Alberto Rey, de 25 años, realizó su trabajo en el sótano de sus padres y con pocos medios, pero con una clara intencióny mensaje

El corto de un joven de Puerto, finalista en Nueva York y segundo en Cinerama Film Festival

 
Jueves, 25 Mayo 2017 11:51

webalbertorey1Alberto Rey
De la necesidad imperiosa de aportar su granito de arena en el tema de los refugiados y concienciar a la gente de la falta de valores que sufre Europa ante tal crisis humanitaria. Así surge Shame, un proyecto dirigido por un vecino de 25 años de Puerto de Sagunto, Alberto Rey, quien  tras seguir el año pasado en prensa y leer La nueva odisea, historia de la crisis europea de los reffugiados, de  Patrick Kingsley, decidió escribir un guión y animarlo en stop-motion, su técnica favorita.

El resultado del trailer no convenció a su autor, como él mismo ha reconocido a El Económico, «tenía escasos conocimientos de animación a pesar de ser un fanático de esta técnica, pero se percibía un mensaje claro y directo».

Así que, guiado por las buenas intenciones de su proyecto, Rey empezó a contactar con gente para intentar formar un equipo y sacar la idea que tenía adelante. Durante meses también intentó sin éxito buscar financiación, hasta que en diciembre, con toda la preproducción hecha, este artístico joven buscó un trabajo para poder auto financiar su cortometraje. «A pesar de contar con algo de dinero, el cortometraje es muy humilde y lo grabamos en el sótano de la casa de mis padres», reconoce entre risas el autor del mismo.

Junto a Daniel Sunday, también de Puerto, Jorge Domingo, de Canet d’En Berenguer y otros compañeros de prestigio reconocido a nivel internacional (Adrián Piqueras, Elia Cuenda, Fernando Ros, Víctor Saez, Irmina Insaurralde,  María Sánchez y varios colaboradores), este guionista,  director y productor, se puso manos a la obra en contra de la normalización con la que, según explica, los medios de comunicación tratan la masacre en Siria.
 
Normalización de una masacre en los medios

«Muerte de civiles, las pateras hundidas en el mediterráneo, más muerte, masacre…y aquí como si no pasara nada. Empecé a buscar información sobre el tema, a seguir asociaciones de refugiados por las redes sociales, y me hice mi propia opinión de lo que ocurría allí. Seguramente no sea ni mucho menos la más acertada, ni haya manejado el 10% de todos los datos, pero ante la normalización de lo que ocurre, sentí que debía hacer algo», manifiesta a este rotativo Rey.
webalbertorey3Una escena durante el rodaje de Shame
Sin medios para convertir en realidad su idea, pero con ilusión y con la ayuda de la técnica de animación que le apasiona, Alberto comenzó a realizar un cortometraje con la clara intención de hacer reflexionar a la gente que lo viera (ahora solo está disponible en los festivales en los que el corto es seleccionado, no se puede ver en plataformas online).

Y así surge Shame (significa vergüenza en inglés), un nombre que define los sentimientos de este director local, un corto que refleja, como él mismo explica «la forma que tienen los gobiernos europeos de dejar morir a personas por beneficio económico, llegando a crear noticias falsas en ciertos medios nacionales para poner en contra a la opinión pública».

«Quiero que el espectador sienta y que entienda porqué la gente emigra, que al acabar de verlo se sientan mal, y que no sea una historia más. Shame es lo único que he podido hacer por esta causa, así que espero que mi intención se cumpla y que la gente que no está a favor de aceptar a los refugiados cambie su forma de percibir el tema», relata el productor.

La falta de dinero y medios hizo que el proyecto se fuera dilatando, pero el mismo consiguió estar listo hace un mes, tiempo en el que el autor lo ha presentado a varios festivales nacionales e internacionales. Hace un par de semanas, cuenta entusiasmado Alberto Rey, «recibimos  la primera selección de Shame, en el NCCC Film & Animation Festival, celebrado en el estado de Nueva York, Estados Unidos, siendo finalistas, algo que nos emocionó y nos hizo sentir muy felices. Y el martes por la tarde, se pusieron en contacto vía mail del festival  Cinerama Film Festival, para informarnos del segundo premio en el mismo, celebrado en Valladolid».
 
Incredulidad

Es la primera selección que el colectivo recibe en el ámbito nacional y el primer premio de Shame, así que, explica el productor del corto «estamos muy contentos por poder llevar nuestra crítica a la gran pantalla y por el reconocimiento a nuestro proyecto realizado humildemente y con un gran respeto. Los primeros segundos son de incredulidad, a los pocos minutos vas siendo consciente y ves todos los malos momentos, todos los comentarios negativos que he aguantado, la falta de interés y de apoyos de las personas más cercanas...Por último, sentí felicidad, porque a pesar de todo, he conseguido terminarlo, siendo consciente de los errores y de la humildad del proyecto. Y me gustaría destacar el compromiso de todo el equipo, en especial el de Adrián Piqueras, que ha sido una persona muy importante en todos estos meses, aunque quizás él no sea consciente. Desgraciadamente, no podré asistir a la entrega de premios por la incompatibilidad de horarios con el trabajo, pero el festival, que nos han tratado estupendamente, nos han facilitado el diploma que acredita nuestro segundo puesto».
webalbaertorey4Técnica utilizada en la grabación de Shame
Y así, presentándolo a múltiples festivales, es la mejor forma, afirman, en la que la gente se puede hacer eco de sus mensajes y trabajos. «Ahora que hemos sido finalistas en Nueva York y hemos conseguido el segundo premio del Cinerama Film Festival, la gente empieza a interesarse y a tomarse en serio el corto», afirma su máximo representante, quien describe su obra como  «una historia que cuenta el naufragio de Ahmad y su padre en el Mediterráneo y las horas que pasan en el mar. También van a aparecer extraños trajes sin cabeza que tendrán un rol fundamental en la conclusión del corto.  Además, hemos querido hacer un homenaje a Pablo Picasso y a los 80 años del bombardeo de Guernica, haciendo un guiño en una escena de Shame», adelanta Rey.
 
Proyectos

Ahora, Alberto tiene en mente poner en marcha uno de los primeros guiones que escribió hace tres años. Después de terminar el curso de animador stop-motion que realizará este verano, el productor se pondrá a trabajar en el mismo. Lo realizará también en stop-motion, pero utilizando otra modalidad y novedades adquiridas en sus próximos estudios. «No será con muñecos y espero poder terminarlo para 2018», desvela.

A la espera de poder ser visto on line, Shame, que, como bromea su autor «ha viajado más en un mes de vida que yo en 25 años: de Nueva York a Valladolid», ha hecho realidad el sueño de unos jóvenes que, desde un sótano de Puerto de Sagunto,  con 4 cartones y dos mesas, han logrado enviar al mundo el mensaje de solidaridad y empatía de un grupo de buenos amigos ante una barbarie humana.

«Esperemos que nos continúen seleccionando en más festivales porque eso significará que Shame tendrá público y de esta forma podrá cumplirse nuestra intención», finaliza  el productor del mismo.

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Modificado por última vez en Sábado, 10 Junio 2017 00:48

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