La Policía Local de Sagunto ha impartido una charla sobre consejos de seguridad para personas mayores en el Centro Cultural Mario Monreal, una actividad incluida en la semana cultural de la Unión Democrática de Pensionistas y Jubilados (UDP). La propuesta, que surgió de la UDP, fue acogida con agrado por parte de la Policía Local.

Ante el requerimiento de las persones mayores, la concejala de Policía Local, Natalia Antonino, y el jefe del Cuerpo, Rafael de Manuel, encomendaron la tarea a la Unidad de Agente Tutor y la Unidad de Seguridad Ciudadana. Estas especialidades, pertenecientes al departamento y con diferentes funciones, desarrollaron de forma conjunta un programa formativo actual y acorde a los destinatarios (personas mayores).

La concejala de Policía Local, Natalia Antonino, ha indicado que «es importante que se den consejos y pautas de actuación a nuestros mayores, se pongan en conocimiento las formas de engaño para que esas pautas sean de utilidad». A lo que ha añadido que «desde el departamento queremos agradecer a la UDP por pedirnos colaboración y colaborar con un segmento de población tan vulnerable a estos hechos».

Por su parte, la Unidad de Agente Tutor, con una dilatada experiencia, entre otros asuntos, en impartir charlas destinadas a escolares de diferentes edades sobre materias tan dispares como el acoso escolar, la violencia de género, las nuevas tecnologías de la información y comunicación, etc., aportó su saber hacer en esta materia desarrollando una presentación muy visual y dinámica, contando para ello con la inestimable experiencia en materia de seguridad por parte de la Unidad de Seguridad Ciudadana.

La charla fue impartida por el agente Carlos D.F., integrante de la Unidad de Agente Tutor y de la Unidad de Mediación Policial (UMEPOL), con la colaboración del Inspector Francisco R.A., responsable de la Unidad de Seguridad Ciudadana (USC). La charla tuvo una duración de aproximadamente una hora y media durante la cual se explicaron diferentes formas de engaño a las que en ocasiones se enfrentan las personas mayores. Engaños cometidos por delincuentes habituales y cuyo objetivo no es otro que, aprovechando la buena fe de sus víctimas, sustraerles objetos de valor o dinero en metálico.

Existe multitud de formas de engaño, tales como hacerse pasar por técnicos de alguna empresa de suministros (gas, agua, electricidad...) y, simulando una avería o una revisión periódica que en realidad no ha contratado, tratar de acceder al domicilio de su víctima y, mientras esta busca por ejemplo la documentación requerida sobre el servicio, le sustraen todo aquello de valor que localizan en otras estancias de la vivienda.

La temática del engaño es muy dispar. Por ejemplo, hacerse pasar por el familiar de un vecino para, de esta forma, acceder al domicilio y una vez dentro cometer su fechoría. O los falsos peticionarios de asociaciones inexistentes, o quienes requieren donativos para revistas oficiales con las que en realidad nada tienen que ver, o el que le avisa de una mancha en su indumentaria y se ofrece encarecidamente a limpiársela, o aquellas desconocidas que tratan de abrazarle sin más, el que le ofrece artículos valiosos a precios irrisorios, alguien que se ofrece a cargar su pesada compra hasta casa, etc.

En definitiva, se les indicó que desconfiaran de cualquier persona que no conozcan y trate de acceder a su domicilio o acercarse a con algún pretexto, hasta que confirme que el servicio ofrecido es veraz y carece de mala intención.

Asimismo, los policías aportaron a los asistentes a la charla una serie de pautas y consejos para minimizar la probabilidad de convertirse en víctima de un delito de robo. Consejos tan obvios pero a veces tan olvidados como evitar reintegros de cantidades elevadas en cajeros, portar el bolso o cartera en la parte delantera de nuestro cuerpo, sobre todo en lugares con masificación de personas como un mercadillo, llevar el bolso en el lado opuesto a la zona de paso de vehículos cuando caminamos por las aceras, evitar zonas con poca iluminación y/o poca afluencia de viandantes en horarios nocturnos, etc.

Tras las pautas y consejos, los agentes explicaron que si en algún momento somos víctimas de alguno de estos hechos, no ha de caerse en la vergüenza, pues quien ha realizado una fechoría es el delincuente, no la víctima, y por tanto se recomienda siempre denunciar los hechos ante la Policía, para dar conocimiento y que se trate de identificar y detener al delincuente. Además, así evitamos que haya más víctimas como nosotros.

Los agentes también recomendaron a los asistentes que, aun no habiendo sido víctimas de uno de estos delitos, ante cualquier actitud sospechosa, se telefonee inmediatamente a cualquiera de los teléfonos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad (Policía Local, Policía Nacional o Guardia Civil) o al teléfono 112 genérico de emergencias.

Finalmente se abrió un turno de preguntas durante el cual se intercambiaron impresiones, anécdotas y sucesos ocurridos a algunos de los asistentes.

La charla se desarrolló en un ambiente distendido y cercano. Desde el departamento indican que este tipo de eventos incrementan la confianza de nuestros mayores con su Policía, acercamiento que sin duda enriquece la labor de nuestra Policía Local.