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La joven escritora y artista de Puerto de Sagunto acaba de publicar su primer libro ilustrado, «La carga que no pesa», en la que narra un momento complicado de su vida compartiendo sus sentimientos con los lectores

Diana Paz: «Cuando arrastras cargas, cuando un duro golpe aparece sin aviso en tu vida, aprendes a valorar todo lo que te rodea»

La escritora de Puerto de Sagunto, Diana Paz, ha presentado su libro «La carga que no pesa» La escritora de Puerto de Sagunto, Diana Paz, ha presentado su libro «La carga que no pesa» Diana Paz: «Cuando arrastras cargas, cuando un duro golpe aparece sin aviso en tu vida, aprendes a valorar todo lo que te rodea»
Viernes, 26 Febrero 2021 21:33

La escritora y artista de Puerto de Sagunto, Diana Paz Vargas, acaba de publicar su primer libro ilustrado que ha titulado La carga que no pesa. Esta joven de la localidad, de 24 años, ha querido relatar en este primer trabajo literario, un momento complicado de su vida del que ha sacado una buena experiencia a pesar de las circunstancias. «Yo estaba pasando por una dura época, un problema, una carga: me enfrentaba a una enfermedad, epilepsia, y recibí la noticia de que la causaba un tumor cerebral que había que sacar. Mientras esperaba que me llamaran para operar, vacié mis nervios escribiendo pequeños textos de cómo me sentía. Cuando me operaron también lo hice, y así seguí conforme todo aquello iba pasando. En los meses de recuperación, con la lección que había y estaba viviendo, decidí que de esos textos tenía que sacar algo más, y formar una historia completa acompañada de mis ilustraciones», ha apuntado la escritora local. Quienes ya han leído este libro destacan del mismo que la autora transmite una gran lección de vida, siendo su actitud ante ese momento de su vida, un ejemplo de superación.

Para quien no la conozca, ¿quién es Diana Paz?

Diana Paz es una joven artista de 24 años de El Puerto de Sagunto. En realidad, supongo que soy muchas cosas, pero, he decidido, humildemente, empezar a reconocerme a mí misma como artista, porque eso es lo que me hará creer en mí, en lo que puedo llegar a hacer, y querer más aún el arte. Con diferentes inquietudes, yo estudié Comunicación Audiovisual y Publicidad y RR.PP., pero hace un par de años no hubiera imaginado que lo que me hace feliz ahora mismo es lo que, en realidad, me lo ha hecho feliz siempre: pintar y contar.

¿De dónde le nace su pasión por la escritura?

A pesar de que pueda parecer una pasión más bien reciente porque nunca antes me había sentado a escribir un libro de este modo, en realidad siempre me ha nacido de dentro darme a la escritura para trasladar mis reflexiones o mis sentimientos, directos de mente a folio. Muchas veces como necesidad de evasión, otras, como afición. Pero, desde luego siempre he sido de dar mil vueltas a las palabras y reformular los textos hasta que tengan el significado y la contundencia que busco para comunicar lo mejor posible. Además, soy comunicadora de profesión, así que es cierto que continuamente he tratado de explorar y explotar mi capacidad comunicativa. Será que esa faceta ahora ha salido aún más disparada.

¿Por qué se decidió a escribir La carga que no pesa?

Como dice el libro en su sinopsis: Yo tenía una carga que quise contar.

Más bien es una bonita decisión inesperada. La carga que no pesa no nace en un principio con la pretensión de ser un libro ilustrado, y menos, llegar a ser publicado, pero por suerte hubo un giro que hizo que decidiera sacarlo a la luz. Yo estaba pasando por una dura época, un problema, una carga: me enfrentaba a una enfermedad, epilepsia, y recibí la noticia de que la causaba un tumor cerebral que había que sacar. Mientras esperaba que me llamaran para operar, vacié mis nervios escribiendo pequeños textos de cómo me sentía. Cuando me operaron también lo hice, y así seguí conforme todo aquello iba pasando. En los meses de recuperación, con la lección que había y estaba viviendo, decidí que de esos textos tenía que sacar algo más, y formar una historia completa acompañada de mis ilustraciones. Así fue como lo que un principio sirvió como vía de desahogo, se transformó en un libro con un mensaje totalmente distinto y muy lejano a un drama.

El libro se centra en una historia personal, ¿le ha costado recordar las vivencias pasadas en este momento de su vida?

En el libro vamos apreciando saltos temporales: unos textos están escritos en presente, cuando todo sucedía, y otros escritos desde el recuerdo, cuando todo había quedado atrás. En cuanto a estos últimos, diré que me parece muy curiosa la manera que tenemos de recordar. Hay recuerdos que me costaron más días poder explicarlos bien, pues me quedaba bloqueada por el sentimiento de malestar que me producían. No obstante, una vez que pude sacar de mis experiencias personales unos recuerdos visualizados desde otra perspectiva, la de la superación, me di cuenta que son los que nos llevan al mejor mensaje del libro, además con la forma sincera, natural y transparente con la que es narrado. Por tanto, reconozco que, al final, ha sido precioso pararme en los recuerdos.

¿Qué ha querido transmitir con este libro?

Con mi libro he querido transmitir el mensaje de cómo ante duros problemas, podemos encontrar fuerza para transformar el malestar que sentimos en una forma positiva, bonita y, sobre todo, agradecida de enfocar la vida y las vivencias personales. Pero a parte, sin pretensión de ponerme de ejemplo ni mucho menos, he querido lanzar un grito de “no tienes por qué poder solo”. Cuando arrastras cargas, cuando un duro golpe aparece sin aviso en tu vida, aprendes a valorar todo lo que te rodea: las personas que caminan contigo, tus capacidades y virtudes, los valores que puedes hacer crecer dentro de ti, las creencias en las que puedes apoyarte. Todo depende de la mirada y la actitud que le pongas. Así realmente es como puedes conseguir que tu carga no pese tanto.

«Con este libro, además de todas las reflexiones a las que llegué en su momento y que deposité en él, he aprendido algo que me ha hecho crecer como persona y como artista: soy capaz».

Ha querido alejarse del drama para contar su historia, ¿este libro también le ha servido de autoayuda, para poder expresar todo lo que sentía?

Efectivamente, escribir el libro me ha ayudado mucho. Expresar lo que sentía ha sido una vía de desahogo, como decía anteriormente. Además, creo que ha creado cierta transformación en mí misma, pues al pararme de verdad a reflexionar sobre las cosas que iba sintiendo para plasmarlo lo mejor posible en textos y dibujos, me ha hecho detenerme a analizar bien qué sentimientos tenía en realidad y cambiar el chip a mejor. Digamos que era ver en detalle aquello que llevas muy dentro pero alejándose de solo lo malo. A parte, disfrutar haciendo las ilustraciones fue una forma de evasión muy bonita. Es como que al final todo ha sumado a mi favor.

En su libro también hay lugar para ciertos toques de humor, ¿es importante afrontar este tipo de situaciones que narra en el libro con una actitud positiva?

Por supuesto, la positividad es fundamental para no hundirse constantemente, así pues este libro deja un sabor alegre, incluso mete algunos pequeños guiños de humor. Pero también, debemos concedernos nuestros momentos de bajón, yo por supuesto los tuve y los cuento sin ocultarme; permitirnos llorar todo lo que queramos y no sentirnos mal por ello. Llorar también es positivo. De hecho, yo admiro mucho a las personas que lloran cuando lo necesitan. Lo importante es que después de esos bajones remontemos, porque así es como crecemos haciéndonos fuertes. Saber caer y aprender a levantarse, esa es la clave. Por ello, el libro muestra ambas partes de peso.

¿Por qué eligió como título La carga que no pesa?

Sinceramente, me costó bastante llegar a este título. Para sacarlo tuve que analizar el libro en su conjunto y, al final, extraerlo de su mensaje. De hecho, creo que lo más guay es que el lector entiende el título cuando se lo lee, y lo mejor es que pasa lo mismo con la ilustración que hice para la portada. Aún así aquí lo explicaré bien. Tras una gran lluvia de ideas, me quedé con que el libro habla, obviamente, del problema que yo viví, pero que lo sobrellevé gracias a todo de lo que me rodeé: mi actitud, mis valores y, sobre todo, las personas que estuvieron a mi lado. Así que decidí cambiar ‘problema’ por ‘carga’ al llegar a la retórica conclusión: esta es una historia de una carga que no pesa.

¿Qué ha aprendido escribiendo este libro?

Con este libro, además de todas las reflexiones a las que llegué en su momento y que deposité en él, he aprendido algo que me ha hecho crecer como persona y como artista: soy capaz. Por mí sola o acompañada, pero he conseguido decirme “Diana, sí que puedes”. Fíjate, a pesar de quizá ser algo sencillo, he conseguido hacer y publicar mi primer libro estando en una de las peores etapas de mi vida que he vivido hasta ahora, así que tengo que pensar en lo que puedo llegar a hacer estando bien. No hundirme con otras pequeñas cosas a las que enseguida le pongo etiquetas de “problemas” cuando no lo son. No ponerme tantas barreras y recordarme siempre mi propio “adelante”. Y para ello, puedo recurrir a leer mi libro siempre que lo necesite.

¿De qué manera pudo superar ese momento tan delicado de su vida?

Ante todo, lo superé siendo consciente desde el primer momento de que esto tenía que pasarlo para recuperar mi estado de salud, el que tenía antes de empezar con epilepsia. Tenía en la mente la frase que siempre dice mi abuela: las cosas hay que cogerlas como vienen. Así es, como no me quedaba otra, venía algo duro, sí, pero intenté dejar de atormentarme y cogerlo de frente. Además, yo siempre pienso que todo pasa por algo, y esto pasaba no solo para mejorar mi salud, sino seguro que también para mejorarme como persona. Por supuesto, lo superé tal y como cuento en el mensaje del libro, apoyándome en algo tan importante como las personas que me quieren y, sinceramente, también en mi fe.

¿Cómo definiría su estilo literario?

De momento, conservo un estilo narrativo sencillo y directo, a la par que delicado y sutil. Pero también, un estilo con cierto giro poético, y tendencia al empleo de metáforas y símiles. Es cierto, que este libro al estar contado desde la total transparencia, consideré que era así de directo como debía utilizarlo. De todas formas, aunque me sienta muy cómoda con él, nunca se sabe por dónde puede continuar o cambiar mi estilo, eso sí, sin perder mi esencia.

dianapazlibroEn este libro, Diana Paz, nos relata un momento complicado en su vida

¿Por qué decidió que fuera un libro ilustrado y que las ilustraciones fueran suyas?

Como siempre me ha gustado dibujar y pintar, después de mi operación empecé una Maestría de Ilustración en una escuela de arte de Valencia y allí, cuando estábamos empezando con diseño de personajes, hice un boceto que era como lo que podría ser el protagonista de esos textos que tenía sueltos y con los que quería hacer algo. Yo seguía aprendiendo, tanto nuevas técnicas como ilustrar narraciones adecuadamente, y cada vez me gustaba mucho más el mundo de la ilustración, así que tome a la vez la decisión de hacer un libro con mi historia y que fuera todo ilustrado por mí, incluso la portada.

¿Se podría decir que es una artista multidisciplinar?

Si que es cierto que tengo inquietud por muchas disciplinas artísticas, y me gusta descubrirme qué puedo sacar de mí en ellas. Sin duda, la que más me apasiona es la pintura, y dentro de ella, probar distintos tipos de técnicas y formas de aplicarla (como ilustrar), pero además, me gusta el diseño, le doy a la fotografía y a la escritura ¡Incluso llegué a hacer teatro! Y bueno… también a aprender guitarra, pero desde luego la música sí que no es lo mío.

¿Qué opiniones ha recibido de las personas que ya han leído su libro?

Pues la verdad es que estoy realmente desbordada de emoción por la gran acogida que ha tenido el libro en el poquito tiempo que lleva a la venta. Estoy recibiendo unas respuestas preciosas, de esas que alientan y llegan al corazón. La gente me dice que ha llorado y ha reído a la vez, que lo han disfrutando y, sobre todo, lo han sabido valorar. Muchos me dicen que las ilustraciones están muy bien elegidas y plasman a la perfección lo que cuento. Que te digan eso como ilustradora es impresionante. Además, mucha gente coincide en decirme que cuando lo leen parece que estoy a su lado contándoselo, por la naturalidad con la que está escrito y pueden verme totalmente a través de él. Por supuesto, siendo todas las opiniones para bien, hay distinción en lo que cada lector se queda, dependiendo lo que más le marca, con qué detalles, con una parte u otra, etc. Yo así ahora mismo estoy viviendo como en una nubecita, porque no me esperaba recibir todo este cariño por algo que haya creado yo, y en lo que tanto me he volcado.

Quienes han leído su libro destacan que ofrece una gran lección de vida y un ejemplo de superación, ¿ese era su objetivo al escribirlo?

Es cierto que recibo esa respuesta de mucha gente, pero yo no pretendí ni pretendo ponerme como ejemplo, pues no me considero tal cosa. Hay muchas personas con historias más fuertes y realmente dignas de aplausos. Pero claro, cada uno puede hablar de lo que vive, y esto fue la que me tocó a mí. Sin embargo, el libro quiere trasladar al lector mis valores y reflexiones para que cada uno se las pueda adaptar a sus vivencias, sean del tamaño que sean. Quiero conseguir abrir un poco el corazón a valorar más lo que tenemos, aprender a distinguir lo que es un problema de lo que no, para que cuando vengan los de verdad, saquemos lo mejor de nosotros. Y, por supuesto, ojalá consiga dar ánimo a quien mas lo necesite. Con un poquito que pueda ayudar a una persona, este libro y su esfuerzo habrán merecido la pena.

¿Dónde se puede adquirir el libro?

La carga que no pesa se puede conseguir en librerías físicas u online. Algunas librerías ya tienen stock en tienda, en El Puerto, Sagunto y Valencia, pero prácticamente en cualquier librería que no tenga en tienda si se pide te lo traen sin problema. Incluyendo grandes superficies como Casa del Libro y Fnac. Por venta online yo recomiendo principalmente la web de Libros.cc. que funciona genial, llegan muy rápido y sin gastos adicionales. También se puede adquirir en Amazon. En mi Instagram @dianapaz_dp podréis encontrar mucha más información, y de hecho, me encantaría recibir por ahí respuestas sobre mi libro por esta red social o páginas de libros.

¿Algún proyecto artístico de futuro del que nos pueda hablar?

Pues ahora mismo creo que es mi momento para coger bien fuerte todo lo que me ha dado este libro, aunque haya sido hecho para dar y no para recibir, y lanzarme más de lleno en el mundo artístico sin parar. Quiero seguir ilustrando, escribiendo, creando y ofrecer al mundo el arte que pueda tener. Porque entre toda mi incertidumbre y la que nos rodea en esta época, si algo tengo claro, es que, como me dicen muchos, no tengo que desligarme del arte, pues quizá es mi herramienta de aportar algo de luz en la oscuridad. Así que sí, aún no puedo hablar, pero habrá nuevos proyectos.

¿Alguna cosa más que quiera añadir?

Sí, a modo muy personal, al final el libro ha sido una excusa para dar gracias. Se nos olvida, a mí la primera, pero siempre hay que dar gracias, porque así es como podemos cambiar el chip. Que una cosa mala nos lleve a una buena, y una buena nos lleve a otra mejor. Y cuando volvamos a caer en otra mala, sabremos que es por algo, y seremos capaces de mirar más allá y encontrar otra que agradecer. En el libro le doy gracias a muchas personas, y sin duda, no se las merecen solo en este pasaje, se las merecen siempre.
Por supuesto, dar las gracias también a este periódico por dedicarme a mí un espacio.


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Modificado por última vez en Viernes, 05 Marzo 2021 22:48

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