Voluntarios de la Asamblea Comarcal Cruz Roja Camp de MorvedreLa asamblea comarcal en el Camp de Morvedre de Cruz Roja se ha propuesto aumentar su número de voluntarios. El sueño de la misma es que el 1% de la población de la comarca se una al voluntariado, pasando así de los 65 voluntarios actuales a los 700. Para ello, la entidad, capitaneada desde julio por Rafael González, anima a toda la comarca a acercarse a conocer el trabajo que los voluntarios realizan para ayudar a las personas del Camp de Morvedre que más lo necesitan.
En la actualidad, dicha asamblea comarcal, constituida en 2002, cuenta tan solo con 65 voluntarios activos, «una cifra relativamente pequeña», según las valoraciones de González, pero «cuya entrega y calidad humana hace posible llegar donde llegamos».
Y lo cierto es que llegan a muchos sitios, ya que el trabajo de los voluntarios de esta institución humanitaria (situada históricamente en la Avenida Mediterráneo, pero trasladada en la actualidad a la C/Sierra Javalambre, 10, de Puerto de Sagunto) abarca a numerosos colectivos y aspectos sociales y sanitarios.
Según su presidente «durante los últimos años, al igual que la sociedad, la asamblea de Camp de Morvedre ha ido evolucionando para atender mejor y estar más cerca de las personas vulnerables a través de acciones integrales, realizadas por voluntarios y con participación social».
El equipo de Cruz Roja Camp de Morvedre se guía atendiendo a un conjunto de planes de acción y proyectos, mediante los cuales dan vida a una intensa actividad en toda la comarca.
Intervención social
La intervención social, es, según los miembros de Cruz Roja, la más importante. Y no es para menos, ya que, como explican desde el colectivo «mediante una entrevista a la persona que acude a pedirnos ayuda, se estudian sus necesidades y se le redirige a aquellos proyectos en marcha, capaces de dar respuesta, en muchos casos inmediata, en otros no tanto, siempre en las medidas de las posibilidades de la asamblea. Si no se le puede dar respuesta, mediamos ante otras entidades u organismos, capaces de satisfacerlos. Todos los proyectos se complementan entre sí, de tal forma que se procura una acción integral a quienes acuden a la asamblea del Camp de Morvedre».
También desde la misma se realizan repartos de alimentos a personas desfavorecidas de la comarca. Dichos alimentos son financiados a través de programas de ayuda tales como el FEAD (Fondo de Ayuda Europea para los Más Necesitados) de la Unión Europea. Esta labor es realizada en su totalidad por los voluntarios de la Asamblea.
Reparto de alimentos
El proyecto Alimentos para la Solidaridad se desarrolla a través de la donación de alimentos sobre la que trabajan los voluntarios de la asamblea. «Estos, explica el máximo representante del colectivo, una vez recogida, inventariada y registrada la donación si es grande, o varias pequeñas, organizan el reparto de la misma a personas necesitadas y en situación de extrema vulnerabilidad».
La orientación laboral es otro de los aspectos en los que se vuelvan los voluntarios. Se trata éste de un proyecto abierto a toda la población del Camp de Morvedre, que ofrece una asistencia tutorial a quienes la demanden. En la misma, se les ayuda a redactar un Currículum Vitae, se les orienta y marcan pautas en la búsqueda activa de un empleo. También se les instruye sobre cómo enfrentarse con ciertas garantías de éxito a una entrevista de trabajo o simplemente a presentar su candidatura a un empleo que sea de su interés, informan desde la asamblea.
Búsqueda de empleo
En breve, además, y como informan desde la entidad, se tiene previsto pasar a una segunda fase, en la que, como explica Rafael «queremos gestionar las relaciones con empresas de la comarca, susceptibles de poder ofrecer empleo a nuestros demandantes. Ponerles incluso en contacto a unos y otros. De esa forma, facilitaríamos la consecución de un puesto de trabajo a quienes lo buscan activamente. Todo esto sería gestionado por los voluntarios de la asamblea, especializados y preparados para impartir esta formación».
La Juventud es otro de los proyecto a los que se le concede suma importancia y entorno al que se llevan a cabo varias actuaciones, impulsadas por jóvenes voluntarios hacia jóvenes también de la comarca, menores de 30 años.
Voluntarios de cruz Roja en una de las actividades del Proyecto Juventud.Sara Martínez, referente de Cruz Roja Juventud en la asamblea, explica que «me hice voluntaria en 2013, después de realizar un Campo de Trabajo en el País Vasco e indagar en qué asociación de mi entorno podría ayudar a las personas. Me decanté por Cruz Roja y fui a visitarles. Desde el principio me sentí muy a gusto y eso hizo que me fuera implicando cada vez más».
Endulzando vidas
La misma fuente ha afirmado que «es muy gratificante ver como tu tiempo hace que la vida de los niños y jóvenes cambie un poquito, o al menos, se olviden de su complicado entorno durante el rato que pasas con ellos. La verdad es que ser voluntaria te engancha, y mucho. Ahora no me imagino mi vida sin Cruz Roja, la verdad. Se recibe mucho más de lo que se da: cariño, agradecimiento, reconocimiento, sonrisas, sentirte útil. Es una sensación que todo el mundo debería animarse a experimentar», concluye Martínez.
Y es que, añaden, con muy poco que aporte cada uno, se puede conseguir muchísimo. Las actividades que componen el proyecto juventud son, según explican sus responsables: Promoción del éxito escolar, campañas de sensibilización en institutos, medio ambiente, ludoteca, juguete educativo, vuelta al cole solidaria y ropero.
voluntarios de menos de 30 años de la comarca ayuda, como explican desde la institución a niños y familias en dificultad social, a los que, «a su paso por la asamblea, se les facilita el poder hacer los deberes de clase, se les infunden hábitos escolares especiales y se les da la merienda. También se les anima haciéndoles partícipes de diversas actividades lúdicas, talleres educativos, educación en valores y excursiones por la comarca a fin de que la conozcan y desarrollen su capacidad de convivir y relacionarse con otras personas en un ambiente positivo».
Los mismos, además, acuden a los institutos de la comarca a realizar campañas de sensibilización en institutos. A través de actividades dinámicas se abordan temas tan importantes para la juventud como son el Virus de Inmunodeficiencia Humana (V.I.H.), el problema de las drogas y el alcohol, la violencia de género y la igualdad de género.
La asamblea también se está adecuando a los estándares medioambientales ecológico y en colaboración con la asamblea local de Valencia, participa en el proyecto de prevención de incendios en el parque Natural de la Devesa del Saler.
También, a través de actividades lúdicas, se llevan a cabo talleres de sensibilización y divulgación de conceptos medioambientales.
Ludoteca
Durante los meses de julio y agosto, en el área de servicio de la autovía AP-7 habilitó un espacio lúdico para que los niños más pequeños pudieran jugar y relajarse mientras sus padres descansaban tras un largo viaje. Los voluntarios atendían y entretenían a los pequeños, mientras los mayores descansaban y se refrigeraban tranquilamente. La finalidad de la ludoteca es, como señalan a El Económica desde Juventud Cruz Roja «mejorar el descanso de los padres y reducir su estrés en viaje, motivado entre otras cosas por la constante atención que requieren los niños. De esa forma, vuelven a la carretera pero descansados de verdad, pudiendo prestar más atención a la seguridad vial y, contribuimos desde Cruz Roja a reducir el número de accidentes de tráfico en los trayectos de las vacaciones de verano».
El reparto de juguetes nuevos a los niños de familias en extrema vulnerabilidad, es otro de los aspectos a los que se da respuesta desde el proyecto juventud de la asamblea comarca de Cruz Roja.
Vuelta al cole solidaria
Esta actividad se realiza desde hace años en colaboración con la Fundación Carrefour al comienzo del curso escolar. Consiste en la organización de una recogida de material escolar a las puertas de dicho centro comercial participada por voluntarios de la asamblea. Estos se ubican en los accesos al hipermercado e invitan a colaborar a los clientes que llegan, comprando algún producto escolar cualquiera, que depositarán a su salida en un contenedor especial habilitado para ello.
Mediante esta actividad, desde Cruz Roja en Camp de Morvedre atiende las necesidades de material escolar de familias en riesgo de exclusión social de la comarca, de modo que todos los niños puedan tener la oportunidad de comenzar sus clases con el material adecuado y pertinente.
También para los más necesitados, los voluntarios de Cruz roja mediante el proyecto Ropero, en la asamblea se recogen donaciones de ropa, enseres, ropa de cama y artículos de bebé, los cuales, tras ser inventariados y clasificados, son repartidos por los mismos entre aquellos usuarios que demandan ese tipo de ayuda.
Un sinfín de acciones que, aunque parezca imposible, llevan a cabo entre menos de 70 personas. La ilusión y las ganas de trabajar y ayudar a quienes lo necesitan, son el motor que mueven a los voluntarios de esta tradicional institución social y sanitaria y sin quienes, como afirma su presidente «nada sería posible».
Los voluntarios son, según su máximo representante «el alma y el motor de Cruz Roja y como no puede ser de otra manera, son ellos los que hacen realidad estos proyectos y acciones, así como otras muchas que se llevan a cabo y que se quieren poner en marcha con el tiempo. La entrega de los mismos, cada uno en su ámbito y proyecto, con su aportación de tiempo, mucho o poco, pero de una forma totalmente desinteresada en cualquier caso, tiene por objetivo único aportar su granito de arena para ayudar a los demás. Y ello es lo que hace posible que llevemos adelante toda esa actividad humanitaria y asistencial».
Sin embargo, toda aportación es poca a la hora de ayudar a quienes más lo necesitan. Por ello, desde la asamblea invitan a todos los vecinos y vecinas del Camp de Morvedre a conocer el trabajo que realizan y a sumarse en la ayuda a los más desfavorecidos. «Quiero aprovechar esta ocasión para animar a la población de Camp de Morvedre a hacerse voluntaria de Cruz Roja. Cada persona puede ayudar en base a su disponibilidad de tiempo libre en la cantidad de horas y días que pueda o desee. No importa si es mucho o poco, todos podemos ayudar y mi objetivo como delegado de la asamblea es lograr que el 1% de los habitantes de Camp de Morvedre se haga voluntario de Cruz Roja. Ello nos daría por tanto una cifra de unos setecientos voluntarios aproximadamente, lo que sería casi un sueño, por la ingente cantidad de actividad y proyectos que podríamos llevar a cabo en favor de los vecinos de la comarca y que ahora no podemos».
Desde el colectivo hacen un llamamiento a la población para poder conseguirlo. El sueño de ayudar a quienes más lo necesitan. Porque hoy son ellos, mañana puedes ser tú.
