La Asociación Morvedre Acull trabaja desde hace dieciséis años con diferentes grupos humanos de desplazados que llegan al municipio de Sagunto, atendiéndoles en las necesidades más elementales: búsqueda de vivienda, trabajo, pago de alquileres, acompañamiento personas enfermas, etc...

Entre las actividades que desarrolla esta asociación sin ánimo de lucro (ONG) se encuentra: hacer talleres informativos a migrantes para el trabajo en el hogar y los cuidados a las personas, muchas de ellas mayores y enfermas.

Este sábado, 24 de abril, a las 18 horas, en el salón de actos de CCOO tendrá lugar la entrega de certificados a 38 migrantes, mujeres y hombres, que han asistido a los talleres sobre Primeros Auxilios, Informática y Taller Creativo. Talleres de distintas temáticas y charlas que Morvedre Acull desarrolla de forma continuada. Además de los talleres han organizado: Charlas formativas y salidas culturales para el conocimiento del medio, apoyo personalizado, etc.…, además se han realizado actividades dirigidas a cualificación del trabajo, integración sociocultural para la obtención del arraigo y la legalidad, conocimiento de los derechos y deberes en nuestra sociedad. En esa línea, a finales de noviembre, tuvo lugar el taller «Conoce tus derechos de trabajadora de hogar, migrante y cómo hacerlos cumplir», impartido por el sindicalista Alberto Guerrero.

Campaña de censo de Viviendas para alquilar

Informan desde la ONG, que el acceso a una vivienda, o una habitación es un problema difícil de solventar, aunque hay bastantes inmuebles vacíos, por ello, desde Morvedre Acull proponen que desde la Generalitat y el Ayuntamiento financien un programa para rehabilitar viviendas particulares que los propietarios no dispongan de medios económicos para repararlas y, a cambio, dichas viviendas se vuelvan a habitar con alquileres sociales a personas con pocos recursos económicos. Pero esta ONG, no sólo hace propuestas a las administraciones públicas, Morvedre Acull ha ayudado a alquilar seis viviendas habitables, en cinco de ellas viven una media de cuatro personas y en otra casa solo vive una familia de tres miembros.

Para seguir con esta tarea de conseguir que personas sin alojamiento puedan alquilar una casa con un precio razonable, hacen un llamamiento solidario a los propietarios de inmuebles vacíos para que los alquilen. Lo explican así: «Propietarios que tengan viviendas vacías susceptibles de ser ocupadas con alquileres razonables se pongan en contacto con Morvedre Acull en el teléfono, 629 962 407».

Desde esta entidad acogedora se comprometen a realizar un seguimiento del cuidado de las viviendas alquiladas, sin menoscabo de la supervisión de los propietarios.

Albergue de acogida

Nos recuerdan desde esta asociación que hace años que están reclamando un albergue. «Un albergue en el municipio que pueda acoger a mujeres, familias, trabajadores temporeros… Esto junto con el Observatorio de la Migración son objetivos que nos marcamos en la última asamblea».

Ley de Extranjería

Otros de los temas que preocupan a los miembros de Morvedre Acull, es que en algunos sectores de la sociedad presuponen que los migrantes quitan el puesto de trabajo a los españoles, se llevan las ayudas sociales etc... Desde la entidad acogedora, consideran que esas afirmaciones, «son sencillamente falsas». Y explican lo que a su juicio aportan las personas migrantes: «Población joven, sana, no consumen servicios sanitarios, contribuyen con sus impuestos a la financiación de las políticas públicas. Cuando llegan se ponen a trabajar, no gastamos nada en su educación, formación etc. Por otro lado, hacen los trabajos menos considerados en nuestra sociedad: agricultura, cuidan de nuestros hijos e hijas, de nuestras casas, de nuestros mayores, posibilitando que las mujeres de aquí puedan acceder a un empleo fuera de casa. También trabajan en la construcción y la hostelería».

Igualmente destacan los miembros de la ONG que la Ley de Extranjería se tiene que actualizar para eliminar tantos obstáculos a la regularización porque «Los trámites duran tres años para obtener permiso de residencia y sin esa regularización, no hay contrato laboral, arrojándolos a la economía sumergida. Si todas las personas que trabajan en los sectores citados tuvieran un contrato, la recaudación en Seguridad Social y el IRPF aumentaría considerablemente».

Políticas migratorias

Informan desde la directiva de la ONG que la Unión Europea acuerda directivas que afectan a todos los estados del territorio UE, «pero algunos gobiernos no las desarrollan». Prosiguen relatando que hay leyes para la migración «cuyo contenido está por debajo del umbral de los Derechos Humanos y los que están al mismo nivel no se aplican». En esa línea, reiteran que la Ley de Extranjería del año 2000 permite que los migrantes estén tres años sin regularizar su situación, lo que les impide tener permiso de residencia ni trabajo. Los miembros de Morvedre Acull recalcan la necesidad de un cambio de la ley «para que no haya tantos obstáculos».

Asimismo, opinan que los CIES son peor que una cárcel. «Meten allí a personas que no han cometido delito alguno, solo por no estar regularizados los envían al CIE hasta que los devuelvan a países de origen. No tiene razón de ser que impunemente los mantengan en eso lugares sin posibilidad de movimiento».

Asimismo, critican la situación que se está viviendo en Canarias con los migrantes, que están en los albergues «hacinados, si condiciones de ninguna clase, pero con políticas más racionales esto se podría evitar, para muchos de estos migrantes, su objetivo puede ser Francia o Alemania para encontrarse con algún familiar, pero no pueden desplazarse. Después de caer en la garra de la mafia, en el trayecto, los peligros de las pateras y en muchos casos, la muerte, se encuentran con los CIES. Morvedre Acull nos hemos unido a otras ONGs denunciando la situación».

Trayectoria de esta ONG y de su voluntariado

Hay que recordar que Morvedre Acull nació en 2005 como consecuencia de que en el municipio de Sagunto empezaron a llegar migrantes. Hecho que no es nuevo, pues los flujos migratorios que siempre se han dado y van en aumento. «Los países como España hemos sido migrantes, ahora somos receptores», afirman desde la directiva de la asociación. Para constatar lo señalado, ofrecen datos del censo de habitantes de Sagunto, en 2004, fueron 4.365 personas extranjeras, en 2008 ya eran 9.259 y en 2014, oficialmente se contabilizaron 10.836 personas provenientes de 92 países, los colectivos más numerosos eran rumanos, marroquíes, colombianos, argentinos, ecuatorianos chinos etc.

Una de las acciones promovidas por Morvedre Acull en el paseo marítimo de Puerto Sagunto (Imagen de archivo)

Para esta entidad local, esta situación necesita programas de acogida y diálogo, «una respuesta institucional y ciudadana para para facilitar un encaje intercultural en la que la diversidad y la diferencia no sea un problema». En Morvedre Acull quieren, con su aportación, sumarse a la acción de otros colectivos e instituciones.

Los objetivos de esta ONG son: acoger a migrantes y facilitar el diálogo intercultural. Denunciar las injusticias de que son objeto. También sensibilizar a la sociedad sobre las migraciones, transmitiendo una imagen real y veraz, alejada de los estereotipos y tópicos que dañan a la ciudadanía. Igualmente considerar al migrante persona que tiene derechos y obligaciones como cualquier otra persona.

Los ingresos económicos de la ONG provienen de las cuotas de los socios, donaciones esporádicas y proyectos financiados por la Generalitat Valenciana o el Ayuntamiento de Sagunto. Actualmente, con la Generalitat no tienen ningún proyecto. Y para rentabilizar recursos, comparten local con la AAVV La Victoria y Acción Ecologista Agró.

También trabajan en red con asociaciones de mujeres, con la EPA, con CCOOPV para los problemas laborales o de información de derechos, así como con otras asociaciones de migrantes, AA.VV. con el Área de la Dona municipal y con el Ayuntamiento. Su planteamiento es no dar ningún servicio que ya exista.

Etapas y Proyectos

Al inicio de su constitución, Morvedre Acull participó en el Plan de Migración del Ayuntamiento de Sagunto. Asimismo, formaron parte del proyecto Casa Nueva, con el que se trataba de dar cobijo a muchas personas que vivían a la intemperie, en el campamento Las Moreras, en casas abandonadas de la huerta, debajo de los puentes, o en los huertos de naranjos. «A los tres años los dejamos, pero seguimos colaborando con las personas enfermas de la casa Nueva», matizan desde la asociación

Entre 2005 y 2017, Morvedre Acull montó el taller de bicicletas, con el objetivo de dotar a las personas migrantes de un medio de desplazamiento, para la búsqueda de empleo y relación social. «Las bicicletas eran donadas se hizo un trabajo de recoger, reparar y reutilizar».

Entre 2008 y 2015, el colectivo desarrolló el proyecto de Acogida Integral. Con un proyecto de la Generalitat pusieron en funcionamiento dos pisos para chicos de la Casa Nueva, sobre ello relatan: «Vimos la necesidad de que los chicos salieran para un mayor grado de integración social. Dos pisos para mujeres solas, migrantes con carga familiar y violencia de género».

Durante 2015 a 2021 el objetivo de Morvedre Acull lo centraron en la denuncia al Gobierno español y al conjunto de los estados de la UE. Esta etapa está marcada por la situación de las personas refugiadas. «Tenemos claro que migrar, buscar asilo es un derecho humano, acoger con dignidad una obligación», afirman y en ese sentido subrayan: «La ausencia de la política de acogida a las personas refugiadas, que huyendo de la guerra caen en manos de las mafias, pierden la vida en naufragios, son encerrados en campos de refugiados, todo en condiciones infrahumanas». Pidieron que se cerraran los CIES, los campos de refugiados que son un fracaso, no hacer expulsiones en caliente, y realizar políticas de asilo, regularizaciones etc. Para denunciar lo anteriormente expuesto Morvedre Acull organizó concentraciones públicas mensuales denominadas, Círculos de Silencio, obras de teatro y conciertos solidarios, elaboración de un video “En la Piel”, que se visualizó en colegios e institutos.

En 2019 iniciaron un trabajo con hombres y mujeres empleadas de hogar y cuidadoras. La pandemia ha dificultado realizar todas las actividades programadas este año, en la actualidad son 45 personas las que asisten a los talleres.