Vecinos de la montaña de Sagunto demandan a los propietarios de propiedades situadas en estos terrenos que no tiren ciertos materiales a los contenedores de orgánico situados en las proximidades.
Con la llegada del calor, los dueños de casas y terrenos de la montaña de Sagunto se ponen manos a la obra para adecentar sus casas y terrenos y disfrutar así del verano en plena naturaleza. Unas tareas que tienen como consecuencia, como han explicado personas que viven todo el año en esta zona a El Económico, «contenedores para material orgánico repletos a más no poder de todo tipo de productos, materiales, muebles, poda, troncos de árboles, entre otros, que hacen que no podamos tirar la basura en los mismos», han declarado.
S. M, vecina del camino Font de Ribera cuenta a este rotativo que «se nota mucho la llegada del buen tiempo, ya que se ve mucho más ambiente por aquí. La gente acude a sus casas, casetas y terrenos a arreglarlos, cosa que me parece perfecto. Lo que no me parece tan bien es que tiran todo tipo de cosas a los contenedores, cuando los que hay en la montaña son sólo para orgánico».
Contenedores específicos
La misma fuente sigue explicando que «el otro día tuve que ir con la bolsa de basura hasta Sagunto ciudad para depositarla allí en un contenedor ya que el más cercano a mi casa estaba lleno de restos de poda, troncos de árbol, piedras, y bloques de cemento, consecuencia de una gran limpieza en alguna de las parcelas cercanas. Estos contenedores no son para eso, para este tipo de materiales hay contenedores habilitados, y si tiran estas cosas aquí hacen que no podamos tirar la basura, que es para lo que en realidad están».
Sofá tirado en al lado de un contenedor de orgánico en el Camino Font de Ribera de la montaña de SaguntoN. G, vecino del Camino de Bonilles, situado en la montaña de Sagunto explica que «en el contenedor más cercano a mi casa, en la que vivo todo el año, lleva varios días tirado al lado de un contenedor un sofá. Como este tipo de cosas no se ha de tirar aquí, sino que hay que llamar a la S.A.G para que venga a retirarlos, pues los trabajadores no lo recogen», cuenta señalando el sofá. «Lo mismo sucede con los restos de poda, los bloques de cemento, los sanitarios, el amianto y todo tipo de cosas que la gente deja al lado de los contenedores y se tira ahí días y días», añade.
Al lado de los contenedores pero también en el interior de la montaña, ya que El Económico ha podido comprobar en un pequeño paseo por esta zona como decenas de bolsas llenas de bloques de cemento, muebles de escayola y madera, malas hierbas e incluso animales muertos, son la ornamentación de las zonas más verdes de la ciudad.
Es por ello que los vecinos demandan mayor sentido común y solicitan que cada material sea depositado en las zonas habilitadas para ello, aunque esto suponga, dicen, «tener que hacer un viaje en coche un poco más largo».
Así mismo, aprovechan la ocasión para pedir al Ayuntamiento de Sagunto que instale en la zona más contenedores específicos en los que poder depositar el vidrio y el papel, entre otros, ya que, afirman, «somos muchas las personas que vivimos aquí todo el año, por lo que nos encantaría tener contenedores en los que poder reciclar».
Respeto, responsabilidad y sentido común. Esto es lo que solicitan los vecinos para disfrutar de un verano saludable en la montaña y en cualquier lugar de la ciudad.
Al lado de los contenedores pero también en el interior de la montaña, ya que El Económico ha podido comprobar en un pequeño paseo por esta zona como decenas de bolsas llenas de bloques de cemento, muebles de escayola y madera, malas hierbas e incluso animales muertos, son la ornamentación de las zonas más verdes de la ciudad.
Es por ello que los vecinos demandan mayor sentido común y solicitan que cada material sea depositado en las zonas habilitadas para ello, aunque esto suponga, dicen, «tener que hacer un viaje en coche un poco más largo».
Así mismo, aprovechan la ocasión para pedir al Ayuntamiento de Sagunto que instale en la zona más contenedores específicos en los que poder depositar el vidrio y el papel, entre otros, ya que, afirman, «somos muchas las personas que vivimos aquí todo el año, por lo que nos encantaría tener contenedores en los que poder reciclar».
Respeto, responsabilidad y sentido común. Esto es lo que solicitan los vecinos para disfrutar de un verano saludable en la montaña y en cualquier lugar de la ciudad.
