A los vecinos del Fusión, que ya se habían hecho ilusiones con el anuncio del soterramiento de las líneas de alta tensión, realizado por el cuatripartito municipal, les ha caído como un jarro de agua fría que desde el consistorio les hayan informado esta misma mañana de que no va a ser posible, al menos de momento, que el municipio adelante el dinero para el enterramiento de las líneas eléctricas. Según ha explicado a este periódico el presidente de la Asociación de Vecinos de Fusión, Antonio Manuel Moreno, ha sido el concejal de Urbanismo, Pablo Abelleira, el que le ha informado de los impedimentos legales aducidos por el secretario general del Ayuntamiento, para que sea el consistorio el que adelante el dinero de esa actuación.
Este periódico ha consultado esta cuestión con el edil de ADN Morvedre, Pablo Abelleira, quien ha confirmado que, efectivamente, ha sido el secretario general del consistorio el que ha informado esta mañana, en la reunión de la Junta de Gobierno, de forma desfavorable a esta actuación en los términos planteados. Sin embargo, Abelleira confía en que se pueda buscar un encaje legal para que, finalmente, sea posible enterrar las líneas de alta tensión.
Como se recordará, el cuatripartito municipal de Sagunto acordó en la Junta Local de Gobierno del viernes de la pasada semana adelantar 447.015 euros, IVA no incluido, procedentes de las cuotas de urbanización, para el soterramiento de las líneas de alta tensión pendientes en el Macrosector III, es decir, el Fusión.
Esta decisión, que ahora ha sido revocada por cuestiones de legalidad, se tomó después de que el Ayuntamiento de Sagunto iniciara una negociación entre el agente urbanizador y la empresa encargada del soterramiento de los cables, Iberdrola Distribución Eléctrica. Así, tras la valoración económica del coste del soterramiento hecha por Iberdrola, que asciende a 1.238.356 euros, IVA no incluido, se alcanzó un convenio por el cual el consistorio adelantaría 447.015 euros, IVA no incluido, para iniciar los trabajos, que se suman a los 791.340 euros, IVA no incluido, que el agente urbanizador ya abonó anteriormente.
El consistorio esperaba recuperar la cantidad adelantada, es decir, que fuera devuelta por parte del agente urbanizador en el plazo de cuatro meses. En el caso de que éste no abonase el dinero en el tiempo fijado, el consistorio lo recuperaría de la garantía definitiva aportada por Alser en su momento. Sin embargo, es sobradamente conocido que terminar todo el PAI superaría en mucho, en cuanto a coste se refiere, el aval que en su momento depositó el agente urbanizador.
Decepción entre los vecinos del barrio
En palabras del presidente de la Asociación de Vecinos Fusión, Antonio Manuel Moreno, la noticia ha sido decepcionante: «Los vecinos de Fusión nos sentimos muy decepcionados con la noticia, después de habernos hecho ilusiones sobre el soterramiento de las torres de alta tensión, aunque, la verdad sea dicha, no nos terminábamos de fiar. Pues Alser, el agente urbanizador del PAI, también firmó un contrato con el Ayuntamiento, donde su plazo máximo para la finalización del PAI Fusión era de 5 años, cuya fecha límite era el año 2010. En ese año debería de haberse acabado el PAI Fusión en su totalidad, soterramiento de las líneas de alta tensión incluidas. Contrato que incumplió». Con estos antecedentes, el olvido durante tantos años que ha sufrido el barrio y la proximidad de las elecciones municipales previstas para mayo de 2018, desde la entidad vecinal se preguntan: «¿Porqué esta vez no lo iban a incumplir? A la vista está».
Por otro lado, el dirigente vecinal enumera otras carencias de menor envergadura que sí se podrían haber resuelto ya: «Seguimos sin ningún parque infantil terminado de los tres proyectados en Fusión, ningún parque para los más de 30 niños menores de 10 años que viven aquí. Tampoco tenemos ninguno de sus bulevares ajardinados para poder dar un paseo en condiciones por este barrio. No tenemos ninguna zona verde, ninguna. Eso sí, aceras, asfalto y farolas nos sobran. Todo esto que falta debería de estar hecho desde 2010».
Concluye Antonio Manuel Moreno indicando que después de ocho años esperando que se culmine el PAI Fusión, se sienten insultados: «Esperamos que no se den palmaditas en la espalda a nuestra costa, pues nos sentimos insultados cuando dicen que han dado respuesta a nuestras quejas, cuando hace años que tendría que estar esta zona terminada».
