Sumidos en la crisis sanitaria del COVID-19, que ha puesto a toda la ciudadanía en confinamiento en sus casas, la educación no ha sido menos, ya que, desde el jueves 12 de marzo la sede y Escuela de Música Unión Musical Porteña, tomó la decisión de suspender las audiciones, así como el día posterior, la clausura de sus instalaciones.
Está situación imposibilita la asistencia tanto al alumnado, profesorado y personal del centro a la escuela. Pensando en los alumnos, sus familias y los profesores, la Escuela de Música Unión Musical Porteña, con su Junta Directiva a la cabeza, ha decidido seguir manteniendo el equipo docente, aprovechar las nuevas tecnologías con las que la escuela ya contaba y seguir trabajando con el alumnado para que así no pierdan el curso ni, por supuesto, su contacto con la música.
Estas medidas se pueden tomar gracias al saneado estado de las cuestas, tal y como informan desde la entidad musical, por lo que el profesorado conservará su empleo. Como medida extraordinaria, todos los alumnos disfrutarán de una rebaja temporal de la cuota del 50%. Dicha medida se aplicará a partir del mes de abril y mientras no sea posible volver a las aulas, de manera que todas aquellas familias que hayan visto mermados sus ingresos por esta situación no tengan que renunciar a las clases musicales de sus hijos o de ellos.
«Lo que buscamos es dar la mayor normalidad posible frente a esta situación. La Escuela Unión Musical Porteña apuesta por seguir formando adoptando nuevos canales y nuevos métodos, adaptados a la situación. Queremos agradecer la confianza depositada a todos nuestros alumnos», afirman desde la sociedad musical.
