Las obras que se muestran en la exposición son el resultado de una actividad artística planteada y desarrollada como un juego, con reglas, espacios y tiempos, pero también con la libertad, la alegría, la satisfacción que proporciona el juego entendido como actividad puramente lúdica. Así define Visi, una de las componentes del taller OCI-ART, la primera exposición colectiva titulada Arte y juego que se expondrá en el Centro Cultural Mario Monreal desde el 4 de diciembre, cuando se inaugure, hasta 28 del mismo mes.
OCI-ART es un grupo de mujeres de diferentes edades, profesiones y vidas a las que les une la pasión por el arte. Todas coinciden en que experimentar en grupo influye en el desarrollo artístico de cada una y, por ello, dejan fluir todo lo que aprenden para llegar a la abstracción que demuestran en la exposición.
El director del colectivo, Pedro Lozano, expresa que estas experiencias «obligan a indagar cada vez más nuevas posibilidades creativas y el resultado es la suma de ellas». Paqui, otra miembro del colectivo, expresa que si utilizan el juego para expresar sus emociones «estamos haciendo arte». Por su parte, Lola, manifiesta que pintar es para ella «sacar de nuestro interior las emociones y llevarlas al lienzo».
Raquel, habla sobre la importancia del grupo, «que te enseña, te anima, te motiva, te aporta ideas, te ayuda a ver desde ópticas diferentes»; y su compañera Loli constata que esta «es una experiencia muy enriquecedora». Para Rosa, «en mi aprendizaje y evolución me uní a las clases de Pedro y fue la mejor decisión que tomé en mi vida».
Silvia, otra miembro del grupo, expresa su emoción por pertenecer a este colectivo y porque «nunca imaginé hace veinte años cuando empecé con cursos de dibujo, pintura y grabado, que continuaría tanto tiempo con la aventura del arte».
