Las obras de la calle Valencia están, según el consistorio, a punto de finalizarle, pero los vecinos llevan sufriendo las consecuencias de dichos trabajos desde 2015. Además de los ruidos, cortes de circulación y la inutilización de sus vados durante casi un año, denuncian la primera actuación de la empresa Bertolín, que finalmente no sirvió de nada, la falta de trabajadores, los acabados en los bordillos de los garajes de los vecinos y la poca supervisión de los técnicos...