La Asociación vecinal La Victoria ha promovido una concentración ciudadana, programada para las 10 de la mañana de este viernes en el número 27 de la Avenidas 9 de Octubre de Puerto de Sagunto, frente a las oficinas de CaixaBank. La acción reivindicativa se lleva a cabo para protestar por el progresivo cierre de oficinas que se está produciendo a nivel general como consecuencia de la concentración bancaria que se ha venido dando en los últimos años por el proceso de fusiones.
Este cierre de oficinas bancarias también está afectando al municipio de Sagunto, por ejemplo, en el populoso barrio de Baladre ya carecen de este servicio, comentaba el dirigente vecinal, Insidro Andujar, quien relataba que los residentes de esta parte del municipio tienen que desplazarse fuera del barrio para poder sacar dinero. El problema que origina el cierre de oficinas repercute, sobre todo, en los usuarios de mayor edad, que se ven perjudicados por la denominada brecha digital, que afecta a uno de cada tres ciudadanos.
Un sistema en extinción
Téngase en cuenta que, según los últimos datos del Banco de España, a lo largo del último lustro el sistema bancario español, como consecuencia del proceso de fusiones, ha echado el cierre en un tercio de las sucursales bancarias, en concreto un 33,4%, es decir, una de cada tres. A mayor abundamiento se puede indicar que, según las mismas fuentes, entre 2016 y 2021 los bancos cerraron 9.700 sucursales, reduciendo su red hasta un total de 19.338 oficinas, siendo el área mediterránea una de las más afectadas.
El argumento troncal que utiliza la banca para justificar el cierre de oficinas se sustenta en el proceso de transición para pasar de la tradicional atención presencial en las oficinas a la atención online a través de los canales digitales. Pero, en este tránsito, los principales afectados son los colectivos de personas mayores y vulnerables. En este sentido, cabría recordar la reciente campaña de recogida de firmas «Soy mayor, pero no idiota», a través de la plataforma change.org, que lanzó el valenciano Carlos San Juan de Laorden para exigir atención personal en las sucursales bancarias. Campaña que contó con el respaldo de 600.000 ciudadanos.