esto lo combino con los ‘bolos’ de la charanga y el trabajo de dar clases de piano.

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Si todo va bien, con veintidós años acabarás el superior. ¿A partir de ahí cuál es tu plan de ruta?

Supongo que seguiré, haré el máster y me tocará sacar una oposición, aunque, depende, porque tampoco sé lo que quiero hacer, igual me saco una oposición de profesor o de una banda, pero la intención es seguir estudiando.

Al final, de lo que se trata es de garantizarse las habichuelas, ¿no?

Obviamente.

O sea, que tendrás tu trabajo principal y luego te buscarás una segunda ocupación en el ámbito de las agrupaciones musicales, que es lo que se suele hacer, ¿va por ahí tu idea?

Sí, al fin y al cabo, todos los músicos vamos por ahí. El que quiere ser solista y comerse el mundo haciendo conciertos por todos lados, aparte de que tiene que ser el mejor, tiene que dedicarle muchísimo tiempo, sólo a eso. La verdad es que esa figura de ser solista no está mal, pero en la vida del músico hay mil cosas para hacer.

¿De los que empezaron contigo, muchos se han quedado por el camino?

Sí. De saxofón, prácticamente, he seguido yo, el único. Hay gente que empieza en la música como yo, porque la han apuntado sus padres, acaban el elemental, deciden seguir y en el grado medio se dan cuenta de que la música no es lo suyo. ¿Por qué?, pues porque, además de estudiar música, está la ESO, el bachiller y la universidad, es decir, que hay que trabajar mucho y tampoco tenemos todos los mismos gustos, ni los mismos objetivos, ni las mismas preferencias, aparte de que, en la música, si no estudias, no llegarás a nada, es una carrera de fondo, porque por arte divina no salen las cosas.

Es una carrera muy larga, ¿verdad?

Bastante larga. Cuatro años de elemental, que empiezas a los siete u ocho años, luego el grado medio, que son seis años más. Ya son diez años y otros cuatro del grado superior, ya son catorce años, y si quieres hacer un máster, otros dos años. Es una carrera larga, por eso es normal que mucha gente se quede por el camino.

La vocación también es importante, porque nadie estudia catorce o dieciséis años algo que no le gusta, ¿no te parece?

Efectivamente. Por eso digo que cada persona tiene sus preferencias. Si te gusta eso, vas a por eso, si no te gusta, pues lo normal es que lo dejes. Tengo amigos que han acabado el grado medio y han decidido no seguir estudiando música porque han optado por una ingeniería o por estudiar medicina. Eso son las preferencias de cada cual, que elige la vía que más le gusta.

¿Cuáles son tus válvulas de escape cuando te saturas mucho?

Hobbies, como tal, creo que no tengo, aunque me gusta mucho el deporte. El problema es que soy muy vago. Por ejemplo, una carrera de treinta kilómetros, una locura. ¿Cómo te vas a ir treinta kilómetros corriendo?, ¿sabes? Pero las pesas sí que me gustan. También me gusta escuchar música y los documentales, que me evaden de mi realidad y me distraen.

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Te iniciaste en la escuela de la Lira Saguntina, ¿sigues vinculado a la sociedad musical?

Sí, desde que empecé a estudiar piano y saxo. Cuando accedí al conservatorio de Sagunto, me acuerdo de que entré a la banda grande de la Lira, anteriormente estuve en la Juvenil, y ahí fueron mis comienzos en lo que es una agrupación. Si que es verdad que la Lira ha tenido unos años de carencias que yo había veces que ni iba. Pasé de ir porque el ambiente y las cosas que hacíamos no me interesaban.

Ahora hay una directiva nueva que le ha dado un giro a la situación,¿verdad?

Por suerte, se ha encontrado a un director que ha reflotado la banda, aparte de que la directiva ha cambiado mucho y las ganas de hacer cosas han vuelto a la sociedad. Desde ese momento decidí volver a la Lira y, vamos, hasta la muerte. Al año que viene vamos a un certamen y estamos trabajando duro, espero que nos vaya bien.

Tocas en una charanga. Esa actividad es puramente, digamos, alimenticia, ¿no?

Claro. El mundo de las charangas también es verdad que eso es un mundo aparte. La música y la charanga van juntas, pero no van juntas, porque mucha música, la verdad es que ahí, no se hace. Ahí se toca y ya está. No se tocan cosas con peso, son canciones populares y poco más. Es por esto que a mí tampoco me gusta estar tan vinculado al mundo de la charanga, pero como es una buena forma de sacarse un dinero, pues ahí estoy, aunque la música no está tan bien pagada como debería estar y la gente tampoco lo valora.

¿Estás de acuerdo en que los músicos son, en general, un poco peseteros?

Si quieres vivir de ello, o eres pesetero o vas mal. Vamos a ver, pesetero tampoco sería la palabra, tienes que mirar siempre por tu propio beneficio, como en todos los trabajos, obviamente. Hay que valorar, por ejemplo, que voy a tocar cuatro horas a un pueblo que está a una hora de aquí, pues si no me pagan mis 70 u 80 euros, pues no voy a tocar. Pero sí que es verdad que la gente que está por encima de los músicos, por ejemplo, los representantes; esos sí que son peseteros.

En Sagunto y la comarca, ¿cómo ves las bandas de música y las sociedades musicales que hay funcionando?

Las bandas no las veo mal, aunque pienso que tras el COVID han pasado una situación bastante complicada, de hecho, hay algunas bandas que, directamente, se han desecho. En cuanto a los conservatorios, en el que estoy yo, por ejemplo, es privado, y yo tomé esa decisión porque tengo conocidos y amigos que han estado en conservatorios públicos, como el de Castellón, el de Valencia o el de Alicante y me han comentado que no vale la pena, Me han hablado tan mal de esos sitios que no vale ni la pena ir. Eso es algo que, siendo público, deja mucho que desear en cuanto a que no puedas acceder a una formación musical en condiciones en tu propia Comunidad.

¿Es más exigente el conservatorio donde cursas estudios que los de la red pública de la Generalitat?

Totalmente, Se cuida que tú adquieras competencias y si no adquieres esas competencias, no acabas, no te aprueban, directamente, cosa que en los conservatorios públicos no sucede. Lo que sí que pasa en los públicos es que si no pagas clases particulares pues no te aprueban. Con las plazas pasa igual. En Valencia hay cuatro plazas para cincuenta o sesenta personas. Es una burrada. La cantidad de gente que acaba el grado medio y quiere presentarse al superior es enorme, y la oferta que hay de los conservatorios públicos es prácticamente nula. Es algo que, siendo de Valencia, tierra de músicos, llama mucho la atención.

Ahora que hablas de los conservatorios, ¿es verdad que acceder al de Sagunto para hacer un grado medio es más fácil que en el de Segorbe o la Vall de Uxó?

No lo puedo decir de primera mano, porque yo no he ido a la Vall ni a Segorbe, pero sí que es verdad que en el conservatorio de Sagunto entra quien quieras. Eso es cierto. De hecho, recuerdo yo que había cierto profesorado allí que dejaba mucho que desear. Muchísimo que desear. Me he dado cuenta después. Es verdad que el Conservatorio de Sagunto deja bastante que desear, pero también depende de la especialidad, porque mi profesor de saxofón, que está allí, para mí es de lo mejor que hay. Luego, también está el interés que se tome el alumno, porque si no estudias, por muy buen profesor que tengas, avanzarás poco.


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Modificado por última vez en Viernes, 02 Diciembre 2022 10:14

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