El sindicato CSIF ha denunciado que seis trabajadores de personal de Administración y Servicios dependientes de la Conselleria de Educación, Cultura y Deportes comparten «una diminuta caseta sin ventilación ni servicios» para realizar su labor. La central sindical lamenta que la solución provisional adoptada ante el calor y la obligación de separación haya sido ubicarlos en el porche de un edificio en ruinas.
Desde la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) explica: «La jornada de trabajo se desarrolla en un barracón prefabricado, con muy poco espacio, similar a las casetas de helados que instalan en algunas playas en verano». El sindicato ha avisado que ese diminuto recinto carece de aire acondicionado, calefacción o servicios, por lo que si necesitan recurrir a estos últimos los trabajadores se ven obligados a desplazarse 800 metros, por una pendiente pronunciada, hasta llegar hasta el anfiteatro.
CSIF apunta que «de manera provisional y debido al calor en las horas centrales del día, han permitido a los trabajadores, como medida especial, realizar sus tareas de información, atención y venta de entradas a los visitantes en un porche de un pequeño edificio en ruinas, al que no tienen permitida la entrada porque el techo está a punto de desprenderse».
El sindicato recalca que esta situación, que afecta a cinco trabajadores de vigilancia y a un subalterno, podría haberse subsanado si existiera el Centro de Visitantes del Castillo, cuyas obras deberían de haber concluido hace años. CSIF subraya igualmente que ha trasladado esta cuestión tanto a Conselleria como al Instituto Valenciano de Seguridad y Salud Laboral (Invassat), que ha inspeccionado las instalaciones y realizado un informe al respecto.
La central sindical ha reclamado soluciones urgentes e insta a Conselleria de Educación, Cultura y Deportes a que ubique de inmediato a sus empleados en unas instalaciones que reúnan unas mínimas condiciones.
