Este gesto simbólico de entregar los 500 euros a la Fundación del Patrimonio Industrial en palabras del alcalde, se trata de «una muestra de la buena voluntad» del Equipo de Gobierno para resolver esta situación que, como reconocía el propio gerente de la fundación, viene dada de una circunstancia heredada, ya que, como resalta Fernández, «son el resto de miembros de la Fundación, incluyendo la Generalitat gobernada por el PP, quienes no hicieron las aportaciones establecidas. Pero el Ayuntamiento de Sagunto, que solo es un miembro más, siempre ha cumplido sus obligaciones y, por tanto, nosotros, como Equipo de Gobierno, no hemos generado esta situación».
Con la donación también se pretende demostrar que «el problema no son los 400 euros del seguro», algo que afirma tanto el Equipo de Gobierno como el gerente de la Fundación. Cabe recordar que los dos trabajadores de la Fundación no cobran su salario desde abril de 2014 y que la Fundación acumula una deuda de alrededor de 100.000 euros.
El alcalde también asegura que «hemos acordado con la Conselleria que convoque una junta de patronos de la Fundación antes de final de año para aclarar su situación, hacer frente a los pagos pendientes a los trabajadores y a resolver definitivamente el problema». En esta línea, ha añadido que «o bien la Fundación continúa si hay miembros suficientes que se comprometan a cumplir con sus obligaciones, o bien se disuelve y de su patrimonio se hace cargo la Generalitat o el Ayuntamiento de Sagunto».
Fernández se ha mostrado dispuesto a que el Ayuntamiento sea el que asuma y gestione el patrimonio de la fundación en caso de que esta acabe por disolverse y ratifica su «voluntad porque nuestro patrimonio industrial funcione como un elemento principal del patrimonio de nuestra ciudad».