El Ayuntamiento de Sagunto ha celebrado durante la mañana de hoy una sesión plenaria extraordinaria donde, entre otros puntos del orden del día, se ha tratado la modificación de la ordenanza fiscal reguladora del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI), lo que coloquialmente muchos vecinos de la localidad conocen como la contribución. La propuesta presentado por el cuatripartito saguntino, que entrará en vigor el 1 de enero de 2018, ha salido adelante con los votos favorables de los concejales del equipo de gobierno junto al del concejal no adscrito, José Vicente Muñoz, así como el voto contrario de todos los ediles de la oposición, exceptuando del representante de Iniciativa Porteña (IP), Sergio Paz, que no ha acudido a la sesión plenaria.
Cabe recordar que durante los últimos años, tras la aplicación del conocido catastrazo que, como ha informado la concejala de Esquerra Unida (EUPV), Roser Maestro, «supuso un incremento del 250% de los valores catastrales del municipio», el plenario saguntino ha intentado paliar este incremento del valor catastral de las viviendas reduciendo el tipo impositivo, un valor que depende de las administraciones locales. Así pues, este año también se llevará a cabo un descenso del tipo impositivo del IBI urbana que pasa del 0,50 a 0,462% lo que supondrá un pequeño incremento medio de menos de un euro en los recibos de los vecinos de la localidad.
Los que notarán una subida algo más importante en sus recibos de este impuesto serán los inmuebles de uso industrial o comercial cuyo valor catastral exceda el millón de euros, que aunque se ha reducido el tipo impositivo del 0,60 al 0,565%, sufrirán un aumento en sus recibos de alrededor del 1,82%, según ha señalado el edil de Hacienda, Pepe Gil. Este incremento supondrá para las arcas municipales el poder ingresar algo más de 25.000 euros en este concepto.
«En cuento al IBI urbana, en los últimos años se ha vivido un descenso del 11,2% por lo que el recibo de una vivienda media, ha pasado de los 260 a los 232 euros. En cuanto a las grandes empresas, que hay que recordar que son solamente 75 en todo el municipio, su IBI ha ido bajando en los últimos años pero creemos que no va a suponer un gasto excesivo en las mismas puesto que, como se demuestra en los informes macroeconómicos, y como dicen las propias empresas, en este momento están volviendo a ganar dinero», ha señalado Gil.
El delegado de Hacienda, asimismo, ha apuntado que el tipo de gravamen aplicado a la vivienda rústica se congela, manteniéndose en el 0,72%, igual que el tipo para bienes inmuebles de características especiales, que ya se encuentra en el máximo que es el 1,3%. Con esta nueva ordenanza fiscal, el consistorio saguntino ingresará alrededor de 15,2 millones de euros el próximo ejercicio 2018.
Debate plenario
La argumentación empleada por el responsable municipal de Hacienda ha sido la misma que la usada por la concejala de EUPV, Roser Maestro que ha señalado que la propuesta del equipo de gobierno sigue la máxima de «que pague más quien más tiene». La edila, además, ha mostrado mediante gráficos la evolución del IBI urbano desde la imposición del catastrazo señalando que fue durante la época de gobierno del PP cuando más impuesto se pagó puesto que, desde el año 2012 hasta el año electoral se aumentó en un 6,76% mientras que «desde la llegada de este equipo de gobierno se ha reducido un 5,49%, siendo la mayor bajada de este recibo en 2016 con una reducción media del recibo de un 4,74%», explican desde esta formación política.
Durante el debate de este punto del orden del día, el concejal de IP, Juan Guillén, ha vuelto a denunciar «que los vecinos de El Puerto pagamos más IBI que los de Sagunto, concretamente un 20% más, algo que no nos inventamos sino que es una realidad que se puede comprobar en la ponencia de valores». El concejal segregacionista ha vuelto a solicitar que esto se tenga en cuenta para el futuro pero el delegado de Hacienda, Pepe Gil, ha señalado que no se pueden aprobar dos tipos impositivos de este impuesto para un mismo tipo de inmueble mientras informaba de que el consistorio reclamó este año la revisión catastral, que ha sido denegada este mismo mes de octubre, y que se volverá a solicitar a partir del 1 de enero.
Desde los grupos municipales de PP y Ciudadanos han presentado una enmienda sobre este asunto que no ha sido aprobada y ni siquiera hubiera sido aceptada por el interventor pues, como ha afirmado durante la sesión plenaria, «la propuesta no contiene valoración económica por lo cual no se puede aceptar».
El portavoz de Ciudadanos, Raúl Castillo, ha apuntado: «Propusimos al equipo de gobierno que, existiendo margen como el que hay, no existiera ningún tipo de incremento en el recibo. En primer lugar porque con más de 15 millones de euros recaudados no es necesario forzar la máquina ni un céntimo más y, en segundo lugar, porque ni siquiera afectaría a los ingresos que se han venido produciendo en las arcas municipales por este asunto. Por eso presentamos la enmienda que conseguía rebajar la presión fiscal de las familias, comercios e industria pero el resultado final ha sido marciano al exigirnos un informe económico que siempre han sido elaborados por el personal cualificado del departamento correspondiente».
En este mismo sentido, su homólogo del PP, Sergio Muniesa, ha señalado que «ahora no es el momento de subir los impuestos, creemos que es mejor situar el recibo más o menos por el mismo importe de lo que se ha ido pagando durante este último año». El concejal popular, además, ha criticado duramente el incremento del IBI para las grandes empresas de la localidad afirmando que «aunque tengan mayores beneficios, ya hay impuestos que gravan sobre esto» por lo que tachaba esta propuesta del equipo de gobierno de tener «afán recaudatorio para poder hacer frente a una política de mayor gasto como la que está haciendo el cuatripartito de progreso».
