Uno de los aspectos que se destacó cuando se tomó la decisión de constituir la empresa mixta del ciclo integral del agua, en este caso Aigües de Sagunt, fue el de llevar el agua potable de calidad a todos los habitantes del municipio, en clara referencia a los que se nutrían de pozos particulares, tal y como ocurría en el caso del Barrio de Churruca, donde ya disponen de agua potable suministrada por la compañía de capital mixto y, especialmente, Almardà. Sin embargo, doce años después de que se constituyera Aigües de Sagunt, en amplias zonas de área residencial de Almardà, Corinto y Malvarrosa, todavía no disponen de agua potable, ya que los recursos hídricos de que se nutren, que proceden de pozos particulares, no son aptos para el consumo humano.

Efectivamente, alrededor de un millar de viviendas situadas en esta parte del municipio siguen abasteciéndose del agua procedente de los pozos de Almardà y Malvasur, por lo que, al no ser apta para el consumo humano, tienen que recurrir al agua embotellada para beber y cocinar. A todo esto hay que agregar que las tuberías, que son de uralita, al tener tantos años, puesto que se instalaron en la década de los 70 del siglo pasado, se producen averías y reventones con demasiada frecuencia, lo cual va en detrimento del servicio que reciben los vecinos.

Los usuarios son conscientes de que se incrementará significativamente el recibo del agua cuando el suministro lo realice Aguas de Sagunto, pero, por otro lado, también se ahorrarán la molestia y el gasto de comprar agua embotellada. No obstante, aquellos residentes, los menos, que solo habitan en la zona durante el verano y, además, poseen piscina, prefieren seguir abasteciéndose de los pozos de Almardà porque les sale mucho más económico el servicio.

Consejo de Aguas

Precisamente, en la mañana de ayer jueves se celebró reunión del Consejo de Aigües de Sagunt, donde se trató, entre otros asuntos, la asignatura pendiente de Almardà, tal y como reconoce la propia compañía: «existen todavía polígonos en Almardá que no han cedido sus redes de distribución al Ayuntamiento y que se suministran desde los dos pozos privados que quedan operativos en la zona, con la problemática que incumplen con la legislación sanitaria vigente desde abril de 2013 tal como se comunicó desde el Departamento de Salud Pública de la Conselleria de Sanitat Universal i Salut Pública de la Generalitat Valenciana».

Es más, la propia empresa pone de relieve las dificultades existentes en la zona para extender el suministro a todos los usuarios: «se lleva tiempo intentando llegar a un acuerdo para la cesión de las instalaciones de la Sociedad Civil particular de Aguas de Almardá, pero de momento, por diferentes circunstancias, no ha sido posible. En el caso del pozo Malvasur, entendemos que será más sencillo por la predisposición del propietario a llegar algún tipo de acuerdo. De hecho, ya se le presta habitualmente ayuda operativa desde Aigües de Sagunt para resolver averías de distinta índole».

En Aigües de Sagunt, donde ya está toda la infraestructura dispuesta para poder prestar este servicio en Almardà, se baraja la posibilidad de que no se pueda cerrar un acuerdo con, al menos, la propiedad del Pozo de Almardà, por lo que se plantea que tenga que intervenir el Ayuntamiento de Sagunto de oficio: «Hay que indicar que, en el supuesto que no sea posible llegar a acuerdos, el Ayuntamiento podría sondear la posibilidad de actuar de "Oficio" en aras a garantizar un agua distribuida que se adecue a lo establecido en el Real Decreto 140/2003 al igual que en el resto del municipio atendido por Aigües de Sagunt, S.A.».

Nitratos, sulfatos y plaguicidas

Hay que tener en cuenta que, de acuerdo con los análisis realizados al agua que se le viene suministrado a ese millar de vecinos de Almardà desde estos dos pozos, se han detectado sustancias tales como: nitratos, plaguicidas y sulfatos, con una presencia mayor a los valores legalmente establecidos, por lo que, desde el 17 de abril de 2013, es decir, hace más de ocho años, ya se comunicó que el agua de dicha zona de abastecimiento era considerada como «agua no apta para el consumo». Asimismo, se indicó que debían implantar medidas correctoras que garantizaran una calidad de agua distribuida que se adecuara a lo establecido por el Real Decreto 140/2003.

Antecedentes

Tal y como recogía El Económico el 30 de septiembre de 2016, los accionistas del pozo que abastece de agua al área de Almardà, recibieron, antes del verano de 2016, una carta del Ayuntamiento de Sagunto en la que les comunicaban que la Conselleria de Sanidad les había informado de que el agua que se estaba suministrando «no es potable», y dieron un ultimátum de que si en el «plazo de 15 días esa agua no era potable se tendría que clausurar el pozo», según informaba José Girona, presidente de la asociación de vecinos de Almardà.

En aquel momento, al representante vecinal le pareció una «barbaridad» que la Conselleria de Sanidad quisiera cerrar dicha instalación de suministro de agua «porque todos los vecinos que se abastecen del pozo saben desde hace mucho tiempo, que esa agua no es potable y para beber y cocinar utilizan agua potable que compran en garrafas o embotellada», argumentaba.

Girona iba más allá, resaltando que instalar una depuradora para potabilizar el agua que abastece al área de Almardà tenía un coste de un millón de euros, «y hacer esa inversión supone un esfuerzo muy grande para los vecinos, ya que dentro de dos o tres años el ayuntamiento dirá: dejen de suministrar el agua que lo va a hacer Aguas de Sagunto», aventuraba.

Ante este dilema, los accionistas del pozo, que son los residentes de las viviendas que se abastecen del agua no potable, respondieron a la administración «que, si la Conselleria quiere cerrar el pozo que lo comunique y se cerrará, pero tendrá que ser Aguas de Sagunto quien se encargue de suministrar agua potable a las viviendas. De momento el pozo sigue funcionando», aseguraba el representante de los vecinos.

Asimismo, resaltaba José Girona que el pozo de referencia sacaba más agua en verano que en invierno, por lo que consideraba que «es una lástima» que esa instalación de agua no se utilice por la empresa mixta, porque según los estudios que realizaron, ese yacimiento «cuenta con suficiente caudal para suministrar a toda Almardà y a todo el núcleo de Puerto de Sagunto», aseguraba el representante vecinal.

El portavoz vecinal señalaba que había varios polígonos de Almardà que, por aquellas fechas, ya tenían instalada la red de agua potable realizada por Aigües de Sagunt, y que, además, contaban con la red de suministro del pozo, pero que había otros polígonos que sólo contaban con la red de agua que les abastecía del pozo en cuestión, «y si el Ayuntamiento metiera el agua por las instalaciones privadas, tendría que llegar a un acuerdo económico con los socios del pozo». Sin embargo, en la actualidad, Aigües de Sagunt ya ha completado la red de suministro en toda la zona de Almardà.