L’Aplec del 9 d’Octubre que celebra anualmente Esquerra Republicana del País Valencià (ERPV) desde hace una década en la comarca, ha tenido, este año, un apoyo de la política municipal llevada a cabo desde las cinco concejalías que consiguieron los republicanos en las pasadas elecciones municipales locales en la comarca.
Los parlamentos tuvieron lugar ante el monumento a Jaume I en Benifairó de les Valls, acompañados de música de tabal y dolçaina, como desde hace cinco años, tras una ofrenda a la ciudad de un ábrol, un olmo negro.
Al acto asistió el presidente de ERPV, Josep Barberà, quien expuso que «desde el confort de la trinchera pensamos que la estrategia se debe de cambiar, que es necesario centrar un marco de referencia valenciano en nosotros mismos, porque somos el sujeto político, nosotros los valencianos, y no jugar a “cambiar España” porque el exceso de prudencia, la falta de valentía, comienza a hacerlos traidores. ¡Ya vale, basta de ofrendar!».
Por su parte, Adela Alba, concejal de ERPV en Benifairó de les Valls, en representación de los cinco ediles «valencianistas, republicanos, de izquierdas e independentistas» de la comarca, aseguró que «aún hay muchas decisiones que se toman en Madrid o Bruselas, es la labor diaria de calle y de contacto con nuestros vecinos de donde nace la fuerza de hacer políticas nosotros, los concejales y concejalas».
Finalmente, el conjunto de la gente que se acercó hasta este evento, amigos y miembros de las juventudes de Esquerra, JERPV, celebraron una comida de hermanamiento para acabar yendo a la manifestación que se llevó a cabo por las calles de Valencia.