El dirigente vecinal, Francisco García ‘Charcu’
La directiva de la asociación de vecinos de Baladre, denuncia que la vivienda en este barrio «se encuentra en un momento crítico, debido a la política que han aplicado las entidades bancarias». Explica Francisco García, presidente, de la entidad vecinal, que el origen del problema de los okupas, son los deshaucios llevados a cabo por los bancos, a propietarios de viviendas de la barriada al no poder hacer frente a los pagos de la hipoteca. «Los banco han ido desalojando a los vecinos de sus casas pasando las mismas a propiedad de las entidades financieras».
Pero el problema no es solo para los ciudadanos desalojados, se extiende al resto de vecinos, «porque los bancos no se preocupan de esas viviendas que desalojaron, y que después están siendo habitadas por okupas. Es rara la escalera en la que no hay dos o tres viviendas tomadas por estas personas que han dado patada en la puerta, por lo que la mayoría del barrio está afectado, pero donde más hay es en la calle Poeta Querol y en la plaza Echegaray».
Aclara García que en las escaleras que los inmuebles son propiedad de Conselleria no hay okupas. «En cuanto la administración tienen conocimiento de que alguna se sus viviendas son ocupadas ilegalmente, envían a la policía y desalojan». Esto ocurre porque periódicamente se traslada a Baladre un supervisor que comprueba el estado de las viviendas públicas. «Pero los banqueros que desalojaron a los propietarios de esas viviendas, porque no podían pagar la hipoteca, a los okupas no los desalojan».
Asimismo señalan desde la directiva vecinal, que cuando detectan que una casa ha sido okupada informan al ayuntamiento, «pero no hacen nada».
Deterioro del barrio
Los okupas, según afirma el presidente de la asociación de vecinos, están creando muchos problemas: «están conectados de forma clandestina al suministro de luz y agua, no pagan gastos de comunidad, no mantienen relaciones de buena vecindad con el resto de las personas que viven en la misma escalera, hay amenazas, etc. y los presidentes de escalera sienten temor, de que esa tensión actual pueda llegar a más, por ello, la mayoría de vecinos de Baladre, queremos que se marchen los okupas, porque además de no atender los pagos comunitarios y amenazar a vecinos, muestran su incivismo, tirando la basura en el suelo, no participan en la limpieza de la escalera, tenemos unos problemas increíbles con ellos».
García muesra su agradecimiento a la SAG porque atiende muy bien la limpieza de la barriada, «aunque dura poco, por la actitud de algunos vecinos a los que nos hemos referido y hay que subrayar que existen ratas como conejos y el ayuntamiento debe controlar esa plaga, no venir solo al barrio cuando hay elecciones».
En la actualidad, la mayor preocupación para el barrio y para la asociación vecinal, es que «hay muchos okupas y de todo tipo, incluso algunos “venden” por una determinada cantidad (1.000 o más euros) las viviendas donde habitan que son propiedad de un banco, y le cuentan al comprador que el piso es de su abuelo y ya no quiere vivir en él, hay familias que aceptan ese trato, y se efectúa el cambio de okupas», señala el dirigente vecinal.
Tácticas
Aguas de Sagunto corta el suministro,a todos los usuarios que no pagan la factura del agua potable, pero según Paco García, «cuando la empresa les corta el suministro, los okupas compran otros latiguillos y se vuelven a enganchar, es decir que el agua les cuesta tres euros».
Prosigue el representante de la vecindad que otra de las tácticas de los okupas es, que cuando se enteran que han sido denunciados, precisamente por habitar en vivienda ajena, «aunque están dentro, no les abren la puerta a los policías y los agentes se marchan».
Desde la AA.VV reiteran que la raíz del problema, se encuentra en las entidades financieras que poseen una parte importante de viviendas del barrio (unas cincuenta) y no se preocupan de intentar alquilar esas viviendas, porque la mayoría están en trámite judicial, y por otro lado, los bancos tampoco hacen efectivo los gastos de la comunidad como hacen algunos propietarios.
Propuestas de la Asociación
La asociación de vecinos propuso una reunión con el ayuntamiento e invitar a la misma, a los directores de las entidades financieras dueñas de las viviendas, las inmobiliarias y otros estamentos interesados y comunicar a los banqueros «que si sus pisos, no los van a alquilar que tabiquen las entradas, porque de esta manera la gente ya no okuparía, pero desde el ayuntamiento no hicieron caso y no se celebró».
En la AA.VV, suponen que como el ayuntamiento ha solicitado al Instituto de la Vivienda (EVHA) que le ceda la gestión de los pisos públicos y lo ha denegado, «ya no quieren saber nada del asunto».
Otro de los deseos de la entidad vecinal, es que todos los pisos estén ocupados por familias que los necesiten, «pero al parecer, a los bancos no les interesa. Ahora se pueden vender una de esas viviendas entorno a los 20.000 euros y las están comprando familias árabes. Pero el problema es que propietarios particulares están vendiendo sus casas también, y el motivo es que consideran que Baladre, no es un buen sitio para vivir . Y eso es lo que hay que evitar, que estas familias se vayan del barrio», afirma el presidente.
Siguiendo con las propuestas, desde la entidad, opinan que el ayuntamiento debería poner los medios «para que Baladre no se convierta en un gueto: Okupas ni uno, las viviendas para las familias que los necesiten, que se negocie con el banco, que el os nuevos usuarios de la vivienda la arreglen un poco y que sepan convivir y no las utilicen para otros menesteres de insalubridad pública».
EVHA
Las normas de la entidad Valenciana de Vivienda y Suelo (EVHA) que antes se llamaba IVVSA, (Instituto Valenciano de la Vivienda) han cambiado. Según García, hace tiempo los inquilinos de las viviendas en Baladre, firmaban un documento como que estaban al corriente del pago, de lo contrario no percibían la bonificación estipulada. «Ahora EVHA da la bonificación en cualquier caso, siempre que el presidente de la escalera firme un papel al inquilino como que está al corriente de pago, aunque deba cinco o seis años de comunidad y no pague un euro, pero el presiente que va a estar un año en el cargo, no quiere problemas con sus vecinos y firma el papel bajo amenaza. Y con este método la mitad de los vecinos de la mayoría de escaleras no pagan y la cuota es de 5 ó 10 euros al mes. Pero en EVHA, lo saben, porque yo lo comenté en una reunión hace tiempo».
Reducción de la vivienda pública
Según informan desde la entidad vecinal, la Conselleria ha reducido la propiedad de sus viviendas en Baladre «sobre un ochenta por cien, y el resto de las viviendas, son propiedad de particulares y de los bancos, pero tal y como se está crispando la convivencia, muchos propietarios están vendiendo sus pisos, porque el barrio se está convirtiendo en un gueto y no entendemos a quién puede interesar esta situación. Estoy convencido que en el plazo de cuatro ó cinco años, la mayoría de los vecinos antiguos se habrán marchado, y eso ocurrirá por dejación de las administraciones»,opina García.
Finalmente reiteran su propuesta: una reunión a la que asistan, ayuntamiento, AA.VV., los bancos, EVHA, la policía y poner las cartas sobre la mesa «y se limitaría el número de Okupas».
