Alumnos de la UNED, clamando en el pleno municipal del pasado septiembre por la continuidad de este servicio en Sagunto
El hecho de que el pleno municipal ordinario del pasado septiembre aprobara la moción por la que se mandataba al Ayuntamiento de Sagunto a cumplir con los compromisos contraídos con la UNED, mediante el convenio suscrito entre las partes, no significa que el equipo de Gobierno acate lo acordado por el pleno, de hecho, el tripartito, como norma general, no suele ejecutar los acuerdos plenarios de aquellas mociones que políticamente no le convienen.
Esto proceder no es nuevo, en la anterior legislatura, bajo el mandato del Partido Popular, también ocurría algo parecido, tanto es así, que el edil popular, Sergio Muniesa, llegó a decir que una moción aprobada no era más que un ruego.
Hasta el momento, según ha explicado a este periódico el director del centro Alzira – Valencia, “Francisco Tomás y Valiente” de la UNED, Javier Paniagua, el Ayuntamiento no ha hecho efectivos los 80.000 euros correspondientes al ejercicio 2015, es más, si antes del día 13, que es cuando empieza el curso, no dispone de una certificación del Ayuntamiento de Sagunto, garantizando el pago de los 80.000 euros correspondientes al curso 2016, el aula de la UNED en Sagunto no abrirá sus puertas. La UNED recibía el importe acordado por convenio entre el consistorio saguntino y la universidad, de 80.000 euros, en dos pagos de 40.000, uno en junio y otro en octubre de cada año, sin embargo, hasta el momento, el municipio no ha abonado la cuantía correspondiente al curso 2015, ya finalizado.
Modificación unilateral del convenio
El Gobierno tripartito que forman Compromís, ADN Morvedre y Esquerra Unida, tomó el acuerdo en la Junta Local de Gobierno celebrada el pasado 18 de septiembre, es decir, antes de celebrarse el pleno municipal, de modificar lo pactado en el convenio, en cuanto al pago se refiere. Efectivamente, según figura en una comunicación oficial, que tuvo salida del registro general del Ayuntamiento de Sagunto el pasado 28 de septiembre y fue recibido 2 días después en la UNED, el equipo de Gobierno comunica la cuantía a pagar, en base a los nuevos criterios que el propio Ayuntamiento fija, obviando lo pactado en el convenio. En este sentido, el Consistorio justifica esta modificación en los siguientes términos: «El Consorcio comunica que el presupuesto del Aula de Sagunto para el año 2015 es de 80.721 euros. Como el convenio se encuentra afectado por los cambios introducidos por la Ley 27/2013 de 27 de diciembre, de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local (LRSAL), que en el preámbulo aclara las competencias municipales para evitar duplicidad con las competencias de otras administraciones, de forma que se cumpla el principio 'una administración, una competencia'».
A partir de aquí, el propio Ayuntamiento de Sagunto, realiza una interpretración, concluyendo que no se podrán beneficiar de la aportación municipal los alumnos matriculados con posterioridad a la proclamación de dicha norma legal, esto es, el 27 de diciembre de 2013. En el mismo documento se indica que el Centro Asociado ha facilitado los datos sobre alumnado, matriculados en el curso 2014-2015, que es de un total de 302, de los que 131 lo han hecho después de la entrada en vigor de la mencionada ley.
Una vez delimitado el número de alumnos anteriores y posteriores a la proclamación de la norma, el Ayuntamiento de Sagunto divide, por los 12 meses que tiene el año, los 80.721 euros que tiene que abonar a la UNED por cada ejercicio, la cifra resultante, de 6.726,75 euros por mes, la vuelve a dividir por los 302 alumnos, y el resultado, de 22,27 euros, que es el coste mensual por alumno, lo multiplica por el total que se matriculó con anterioridad a la entrada en vigor de la ley, que son 171, por lo que el propio Ayuntamiento llega a la conclusión de que la cantidad a abonar cada mes es de 3.808 euros, es decir, 22.853,14 euros del primer semestre. De acuerdo con estas cuentas, lo que tendría que abonar el Ayuntamiento de Sagunto a la UNED son 45.706 euros al año, es decir poco más de la mitad de lo que en su día pactaron la universidad y el municipio.
Ni que decir tiene que este nuevo sistema, que establece el consistorio saguntino para calcular el pago, modifica lo pactado en el convenio vigente. Es por este motivo por el que la dirección del Centro Alzira – Valencia, “Francisco Tomás y Valiente” de la UNED, siguiendo instrucciones de la Junta Rectora del mismo, va a rechazar esta aportación económica, por entender que no se ajusta a lo establecido en el convenio firmado entre las partes, según ha confirmado a este periodico su titular, Javier Paniagua.
En cuanto a la interpretación de la ley que hace el Ayuntamiento, Paniagua ha recordado que «existe una moratoria hasta el 1 de enero de 2017 y, hasta esa fecha, pueden ocurrir muchos acontecimientos, desde que esa misma ley se modifique o anule, hasta que se pueda negociar un nuevo convenio a partir de 2017». Por otro lado, Paniagua ha indicado que, tras lo acordado en el pleno, «están a la espera de que el Ayuntamiento rectifique», ya que si no lo hace, es un hecho que los 300 alumnos que tiene la UNED en esta zona dejarán de disfrutar del servicio que se puso en marcha en 2001 a instancias del concejal de Enseñanza del Bloc, Enric Ariño.
El director del centro ha recordado que en el año 2001 firmaron un convenio el Ayuntamiento de Sagunto y la UNED, donde quedan claramente definidas las obligaciones de las partes. Por otro lado, ha destacado que el centro Alzira – Valencia, “Francisco Tomás y Valiente” de la UNED es absolutamente transparente y que tienen por costumbre facilitar la información que le solicitan. En cuanto a los costes, Paniagua ha reconocido que con los 80.000 euros no se cubren al cien por cien los gastos que genera la actividad en Sagunto, aunque el centro está dispuesto a seguir prestando su servicio, puesto que así se convino en su momento, siempre y cuando el Ayuntamiento de Sagunto cumpla con su parte del acuerdo.
Bernardo Bartolomé
UPyD pide la dimisión del concejal de Educación
El debate originado en el último pleno municipal, a propósito de la moción presentada para garantizar que la UNED siga prestando sus servicios en Sagunto, alcanzó un tono muy elevado y de claro enfrentamiento hasta el final del punto. Tanto es así, que el propio concejal de Enseñanza, el nacionalista José Manuel Tarazona, se quedó sólo, al ser él único miembro del equipo de Gobierno que votó en contra de dicha moción, puesto que sus otros compañeros de Compromís y ADN Morvedre, la marca blanca de Podemos, optaron por la abstención, mientras que EU se unía a la oposición, apoyando la propuesta de apoyo a la Universidad Nacional de Educación a Distancia.
Entre el público, particularmente el alumnado de la UNED allí presente, fue muy comentada la actuación del edil de Enseñanza, sobre todo, cuando salió dando golpes sobre el atril y, especialmente, cuando se quedó solo votando en contra de la propuesta. Esta intervención, que no fue indiferente para nadie, no ha tardado en originar las consiguientes reacciones. En este sentido cabe resaltar la petición de dimisión que hoy mismo ha hecho pública el delegado local de Unión Progreso y democracia (UPyD), Bernardo Bartolomé, que no ha dudado en calificar de «bochornosa» la actuación del señor Tarazona en un asunto como el de la permanencia de la UNED en la capital del Camp de Morvedre.
UPyD en Sagunto ha pedido la dimisión del concejal de Enseñanza, José Manuel Tarazona, tras su intervención en el último pleno municipal, por considerar que este municipio «no merece estar representado por concejales incapaces de resolver los problemas de sus habitantes», según ha explicado el delegado de UPyD, bernardo Bartolomé. La Delegación Local de Unión Progreso y Democracia en Sagunto, ha calificado de «bochornosa» la actuación de Tarazona durante la sesión plenaria del martes pasado en la que se debatieron, entre otros temas, el cese de actividad de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED).
El Delegado local de UPyD en Sagunto, Bernardo Bartolomé, ha sido muy contundente al criticar la intervención del edil de Compromís: «abordar un tema tan complejo como la permanencia de la UNED en nuestra localidad, requiere como mínimo de una preparación previa, como, por ejemplo, la que demostraron con sus respectivas intervenciones en ese mismo pleno, el concejal de IP, Juan Antonio Guillén, o el director del Centro UNED-Valencia-Alzira "Francisco Tomás y Valiente", Javier Paniagua. En cambio, tanto el discurso como la actuación del señor Tarazona fueron bochornosos. El concejal se mostró como pollo sin cabeza en todas sus intervenciones», asegura el representante del partido magenta.
Bartolomé explica cuáles son las razones que le llevan a pedir la solicitud de dimisión: «el concejal de Compromís demostró en el pleno desconocer el funcionamiento de la UNED, la cantidad de alumnos matriculados en Sagunto o el importe de la matrícula que pagan los estudiantes por asignatura. Es más, faltó a la verdad en repetidas ocasiones. Como colofón se quedó solo en la votación, votando en contra de la moción presentada por PP-PSOE, en la que su propio partido se abstuvo. Por todo ello, nos vemos en la obligación de solicitar la dimisión del concejal de Educación y Cultura, José Manuel Tarazona Jurado. Repito, Sagunto no merece estar representado por concejales incapaces de resolver los problemas de sus habitantes», puntualiza el delegado de la opción magenta en la ciudad.
Para concluir, Bernardo Bartolomé pone especial énfasis en resaltar que «la política debe servir para preservar derechos, entre otros, el derecho a la educación. En UPyD tenemos el convencimiento de que la regeneración democrática no supone un simple cambio de siglas o colores políticos, sino conseguir que nuestras instituciones funcionen perfectamente para tratar de ofrecer a nuestros conciudadanos los servicios más eficientes posibles. Para ello, necesitamos buenos gestores. Exigiremos a todos los representantes del consistorio cumplir sus compromisos y asumir la responsabilidad por sus actos, dando cuantas explicaciones les sean requeridas. Al señor Tarazona sólo le queda hacer un último favor a la ciudad y a sí mismo para acabar su trayectoria política de una forma digna: dimitir», asevera Bartolomé.
