El alcalde de Canet d'en Berenguer, Pere Antoni, ha mantenido una reunión con responsables de la Universitat Politècnica de València (UPV), dentro de la línea de trabajo que ambas partes llevan manteniendo con varios encuentros para tratar de buscar una alternativa «sostenible e integral» a la regresión que está sufriendo la costa.
El principal objetivo es conseguir «la retención de sedimentos» en esta zona costera, que se ha visto seriamente dañada por los diferentes temporales, entre ellos el Gloria; y la propia dinámica del litoral, afectada por el cambio climático, además de por la actuación realizada en las playas del norte con la construcción de espigones.
La suma de estos factores ha generado la aparición de piedra en la playa de Canet, afectándola en casi un 50%, y «lo más preocupante de todo es que el mar se ha comido 35 metros de costa, lo que nos obliga a buscar respuestas rápidas, efectivas y viables, no solo a corto plazo, que ya estamos en ello con la actuación anunciada de Costas en nuestra playa, sino para un futuro próximo que consiga estabilizar la regresión del litoral», explicaba el alcalde.
Con este objetivo, la UPV ha puesto encima de la mesa varias alternativas, que están siendo objeto de estudio por parte de los técnicos municipales y expertos de la universidad para «tratar de buscar la mejor solución al problema, la más sostenible y viable, encaminada a garantizar la retención de sedimentos, ya que el contexto actual ya no es el mismo que en 2019», fecha en la que se redacta el proyecto de Costas para regenerar las playas de Sagunto y Canet d’en Berenguer, insistía Antoni.
La primera opción que se baraja es la construcción de diferentes tipos de espigones, como se han instalado en otras costas españolas.
Desde la Universitat Politècnica de València también se propone la instalación de arrecifes paralelos a la costa, que aunque su efecto pudiera mermar la aportación de sedimentos a la misma, sí frenarían la fuga de arena.
La tercera de las opciones es la prolongación del espigón de Puerto Siles, una solución que permitirá la retención de sedimentos para la playa de Canet, pero sin impedir que el sobrante llegue hasta las playas del sur. Esta fue una alternativa que ya contempló el proyecto de IH Cantabria, Instituto de Hidráulica Ambiental de la Universidad de Cantabria, hace unos años.
«Lo que no cabe en estos momentos es la inacción, tenemos que actuar sí o sí, no hay alternativa, por eso se están estudiando con técnicos y expertos todas las opciones que están en estos momentos encima de la mesa, aunque seguimos trabajando en otras propuestas», añadía Antoni.
