Botellas de cristal, envases, restos de almuerzos, ropa, calzado e incluso partes de herramientas son algunas de las cosas que dejan

Vecinos de la montaña saguntina demandan a los trabajadores que recojan su basura tras coger la naranja

 
Martes, 10 Enero 2017 11:08

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Menos naranjas en los árboles pero muchísima más basura en el campo. Esta es la imagen que puede verse estos días, tras intensos días de trabajo en los que los jornaleros se ganan la vida recogiendo cajones de naranjas. 

Tras su trabajo, en muchísimas de las parcelas de la capital del Camp de Morvedre el paisaje es desolador. Latas, botellas, rotas, cristal, ropa vieja, cajas de cartón rotas, e incluso cuchillos, tijeras y herramientas en mal estado, son sólo algunos elementos de la ornamentación que en los campos se dejan y pueden verse al pasear por las carreteras y/o sendas colindantes.
 
Cristales y herramientas

Vecinos de la montaña saguntina piden un mayor cuidado e higiene de la misma por parte de los trabajadores para evitar así, comentan «la mala imagen que presenta tras dichas jornadas de trabajo la montaña».
«Los domingos es bastante desolador. A la ya abundante cantidad de basura que presenta la montaña en general, ahora hay que añadirle toda la basura que dejan en los campos privados, pero a la vista de todos, y en sus alrededores, las  personas que trabajan cogiendo naranja. El fin de semana pasado fui con mi marido e hijo a dar un paseo por la naturaleza y desde las sendas y la carretera que lleva a mi casa podían verse las botellas, guantes rotos, ropa usada, restos de almuerzos, papel de plata e incluso las botellas, de plástico y vidrio, que se dejan allí tras las jornadas laborales. Entiendo que no tengan basura, pero no cuesta tanto llevar una bolsa donde depositar todo lo que se vaya a tirar y después tirarla al contenedor que hay en casi todos los caminos», relata una vecina que vive todo el año en el Camino Font de Ribera, en el Camino Viejo de Teruel.
 
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«Si todos pusiéramos un poco de nuestra parte, sigue expresando Nacho García, también vecino de otro camino de esta zona, la montaña luciría mucho mejor y no estaría en tan mal estado. La verdad es que  da pena. Esta zona parece de todo menos naturaleza y frescura. Hay muebles tirados en la montaña, sacos de maleza, saneamientos, colchones y un sinfín de objetos que la gente irresponsable tira por aquí en vez de llevar al Ecoparque. Nisiquiera se dignan a depositarlo en los contenedores que hay a lo largo de todos los caminos. A eso además ahora se suma toda la suciedad que cada día dejan los trabajadores cuando van a coger naranja. No hay conciencia. Si todo el mundo hiciera lo mismo  esto sería un caos. Pedimos más responsabilidad personal y no estaría de más que alguna campaña de sensibilización por parte del ayuntamiento. Más vigilancia y mayores multas para quien convierten la montaña en un estercolero, no estaría de más. Es por el bien de todos», se queja Manolita Ferrer, también residente de la montaña saguntina por la zona de El Pla del Bou.
 
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Los vecinos de la zona llevan mucho tiempo exigiendo al consistorio mayor vigilancia para poder mantener la montaña en mejores condiciones higiénicas y también para evitar los continuos robos que se producen en las casas, sobre todo en invierno, cuando en las mismas no reside nadie. No obstante, son muchos los vecinos que viven en la montaña todo el año y quienes afirman sentirse abandonados y vivir con miedo. Iluminación en el camino viejo de Teruel, en los accesos a sus casas, mayor recogida de basura en los contenedores, y más vigilancia para sentirse seguros en el interior de sus casas son algunas de sus reivindicaciones al consistorio. Mayor responsabilidad y sentido común es lo que exigen a la ciudadanía en general.

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Modificado por última vez en Viernes, 13 Enero 2017 15:34

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