El Teniente de Alcalde de Almardà, y concejal del grupo municipal Compromís per Sagunt, Pepe Gil, ha manifestado el total rechazo de su formación a la propuesta presentada por la Demarcación de Costas para las playas del sur de Castelló. «Entendemos la preocupación de Almenara, porque sí, es preocupante... pero este proyecto va, directamente, en contra de nuestras playas», ha afirmado.
Así se manifestó Gil en la Comisión especial de Playas celebrada este miércoles entre los representantes municipales y que pretendía marcar las líneas de actuación para hacer frente a esta situación. «En la comisión se dio cuenta del informe que ha elaborado el profesor Vicente Esteban Chapapría en el cual, a nuestro entender, se hace una revisión de todo el proyecto que ha presentado Costas para mejorar y detener la erosión a las costas del norte de nuestras playas», asegura.
Ese informe «pone en evidencia las diversas incongruencias planteadas en los estudios elaborados por la misma Dirección General de Costas y otras instituciones respecto del proyecto finalmente aprobado. Nosotros pensamos que, en este punto, precisamente, es en el que tiene que basarse el recurso contencioso-administrativo que tiene que presentar el ayuntamiento para hacer frente al proyecto. Un proyecto que, si vamos al origen de la problemática, fue diseñado por el gobierno del PP», señala Pepe Gil.
Como ha indicado el concejal de Compromís per Sagunt: «Es evidente que no tenemos nada contra Almenara ni contra nadie, pero, lógicamente, tenemos que defender los intereses de nuestra ciudad y de nuestra playa que está en el sur de las playas de Castelló. Tal como indica el informe, entendemos que estamos en una unidad territorial que va desde Burriana hasta el Puerto de Sagunto y, por lo tanto, las actuaciones tendrían que ejecutarse de forma conjunta».
Además, y para concluir, señala que «el proyecto que, presumiblemente, se presentará en breve, no parece dar solución real y sostenible a nuestras costas. Por lo tanto, Compromís opina que es innegociable presentar el contencioso–administrativo, para paralizar, si es que se puede, la ejecución de la solución que nos presentan para salvar las costas del sur de Castelló. No es negociable que aquellas se mejoren y que las nuestras sean las perjudicadas».
