Representantes de Iniciativa Porteña (IP) y vecinos de la capital del Camp de Morvedre ya se encuentran en Madrid para hacer llegar al Ministerio de Fomento la reivindicación de la llegada del tren de cercanías a Puerto de Sagunto como ya informó El Económico en su suplemento informativo del pasado viernes. Esta formación ha fletado un autobús para todas aquellas personas que han querido participar en este acto que, como explicó el portavoz de IP, Manuel González sirve «para dar un toque de atención, tanto al Ayuntamiento de Sagunto como a la Generalitat Valenciana, por su falta de interés en la puesta en marcha de esta infraestructura básica».
Y es que ya ha transcurrido ya más de un año desde que la diputada autonómica y concejal del Ayuntamiento de Sagunto por Compromís, Teresa García, presentara a los medios informativos, el 28 de septiembre de 2015, el Informe INECO, donde se barajan diversas alternativas a la línea de Cercanías de Renfe para el núcleo urbano de Puerto de Sagunto. Pero, desde entonces no hay nuevas noticias sobre este proyecto del que, como se recordará, la Generalitat mostró, con la unanimidad de todos los grupos políticos de la cámara autonómica, su apoyo a la llegada del tren de cercanías hasta este núcleo de población.
«Este acto lo enfocamos como algo simbólico ya que el Ayuntamiento de Sagunto y la Generalitat Valenciana no han movido ficha en el último año. Es por este motivo por el cual desde IP hemos acercado hasta el Ministerio de Fomento la documentación. Estamos cansados de gestos, sin acciones concretas, con a excepción del informe INECO que acreditó la viabilidad técnica y económica del proyecto; se gastaron en ese informe 20.000 euros pero no ha tenido continuidad con un proyecto de ejecución, con consignaciones presupuestarias y con compromisos de fechas», señala el edil segregacionista.
El portavoz de IP, asimismo, ha criticado que ninguna otra fuerza política, a pesar de su ofrecimiento, haya acompañado a esta comitiva hasta Madrid «señal inequívoca de la falta de implicación que tienen en este asunto». Finalmente, González ha apuntado: «Me temo que esto puede convertirse en un juego político entre Valencia y Madrid. Casi tocamos este proyecto con la punta de los dedos. Hace falta mayor presión por parte de los ciudadanos y, de hecho, IP promoverá nuevas acciones».