La última sesión plenaria ordinaria de la legislatura del Ayuntamiento de Sagunto no estuvo exenta de polémica. A pesar de que el equipo de gobierno decidió retirar el punto del orden del día donde se iba a tratar la modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para la previsión de una cantera solicitada por la empresa Lafarge para su estudio posterior por la nueva corporación, una moción de Compromís sobre la protección del suelo forestal enzarzó en una discusión a los portavoces de la formación nacionalista y de Iniciativa Porteña (IP), Quico Fernández y Manolo González, respectivamente.
Así pues, la intención de Compromís era que el plenario aprobase una moción que pedía adaptar el PGOU de Sagunto para cumplir con la Estrategia Territorial Valenciana y el Plan de Acción Territorial de la Comunitat Valenciana según sus directrices, elaborar un catálogo de protección ambiental y paisajístico de Sagunto y declarar la incompatibilidad de uso de tolerancia extractiva en suelo forestal estratégico del término de Sagunto, «dado que es contraria a la legislación urbanística, territorial y sectorial en materia forestal y minera de la Comunitat Valenciana».
Tras la exposición de la propuesta por parte de la edil Teresa García, tomó la palabra el portavoz segregacionista quien afirmó que «parece que Compromís está empeñado en que cierre Lafarge». En este momento recordó todas las empresas por las que el consistorio ha luchado para garantizar su continuidad como es el caso de Galmed, Bosal o Tumesa, entre otras, y aprovechó esta ocasión para ponerse una camiseta donde se podía leer la frase Lafarge no se cierra, ante los aplausos de parte del público que se encontraba en el salón de plenos del consistorio saguntino.
A partir de este momento se llevó a cabo un cruce de acusaciones entre los concejales de Compromís e IP donde se pudieron escuchar palabras como «lamentable, vendidos, asqueroso o fascista» ante el estupor del resto de ediles de la corporación municipal saguntina y del público presente, algunos de los cuáles también gritaron tanto a favor como en contra de la continuidad de la multinacional cementera.
«Lafarge nos está avasallando, no estamos de acuerdo con la extracción porque se está destrozando nuestro territorio y nuestro medio natural que no se puede regenerar. Algunos miembros de IP han asegurado que como este asunto afecta a Sagunto, pues que se jodan, porque si les estuviera afectando a sus casas seguro que se quejarían. Ésta es la empresa más contaminante que tenemos y lo que queremos es dejar a las próximas generaciones un buen entorno natural», aseguró el portavoz nacionalista, Quico Fernández.
Por su parte, su homólogo de IP, Manuel González, afirmó que su formación «siempre se va a defender los puestos de trabajo de esta empresa y más cuando los técnicos municipales han dado luz verde tanto al convenio que apoyamos 18 de los 25 concejales así como el punto que iba a ir en esta sesión plenaria pero que finalmente se ha retirado».
Finalmente, tras un intenso debate, y a propuesta de la edil del PSPV-PSOE, Nuria Hernández, esta moción fue retirada del orden del día ya que la petición de la socialista fue apoyada por el equipo de gobierno y el grupo municipal de IP y con los votos contrarios de Esquerra Unida (EU) y los cuatro concejales de Compromís per Sagunt.
