Este lunes, 13 de marzo, en la sede de Compromís per Sagunt tuvo lugar una audiencia en la que el partido nacionalista presentó al vecindario de Ciutat Vella su propia propuesta de control de acceso con vehículos particulares a esta importante zona de la ciudad. Un acto que contó con un gran número de asistentes, vecinas y vecinos, que escucharon y debatieron con los miembros del partido y con los concejales del grupo municipal de Compromís per Sagunt cada uno de los puntos que contemplaba la propuesta realizada por el partido.
«Más de 40 personas participaron en nuestra audiencia y pudimos debatir y hablar sobre una medida que afecta a nuestra vida cotidiana y familiar como vecinos de la zona», argumenta Lluis Alcaide, secretario local de Compromís per Sagunt. La propuesta realizada por los nacionalistas tenía como premisa el mantenimiento de la vida en el barrio y facilitar la llegada de nuevos vecinos para solucionar el problema de las numerosas casas deshabitadas y viejas que afectan a esta histórica zona de la ciudad. En este sentido Alcaide comenta: «Nuestra propuesta partía desde las quejas y la evaluación del funcionamiento de la medida que han puesto en marcha los departamentos de movilidad y policía local y que no han atendido a muchas de las propuestas del propio vecindario para tratar mejorar el funcionamiento del sistema».
La audiencia celebrada ha sido evaluada de forma muy positiva por el partido nacionalista pues permitió «consensuar una serie de medidas que podremos llevar al equipo de gobierno y que si, de nuevo, son rechazadas por la intransigencia de los responsables de movilidad y policía local podremos incorporar a nuestro programa electoral». Unas medidas que van desde la mejora de la señalización a la entrada de la ciudad de forma visible y que permitan dirigir a los visitantes a los aparcamientos del Norte del Palancia y la posibilidad de acceder desde allí a Ciutat Vella en transporte público para las personas con problemas de movilidad, permitir el acceso por la calle mayor a todos los residentes de Ciutat Vella incluidos en el plan especial o trasladar el control de acceso desde la calle del Castillo al ayuntamiento para evitar el acceso de más vehículos a la plaza mayor, entre otras medidas que facilitan poder solucionar toda una serie de contingencias no contempladas en el sistema actualmente vigente.
«Hay que tener en cuenta, también, las especiales características del barrio: es un lugar donde vive mucha gente mayor o donde hay problemas de conexión a Internet, por tanto, pensamos que es necesario facilitar un número de teléfono para poder atender a la ciudadanía y que la gente pueda realizar sus gestiones sobre la zona de acceso restringido», concluye Alcaide para quien lo más importante de todo es «hacer que la vida en el barrio sea una vida como en cualquier otro barrio normal».
