El Pleno municipal del Ayuntamiento de Sagunto ha aprobado por unanimidad, una moción presentada por el PSOE en la que se ha acordado instar, principalmente, a la Autoridad Portuaria de Valencia (APV) a redactar y poner en marcha un plan estratégico para reducir la contaminación acústica en las zonas habitacionales más cercanas al núcleo urbano de Puerto Sagunto.
Tal y como recoge la exposición de motivos, la contaminación acústica, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), es uno de los factores ambientales que provoca más problemas de salud. Solo en Europa, según la Agencia Europa del Medio Ambiente (AEMA), causa al año 16.600 muertes prematuras y más de 72.000 hospitalizaciones. El ruido provoca múltiples trastornos: alteraciones de la audición y alteraciones extra auditivas, como las que afectan al aparato cardiovascular, al respiratorio, al digestivo. Tiene efectos psicológicos (trastornos de sueño, irritabilidad, estrés, depresión, dolores frecuentes de cabeza, etc.)
En este sentido, la exposición continúa explicando que los vecinos y vecinas de varias comunidades de la zona portuaria situada en la entrada norte de Puerto de Sagunto, y constituidos en la plataforma “NO + RUIDOS”, han alertado de un problema real de contaminación acústica grave, derivado de la actividad desarrollada en la zona y responsabilidad de la APV.
Por ello, en la moción se insiste en que debe haber un plan de actuación y de limitación de sus niveles en el que la ciudadanía sea conocedora y se vayan reduciendo hasta los niveles permitidos. Así, entre otros acuerdos aprobados se encuentra solicitar que la APV pueda informar a los vecinos y vecinas de los datos obtenidos en las distintas mediciones de la cabina de control ambiental y medición de la calidad del aire.
Asimismo, que la APV busque otra ubicación más alejada de la zona urbana más próxima a Puerto de Sagunto para las maniobras de almacenaje de materiales o procesamiento de chatarra; e intentar reconducir el tráfico de camiones a partir de unas horas determinadas. También, que regule la sonoridad y contaminación acústica de los motores auxiliares de los barcos atracados, ya que de manera ininterrumpida están más de 48 horas en funcionamiento.
