El pasado jueves, se celebró en Faura una reunión donde se habló de la situación de la línea de alta tensión que atraviesa el pueblo. La reunión, que fue convocada por la Associació de Veïns de Faura, y a la que asistieron cerca de una veintena de vecinos a pesar del intenso frío, se compuso de dos partes bien diferenciadas.
La primera fue informativa, en la que Salva García, presidente de la asociación, explicó el trabajo que durante más de diez años lleva haciendo el ayuntamiento para tratar de desviar el trazado de la línea y el contacto mantenido por la asociación de vecinos con las empresas propietarias de las líneas, Red Eléctrica Española e Iberdrola.
En la segunda parte de la reunión, se explicaron los motivos por los que la asociación de vecinos propone iniciar la movilización vecinal: «es cierto que hay un proyecto más o menos firme por parte de Red Eléctrica de sacar la línea fuera del municipio durante 2020 y que según nos comentan desde el ayuntamiento, la empresa siempre ha respondido, pero no es menos cierto, que en los últimos meses se han suscitado una serie de dudas sobre el citado proyecto, a la vez que se han incrementado el malestar y las quejas vecinales por los más de doce años que llevamos de convivencia diaria con la línea de alta tensión a escasos metros de nuestras viviendas, a lo que hay que sumar la aparición de síntomas patológicos posiblemente atribuibles a la constante exposición a los campos electromagnéticos que genera la línea».
Por esto, y después de un interesante debate en el que pudieron participar todos los vecinos que asistieron a la reunión, la asociación vecinal decidió convocar en los próximos días una asamblea para decidir entre todos la hoja de ruta a seguir para una movilización vecinal «sabia, adecuada y efectiva».