La Asociación TDAH Morvedre, de apoyo a las personas con Trastorno de Déficit de Atención, Impulsividad, con o sin Hiperactividad y sus comorbilidades y sus familias demanda ayudas urgentes ante la «vulnerabilidad» a las que se ve sometido este colectivo por la falta de ayudas económicas y tratamientos terapéuticos psicológicos públicos adecuados.
Como explican, el gasto medio mensual para las familias y por persona con este problema de Salud Mental y sus comorbilidades (Trastorno Negativista Desafiante, Trastorno de Depresión, Trastorno de Ansiedad, Trastornos de Aprendizaje, etc...) supera los 400 euros entre tratamientos terapéuticos psicológicos y refuerzo terapéutico académico privado, necesarios para adquirir herramientas que les ayude a gestionar las dificultades derivadas del propio trastorno y sus morbilidades asociadas en todas las etapas de su vida.
«Las personas con TDAH y sus familias nos encontramos ante una dejadez y una falta de sensibilidad increíble por parte de los gobiernos de todos los ámbitos territoriales. Es increíble que, tal y como indica el último informe del Servicio Nacional de Salud del Ministerio de Sanidad, junto con los trastornos de ansiedad y de dificultades de aprendizaje estemos ante el problema de salud mental con mayor afectación en la población menor de 25 años, con un 1,9% de afectación, frente al 6% que indica la OMS, y se nos siga excluyendo, año tras año, de las becas del Ministerio de Educación para alumnado con necesidades específicas de apoyo educativo, donde se nos somete a tener reconocida una discapacidad de un 33% que desde la administración autonómica no se nos concede o conllevar un trastorno de conducta, el cual no siempre se deriva del TDAH y en la gran mayoría de los casos no es diagnosticado ya que éste se limita únicamente a TDAH y no a sus comorbilidades. Y tampoco desde el gobierno autonómico obtenemos respuesta. El año pasado trasladamos a la Dirección de Inclusividad Educativa de la Conselleria de Educación, junto con varias asociaciones de TDAH y de dislexia de nuestra comunidad autónoma, la concesión de ayudas de educación que suplieran la exclusión de las estatales, tal y como ya se está haciendo en otras comunidades y aún estamos esperando», ha señalado la presidenta TDAH Morvedre, Ángeles Cortés.
La representante de esta entidad, además, ha recordado que también solicitaron, a finales de 2021, la inclusión de este colectivo y el de otros problemas de salud mental, sin discapacidad reconocida, en las bonificaciones de las tasas municipales de las actividades deportivas y juveniles con el fin de facilitar el acceso de las familias a dichas actividades que, ante la sobrecarga económica que padecen no pueden hacer frente a más gastos, siendo, además, este tipo de actividades de «gran relevancia» para la mejora de su salud mental.
«Ya si empezamos a hablar del ámbito sanitario nos metemos en el gran pozo negro donde oímos hablar de manera continua de acciones de salud mental y contratación de recursos humanos y la verdad, todavía no sabemos dónde están éstos. Tenemos una Unidad de Salud Mental Infanto-Adolescente (USMIA), donde muchas de nuestras familias son atendidas exclusivamente por psiquiatría, sin ser derivadas a psicología, queremos entender que por falta de recursos humanos, y tienen una media de atención anual, por lo alto de seis sesiones que no sobrepasan los 40 minutos, es decir, cuatro horas al año. Ya no digo las atenciones que se nos presta en las Unidades de Salud Mental de Adultos, si es que éstas se pueden considerar como tales con una exposición a la medicación, como único tratamiento, brutal», afirma Cortés.
Es por este motivo por el cual, desde TDAH Morvedre denuncian «la falta de ayudas económicas de este gran colectivo, la falta de tratamiento terapéuticos psicológicos adecuados, no solamente para las personas con este problema sino también para sus familias y como decimos siempre; no buscamos culpables sino responsables ante la situación en la que nos encontramos de “sálvese quien pueda”. Si eso es trabajar por la mejora de la calidad de vida de este gran colectivo, por favor que alguien nos lo demuestre porque, a fecha de hoy, las palabras son muy fáciles de decir, pero los hechos dejan mucho que desear».
