El pasado viernes, 28 de mayo, la profesora belga Annie Timmermans y su perra Dax completaron su viaje de más de 1.500 kilómetros desde su domicilio en Bélgica hasta el refugio de SOS Animales Sagunto en Estivella donde fue recibida por voluntarios de esta entidad, así como por el concejal delegado del departamento de Actividad Física, Salud y Deportes del consistorio saguntino, Javier Timón.
La iniciativa denominada ‘Odisea Dax y Annie’ buscaba recaudar fondos para dos organizaciones sin ánimo de lucro. Una de ellas es la protectora de animales SOS Animales Sagunto, que es una asociación que lleva más de diez años rescatando perros abandonados y maltratados para darles una nueva oportunidad de vivir dignamente, por lo que promueve su adopción en hogares. Y, por otro lado, para el proyecto solidario Het Equizorgbos, en Bélgica, en el que se trabaja con caballos como herramienta terapéutica para ayudar a jóvenes y niños, principalmente, mediante técnicas adecuadas para casos como autismo, TDAH o Alta Sensibilidad.
Javier Timón quiso felicitar en persona a Annie Timmermans por su fortaleza para afrontar este reto: «Gracias por dar visibilidad y apoyo a proyectos altruistas como el de SOS Animales Sagunto, que lleva muchos años trabajando por la protección animal y por la concienciación social sobre el abandono y el maltrato de los animales, favoreciendo que obtengan un entorno y una vida más digna».
Además de la causa solidaria de este reto, cabe destacar que Annie decidió embarcarse en él a sus 60 años, tras superar un cáncer de mama y, en el cual, ha recorrido 25 kilómetros al día durante 73 jornadas, afrontando además los cambios en las restricciones de la pandemia a su paso por Bélgica, Francia y España.
Una odisea que ha movilizado a cientos de personas de los tres países, en los cuales le han ofrecido un lugar en el que dormir, le han mostrado apoyo y ánimo con la publicación de comentarios en la web y, mediante la cual, le han llegado donaciones y aportaciones económicas para estos dos proyectos altruistas. Dichos proyectos los difundía patrocinando cada kilómetro con una aportación de solo tres euros.
