El Alcalde de Sagunto, Francesc Fernández, y el concejal de Patrimonio, Pablo Abelleira, han mantenido hoy, en el Ayuntamiento de Sagunto, la primera reunión de la Fundación del Patrimonio Industrial como presidente y vicepresidente, sucesivamente, con miembros de la Generalitat Valenciana y del Centre d’Estudis del Camp de Morvedre, así como con el concejal de Cultura del Ayuntamiento de Sagunto, José Manuel Tarazona, miembros también del patronato.
«Después de casi dos años de trabajo y de negociación con las Consellerias de Cultura e Industria, hemos conseguido resolver una situación kafkiana que afectaba a una fundación que tenía carácter privado y que a día de hoy continuaba funcionando virtualmente con una serie de deudas que no podía subsanar», ha afirmado el propio Fernández. «Hemos optado por transformar una Fundación que estaba presidida por la Generalitat y que hasta ahora permanecía paralizada ya que sus dos socios principales, la Autoridad Portuaria y Arcelor Mittal, habían dejado de participar económicamente», ha continuado el alcalde, quien ha afirmado que con la nueva gestión se pretende poner en valor «el importantísimo patrimonio industrial de Sagunto».
Aunque el alcalde ha manifestado que queda mucho trabajo por hacer, «ya tenemos nuevos estatutos reconocidos por la protectora de las fundaciones y al ser mayoría somos los que decidimos» y ha recordado que se mantiene la ayuda económica de la Generalitat. Por este motivo ha manifestado que la principal tarea a llevar a cabo es la de resolver las deudas pendientes que se han generado durante estos años de paralización, especialmente las que se derivan de los trabajadores que asumían sus funciones pese a que la Fundación no estaba funcionando. «También vamos a poner en valor nuestro patrimonio», ha continuado diciendo el alcalde, ya que las inversiones importantes ya están realizadas por lo que quedaría la gestión del patrimonio y su musealización. «En este sentido el esfuerzo que se ha hecho para la tramitación y esta transformación en el ámbito burocrático ahora va a ir acompañado de un esfuerzo económico para resolver las deudas y para poder pedir ayudas», ha comentado Fernández.
El alcalde ha agradecido el trabajo realizado por parte de Pablo Abelleira y de la delegación que desempeña, la de Patrimonio, y sobre todo la colaboración de la Generalitat y del Centre d’Estudis del Camp de Morvedre, quienes también forman parte de la Fundación. «Hoy es un día histórico», ha manifestado el alcalde, quien ha dicho que pese a parecer un trabajo lento, «conseguir desbloquear la Fundación ha sido un trabajo seguro que se va a materializar en la gestión del patrimonio industrial de Sagunto por parte de un patronato municipal con la ayuda de otras administraciones».
Por su parte, el concejal de Patrimonio, Pablo Abelleira, ha tildado este hecho de «logro importantísimo porque que el Ayuntamiento de Sagunto sea el patrón principal de la Fundación supone un avance muy grande en la gestión adecuada de los bienes patrimoniales de la Fundación». Para Abelleira la celebración de esta primera reunión en Sagunto supone el fin de más de año y medio de trabajo «que al fin ve la luz al final del túnel». Además ha señalado que la Fundación «era el ejemplo más claro de las políticas destructivas de los anteriores gobiernos y del poco interés que tenían en recuperar estos bienes», ha calificado el delegado. «La reclamación que hacía toda la ciudadanía que no entendía por qué estos inmuebles que están en nuestra localidad no les pertenecían de pleno derecho, está solucionada con la gestión que se va a hacer a partir de ahora por parte de la Fundación», ha finalizado diciendo Abelleira.
Una deuda pendiente que bloquea las subvenciones del Ayuntamiento y la Generalitat
La Fundación gestiona una deuda repartida en 60.000 euros que se les debe a la Seguridad Social y 10.000 euros a Hacienda y que debe ser pagada de inmediato; y dos deudas privadas, una de 18.000 euros que se le debe a los arquitectos que realizaron los últimos proyectos de ejecución en el Horno Alto y una de 1.200 euros a la empresa que pintó todo el monumento. Esta última deuda trae consigo una garantía de que la propia empresa pintará de nuevo el Horno Alto ya que no se produjo en las circunstancias que tenía que haberse producido, según afirma el concejal de Patrimonio.
Además de esta deuda, también se va a atender las reclamaciones de los trabajadores, los cuales no han cobrado desde febrero de 2015. «Ellos han hecho ya una demanda judicial contra los patronos de la Fundación y a partir de ahora el trabajo que nos queda es la contratación de un abogado que responda de la Fundación, ya que no tienen que responder las administraciones ni ningún tipo de patrón y es la Fundación la que va a responder a estas reclamaciones», afirma el concejal.
Abelleira afirma que ya se ha hablado con los trabajadores y se les ha trasmitido que por parte del Ayuntamiento reconoce que «cualquier esfuerzo debe ser recompensado y que los vamos a ayudar en todo lo posible». Los trabajadores han contestado que entienden que la fundación no está en estos momentos capacitada para hacer frente a esas deudas y que «lleguemos a un acuerdo amistoso con ellos», afirma Abelleira.
Esta deuda es, según el alcalde, lo que ha generado el bloqueo para que las administraciones, por ley, pudieran ingresar las subvenciones, que suponen 60.000 euros al año por parte de la Generalitat y 18.000 euros por parte del Ayuntamiento de Sagunto. «En el momento que la Agencia Tributaria y la Seguridad Social entienda o acepte y certifique que se puede aplazar el pago de esas cuotas, el Ayuntamiento de Sagunto y la Generalitat podrán ingresar las subvenciones y hacer frente a las deudas de manera plurianual», ha aclarado Fernández.
