En el pasado pleno los populares presentaron una propuesta en la que se pedía garantizar a los padres su derecho a la elección de la lengua en la educación de sus hijos, como primeros responsables de su educación. «En este pleno, el tripartito ha vuelto a votar en contra de la libertad de los padres para elegir la lengua en la que quieren que estudien sus hijos, al igual que ocurriera hace unos meses cuando el equipo de gobierno se negó a que los padres pudieran elegir el tipo de educación y centro educativo donde escolarizar a sus hijos y con ello defender la red de centros concertados como garantía de existencia de una oferta plural». asegura el portavoz del PP, Sergio Muniesa.
Los populares afirman que «este es un ataque más a la libertad educativa porque sin libertad de elección de centro o de lengua en la que estudiar, no existe esa libertad. El tripartito debe explicar a los padres por qué se oponen a que se garantice su derecho a elegir libremente la educación que quieren para sus hijos y no la que se les quiere imponer. Una vez más Compromís, PSOE y EU se posicionan a favor de la imposición y en contra de la libertad de elección que asiste al alumnado y a sus familias. Lo hicieron cuando rechazaron que cualquier padre o madre pueda llevar libremente a sus hijos a colegios como San Pedro, María Inmaculada, Adventistas o San Vicente, acusándoles de ser unos “unos privilegiados” por ello, cuando la realidad es que cientos de niños de nuestra ciudad han tenido la oportunidad de estudiar en colegios que de otra forma no habrían tenido acceso si no fuera por la existencia de los conciertos».
Como explica Muniesa: «Lo han vuelto a hacer con sus votos al avalar que sea la administración la que sustituya la decisión de las familias con el único objetivo de imponer un modelo único que lejos de contemplar la diversidad cultural y riqueza del idioma, lo único que persigue es la consecución de hacer primar la lengua valenciana sobre el resto, dando la falsa apariencia de protección global que nada tiene que ver con la realidad. El problema es que el tripartito avala la hoja de ruta impuesta por el Botànic que tiene como objetivo imponer un modelo educativo único, sectario que adoctrina y que no apuesta por la libertad educativa, y que vemos sus consecuencias en otras comunidades de las que toman este ejemplo. En este ataque frontal que están llevando a cabo han eliminado el distrito único, han abierto la puerta a la eliminación de las unidades concertadas, sin tener en cuenta la demanda social y sustituyen la voluntad de las familias con el único objetivo de imponer un modelo único en valenciano olvidándose de defender la pluralidad de esta tierra y el derecho de las familias a elegir la educación que quieren para sus hijos».
«No se trata - continúa Muniesa - de hacer prevalecer una sobre otra, ni de imponer, ni de confrontar sino de garantizar la libertad de elección garantizando el aprendizaje de las dos lenguas de nuestra Comunitat. Somos bilingües, es una seña de nuestra identidad que tenemos que defender. Desde el Partido Popular queremos la educación que quieren los padres, no la que quieren imponer porque lo que se está produciendo es que el Consell lejos de proteger y garantizar este derecho a las familias, como principales responsables de la educación de sus hijos, pretenden sustituirlas y condicionarlas».
El portavoz del PP concluye afirmando: «El tripartito demuestra una vez más que no creen en esa libertad y han dejado de defender el equilibrio entre el derecho a la educación y la libertad de enseñanza. La libertad es un derecho no un privilegio, y aquí lo que se está haciendo es eliminar la demanda de las familias a la hora de la programación educativa, ignorando lo que piensan los padres en el momento de elegir el centro educativo para sus hijos o la lengua. A Darío Moreno y a su tripartito no les importan las familias y lo que implica la libertad educativa a la hora de tener una oferta educativa amplia, y que los padres reclaman, simplemente porque no es su modelo».
