La Diputación de Valencia comenzará después del verano las obras de ampliación de la CV-317 entre Sagunto y Canet. Con la actuación, presupuestada en 3 millones de euros, se adecuará el trazado y se reordenarán los accesos. El objetivo, según el diputado de Carreteras, Pablo Seguí, «es mejorar la seguridad vial en un tramo de alta concentración de accidentes».
La corporación provincial cuenta ya con todos los terrenos necesarios para empezar, a falta de que se realice una prospección arqueológica. El plazo previsto para la realización de las obras es de nueve meses desde el inicio del replanteo, por lo que la nueva carretera podría estar en servicio en el primer trimestre de 2019.
La CV-317 es uno de los ejes vertebradores de la red de carreteras de la Diputación de Valencia. Su longitud aproximada es de 3,5 km y dispone de un carril por sentido, sin arcenes ni bermas. El problema principal de esta vía es la insuficiencia de sección transversal, un trazado geométrico antiguo que cuenta con curvas de radios pequeños después de largas rectas y una multitud de accesos directos sin ordenación. A ello hay que sumar que se trata de una vía cuya intensidad media de circulación es de 4.000 vehículos al día, de los cuales un 2% son vehículos pesados.
Debido a estas condiciones, el tramo inicial de la vía, hasta el kilómetro 2,2, está catalogado como Tramo de Concentración de Accidentes. «Eliminar este punto negro es una prioridad para la Diputación de València en materia de seguridad vial», asegura el diputado Seguí.
Para solucionarlo, se ha previsto una actuación integral que incluye la ampliación de la plataforma existente, la mejora de su trazado para adecuarlo al tráfico actual, y la reordenación significativa de los accesos e intersecciones existentes.
En concreto, la actuación se centrará entre los 3,2 kilómetros que discurren el final del paso inferior sobre las vías del ferrocarril y la intersección giratoria existente con la carretera CV-320. Tras la actuación, la plataforma pasará a tener un ancho total de 11,5 metros, lo que permitirá generar una calzada de 7 metros, arcenes de 1,5 metros y bermas de 0,75 m. Dicho trazado se adecuará a una velocidad de proyecto de 60 km/hora.
Adicionalmente, se han proyectado un total de tres intersecciones en “T” con la red principal de caminos, dotadas de carriles centrales de espera, con la finalidad de solventar los giros a izquierdas de los accesos de parcela a la carretera y mejorar así la seguridad de los usuarios.
