Esta propuesta la realizan los nacionalistas porque según explican, el pasado 28 de noviembre, tres personas, miembros de una misma familia, se encontraban en la parcela, propiedad de una de ellas, jubilado, realizando labores de limpieza del campo. «En el lugar se personó un inspector de Trabajo acompañado de agentes de la Guardia Civil, que les requerió información sobre su relación con la propiedad y las labores que estaban realizando».
Según las mismas fuentes, los dos jubilados fueran sancionados con el pago de 700 euros y a además «asegurar durante un mes como autónomo al tercero». Esta actuación, según los regidores del Bloc Compromís ha generado «un gran malestar y temor», entre los agricultores valencianos, propietarios en su mayoría de parcelas familiares que a excepción de pocos casos, se trata de minifundios.
«El abandono por parte del Consejo, de políticas de protección y potenciación eficientes del sector agrario valenciano, ha desembocado en una situación en la que el mantenimiento de la mayoría de los campos valencianos depende exclusivamente de personas que, todo y no obtener más ganancias que los justos por cubrir los costes de mantenimiento y producción, deciden mantener sus cultivos en el mejor estado posible» señalan desde el Bloc.
Y afirman desde esta formación política que el sector agrario valenciano continúa manteniendo un gran potencial por lo que respecta a generar puestos de trabajo y riqueza. Añaden que «el hecho de que se persiga laboralmente a los labradores, sumado al hecho de que los inspectores de Trabajo vayan acompañados de agentes de la Guardia civil, comportan unos efectos disuasorios y de acobardamiento que suponen una clara e inexplicable discriminación con respecto a otro tipo de colectivos, cuando además, los labradores y ganaderos perciben unas de las pensiones más bajas de jubilación».
A juicio de los miembros de Bloc Compromís, un Gobierno responsable debería aportar razón y lógica en la aplicación de medidas de este tipo, y valorar correctamente la importancia que las prácticas de mantenimiento de nuestros campos por parte de los jubilados, tienen a la hora de mantener el sector agrario como una oportunidad más a la hora de generar ocupación y colaborar en la recuperación económica de nuestro territorio. «Lo contrario es fomentar el abandono de los cultivos y acabar de derrumbar este sector. Más aún cuando desde el Gobierno solo se ordenan medidas recaudatorias para saldar el deuda con los bancos, ningún lugar de destinar recursos por dinamizar y potenciar la actividad económica y emprendedora de la ciudadanía» concluyen.