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En el informe, elaborado por los técnicos de esta empresa, también se afirma que el Espigón de la Gola de Quartell tendrá consecuencias para las playas de Sagunto y Canet

El estudio de Imedes advierte que actualmente hay presencia de gravas en toda la línea de la costa saguntina

La presencia de piedra en la costa de Sagunto va en aumento La presencia de piedra en la costa de Sagunto va en aumento
Miércoles, 24 Marzo 2021 15:54

Hoy se ha dado a conocer el informe de valoración relativo al Proyecto de regeneración de las playas de Canet, Almarada, Corinto y Malvarrosa, que ha sido elaborado por Imedes, a instancias del Ayuntamiento de Sagunto. Se trataba, con este estudio, de comprobar cómo y de qué forma afectará el proyecto de la Dirección de Costas a las playas del municipio de Sagunto.
 
Una vez que los técnico autores del informe han estudiado el proyecto de Costas, se arrojan en el informe, de 99 páginas, las conclusiones más relevantes, tales como que: «el contenido y estructura del proyecto es claro y suficiente». Asimismo, se concluye que: «de todas las alternativas estudiadas se ha seleccionado la que a priori resulta menos agresiva para el medio ambiente y la línea litoral, desechando otras intervenciones planteadas en proyectos anteriores».
 
Tal y como se ha venido informando, la intervención planteada por Costas contempla el cribado y retirada de gravas acumuladas en las playas situadas en el tramo norte de la zona de proyecto, es decir, Malvarrosa, Corinto y norte de Almardà. Así como, la regeneración de las playas de Malvarrosa, Corinto y norte de Almardà, para contrarrestar la retirada de las gravas, aumentar el ancho de playa y disminuir la pendiente del perfil de playa, aumentando así la seguridad en el baño. Y, por último, restaurar el cordón dunar, mediante aporte de arena y revegetación en las zonas más deterioradas, y su cierre perimetral, respetando los accesos a la playa existentes.
 
Sobre estas líneas de intervención, Imedes considera en su informe que es positiva la eliminación de las gravas alóctonas decantadas al norte de las playas de Sagunto y que han modificado, con el paso de los años, todo el frente litoral. Sobre la restauración dunar resaltan que es una actuación ambientalmente muy significativa que debe entenderse, además, como una mejora en las obras de cribado y relleno.
 
En cuanto a los aportes de arena que procederán del banco submarino situado frente a la costa de Cullera, o de otro yacimiento marino habilitado que reúna las condiciones técnicas y ambientales del material de aportación, el informe indica que la no concreción de esas alternativas y los posibles retrasos en las tramitaciones administrativas para la extracción de estas arenas, tanto en el banco de Cullera como en cualquier otra ubicación, no puede significar la sustitución por aportes de material procedente de canteras que tienen «unos diámetros granulométricos más gruesos, formados por gravillas y no tanto de arenas».
 
Espigón de la Gola de Queralt
Recoge el informe, en sus conclusiones, una valoración sobre la construcción del espigón en la Gola de Queralt, contemplado en las actuaciones de la Dirección General de la Costa y el Mar para el frente marítimo de la provincia de Castellón que se van a ejecutar. A propósito de esta estructura señala: «Sin ser objeto del presente documento, resulta importante recordar la incidencia que tendrá en las playas de Malvarrosa, Corinto y Almardà. En este sentido, se debería establecer un plan de monitoreo en continuo sobre las playas de Sagunt y Canet den Berenguer, para vigilar la evolución de la línea de costa tras la ejecución de las actuaciones de regeneración de las playas de Canet, Almardà, Corinto y Malvarrosa, a fin de prever acciones correctivas con la suficiente antelación. Debe señalarse que la memoria de actuación indica que se diseña la forma en planta de la playa, considerando el efecto de los espigones de la Gola de Queralt, aunque tal extremo no queda lo bastante contrastado en el resto de la memoria, ni se cuantifica la afección del mismo. Circunstancia que se reitera cuando señala que "el volumen de material de préstamo, necesario para garantizar que la playa regenerada permanezca estable, considerando las tasas actuales de transporte y una vida útil de 25 años, es de 1.098.689 m3"».
 
También recuerda Imedes que el documento «no incluye ni medidas ni elementos de protección no agresivos que ayuden a la estabilidad de la playa y a minimizar futuros temporales que pongan en riesgo el éxito de la actuación prevista. Se deberían valorar elementos de protección de la morfología de la playa resultante a fin de consolidar en el espacio temporal más amplio de la actuación prevista».
 
Asimismo, pone especial énfasis en recomendar que se preste singular atención a los efectos que la actuación pueda tener en la parte sumergida de la playa, estableciendo un plan de vigilancia detallado para la protección de la costa, especialmente ante elementos de valor cada vez más dañados y escasos, como son las praderas de posidonia oceánica. 
 
Por otra parte, se concluye en este estudio realizado por Imedes que en la zona de Almardà y Corinto, el proyecto establece un límite artificial generado por el propio proyecto, donde la franja norte se incrementa más que la sur. En esta línea indica: «No se justifican mediante criterios técnicos por qué las actuaciones no se prolongan en toda la playa de Almardà y en la playa de Canet d'En Berenguer. La retirada de gravas parece insuficiente. Aunque, si bien es cierto que conforme nos dirigimos al sur las gravas dejan de aparecer en los volúmenes que aparecen en las zonas más al norte, también se puede comprobar que en la actualidad hay presencia de gravas en toda la línea de costa saguntina y se constatan en parte de la playa de Canet d'En Berenguer».
 
En base a lo anterior los técnicos autores del informe de Imedes proponen: «el cribado del material sedimentario de estas playas para eliminar las gravas existentes y extender las arenas resultantes del proceso en la playa de origen. Anotar en este sentido, que los eventos con mayor capacidad de alterar la morfología de las playas en breves periodos de tiempo son los temporales costeros. Sus impactos y posterior recuperación deberán ser contemplados de manera concreta en el estudio, a fin de asegurar, tal como se señala la vida útil de la actuación para 25 años en un contexto de cambio climático que pone en cuestión la durabilidad de las obras». Otro de los aspectos que se incluyen en las conclusiones de este estudio, es la conveniencia de incorporar a la Comisión Especial de Playas del Ayuntamiento de Sagunto, en la medida que sea posible, en la planificación y el seguimiento del proyecto para facilitar que se aporten ideas y propuestas que puedan ser estudiadas y recogidas por la Subdirección General de Costas. Todo ello como «desarrollo del enfoque de Gestión Integrada de Zonas Costeras (GIZC) promovido por la Comisión Europea y el Programa de Acción Mediterráneo de la ONU».
 
Cabe señalar, finalmente, que Imedes incluye en sus conclusiones una batería de propuestas para que sean «prospectadas dentro del propio proyecto de obras, o en su caso al margen del mismo, como herramienta de seguimiento y mejora de las playas en el futuro más inmediato».
 
En esta línea se plantea la Gestión Integral de Zonas Costeras; el conocimiento de la dinámica costera; la recuperación de praderas de posidonia oceánica; la adecuación de golas, espigones y escolleras; el uso público de paseos y sendas blandas en entorno dunar; medidas de control y seguimiento, un plan de playas inteligente; un plan de monitorización, así como la gestión de financiación y prospección de fondos de la UE.
 

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Modificado por última vez en Miércoles, 24 Marzo 2021 20:09

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