Tal y como ha avanzado este periódico esta mañana, los trabajadores de Galmed han aprobado en asamblea retomar la actividad en su fábrica a partir de este mismo miércoles. La media ha sido justificada por los trabajadores como una muestra de voluntad al «no haber planteado oficialmente Thyssen el ERE de extinción», pero advirtiendo que esto no es una rendición, sino una tregua, y que al menor símbolo de agresión por parte ThyssenKrupp a los intereses de los trabajadores, como puede ser el traslado de productos a otras plantas del grupo, los trabajadores porteños volverán a tomar medidas «proporcionales a la agresión recibida».
El anuncio más importante, sin embargo, ha sido el realizado para el próximo 3 de julio, cuando aprovechando una reunión de directivos de ThyssenKrupp en Madrid los trabajadores de Galmed vuelvan a realizar una acción protesta que recuerde a todos los directivos, y a los medios de comunicación, que han tomado una injusta decisión para con la planta de Puerto de Sagunto.
Mientras se prepara esta manifestación, y se retoma la actividad en la fábrica, los miembros del comité de empresa seguirán desarrollando su estrategia de llevar el conflicto de Galmed a las más altas esferas del sistema político español, con la intención de que el gobierno se implique, de una vez por todas en la defensa del futuro económico del Camp de Morvedre. Por este motivo, mañana miércoles los miembros del Comité de Empresa volverán a desplazarse hasta Madrid para entrevistarse con los portavoces de todos los grupos políticos del parlamento español.
Además el comité de empresa pide públicamente que se busquen «los mecanismos necesarios» para instar a las empresas del sector que estuvieran interesada en comprar Galmed a comunicar sus intenciones a ThyssenKrupp. Una medida con la que esperan desmontar la versión oficial de la multinacional alemana de que nadie ha mostrado interés firme por Galmed, y a que, en opinión de los trabajadores españoles, en realidad lo que hay es temor de los alemanes a que un grupo acerero rival aproveche los altos niveles de calidad de Galmed para hacerse con los pedidos de los clientes del atractivo mercado automovilístico español, que ThsysenKrupp pretende llevarse a alemania.
