El pico del Garbí es una de las riquezas que esconde el Parque Natural de la Sierra Calderona, una zona que es muy visitada desde hace muchos años pero cuyo acceso por la Frontera de Estivella no está en las mejores condiciones, como así han denunciado vecinos de la zona y usuarios de esta carretera quienes llevan viendo esta situación desde hace alrededor de cuatro o cinco años.
«Desde hace unos años venimos denunciando la existencia de unos agujeros de grandes dimensiones en esta carretera de acceso, unos agujeros que se han ido haciendo más grandes, sobre todo después de las lluvias que hemos tenido esta primavera porque el agua se ha ido comiendo la tierra de debajo y los ha hecho más profundos, tanto que te caben dos manos, una encima de la otra», ha explicado un vecino a este rotativo.
Este hecho preocupa mucho a los vecinos y usuarios de esta carretera puesto que, en los últimos tiempos, ha aumentado el tráfico de vehículos y cicloturistas que se acercan hasta esta zona del Garbí. «El Garbí se ha puesto de moda; sube mucha gente y los fines de semana se triplica la afluencia de personas. Incluso este año, en la Noche de San Juan como no dejaban ir a las playas, muchas personas optaron por subir a este pico a pasar esta jornada. Además, con la llegada del verano también son más las personas que se acercan hasta las segundas residencias que tienen en esta zona de la comarca», explican a El Económico.
Los vecinos califican el estado de esta carretera de «vergüenza» y afirman que ya han puesto alguna reclamación al Ayuntamiento de Estivella para que tome cartas sobre el asunto. «El primer kilómetro de esta carretera está reventado, con el consiguiente desgaste que produce a los vehículos que pasan por ella. Hemos avisado al ayuntamiento y, a pesar de que el Garbí es un emblema para Estivella, siguen sin hacer nada. Dicen que depende de la Diputación de València y que están esperando a ver si llega alguna subvención para actuar pero lo cierto es que han estado asfaltando otras calles que, aunque sus motivos tendrán, no llevan a ninguna parte», aseguran.
A pesar de esto, reconocen que hace unos dos o tres años el consistorio, a través de una subvención, contrató a dos personas para llevar a cabo labores de reparación de esta carretera, «pero solamente realizaron un parcheado durante ese verano por lo que, con la llegada del invierno, los agujeros ya habían vuelto así que de poco sirvió».
De este modo, el temor de los usuarios y vecinos de esta zona es que se produzca una accidente grave de tráfico o, lo que sería peor, de algún cicloturista que transita por esta conocida zona del Camp de Morvedre. «Ya me pasó en una ocasión que, yendo con el coche por esta carretera, vi a un cicloturista tirado en el suelo porque había caído por culpa de un agujero y tuve que socorrerlo y llevarlo al centro de salud para que le echaran un vistazo. Esto podría haber sido mucho más grave porque una persona puede meter la rueda de la bicicleta en un agujero y salir despedido», señalan.
Por todos estos motivos, reclaman al Ayuntamiento de Estivella, o a la administración competente, que actúe en este acceso hasta esta zona de la Sierra Calderona pues aseguran que «si el Garbí estuviera en otro lugar de España, seguro que estaría mucho mejor cuidado y potenciado de lo que está actualmente y es una pena porque es una zona a la que acude mucha gente», aseguran los vecinos.
